Mundo Irreal ~ [ Terminada ]

Capitulo 9 - Jung Kook

Era ya de mañana y me encontraba en la azotea mirando como el sol nos daba los buenos días, todos estaban dentro descansando para comenzar el entrenamiento de Sun Hee en horas de la tarde.

Bajé de la azotea para ejercitarme un poco alrededor de la cabaña, podía escuchar el agua que corría por el rio y las aves que despertaban de su gran sueño; me dispuse a tomar una carrera contra mí mismo, mi record actual en velocidad era de 172,340 km/h y quería hacerlo mucho más grande. Mientras corría choqué contra una hermosa chica de cabello rubio, sus labios eran de un color rojo tan hermoso y tentador; ella realmente era hermosa.

-Lo siento, no te vi – Me disculpé.

-De eso me doy cuenta Kook – Respondió ella levantándose del suelo y retirando el cabello de su rostro, entonces me di cuenta que no era una simple chica.

-¿Lalisa? ¿Qué haces aquí? –

-Lo mismo que tú, cariño mío –

Lalisa era un ángel sanador como Jin, pero se me hacía totalmente extraño que ella se encontrara en la tierra en estos momentos.

-¿Viniste a cuidar de Sun Hee? – Pregunté.

Ella me miró fijamente y soltó una carcajada.

-Sabes que eso sería lo último que haría –

-¿Entonces qué haces aquí? –

-Vengo por dos razones. La primera es que fui asignada como ángel guardián de Sook Yu y la segunda razón es por qué me enviaron para darte un mensaje de advertencia – Ella seguía limpiando sus ropas.

-¿Una advertencia? – Realmente tenía una idea de que advertencia me hablaba, anoche cometí un error y esa era la razón por la que Lalisa estaba frente a mí.

-Mientras te cuento ¿por qué no damos un paseo? Estuve entrenando en el cielo y casi soy tan rápida como tú – Un brillo se vio en sus ojos.

Lalisa era realmente encantadora y hermosa, junto a sus hermanas Jennie, Rosé y Jisoo eran unos de los ángeles más codiciados en el cielo, eran hermosas y cualquiera diera todo por ser su esposo. Pero mi corazón pertenecía a una dulce y frágil chica llamada Sun Hee.

-Claro, vamos – Le ofrecí una sonrisa y tomé mi posición de carrera.

-Si yo gano, me debes una comida y si tu ganas haré lo que me pidas – Dijo ella tomando una posición de carrera.

-¿Incluso si es cuidar de Sun Hee? – Sonreí.

-Incluso si es cuidar de ella – Su sonrisa se apagó y pude ver como el dolor vivía dentro de ella aún.

-Entonces a la cuenta de tres… uno…dos…tres –

Corrimos como la luz, pero esta vez dejaría que la hermosa Lalisa ganara esta carrera. Era lo menos que podía hacer después de lo que hice, ella merecía mucho más de lo que yo pude darle.

El punto de meta era la cabaña y cuando llegamos ella gritó y reía de emoción por haber ganado, yo también sonreía por qué me hacía feliz verla sonreír de nuevo.

-¡Gané! Aunque sé que me dejaste ganar Kookie – Ella me señaló con sus dedos y se acercó a mí – Ahora me debes una cena señorito – Sonrió y bajó su mirada a mis labios – Te extrañé –

Sabía lo que ella sentía, pero tenía que explicarle las cosas que estaban sucediendo y sobre todo los sentimientos que vivían en mí ahora.

-Lo siento Lisa – La atraje hacia mí y le di un fuerte abrazo, ella también respondió a mi abrazo y se aferró a mí.