Cap 11

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Cuando terminan de maquillarme llaman a la puerta.  Al abrir me encuentro a Spencer.

—wow,  estás... Wow—exclama asombrado

—me lo tomaré como un alago —le respondo burlona

—estás lista? —pregunta saliendo de su ensoñación

—lo he estado alguna vez? —le pregunto aunque más bien va a dirigida a mí

Él me coge de las manos y me haces mirarlo.

—sé que eres fuerte y serás una gran reina para este pequeño país

—gracias Spencer

Ambos caminabamos en silencio rumbo a donde estaba la mayoría de invitados que vendrían a la boda,  solo que los míos no estarían.

Cuando entramos nos cegaron los flashes pero nunca quitamos nuestras sonrisas de falsa felicidad.
Nos dejaron por fin y Spencer me arrastró con él

—que ocurre Spencer? —le pregunté cuando paramos a un lado del escenario,  en resumen,  donde no llegaban las cámaras

—sé que esto no es lo que deseas... —le corto

—no me vengas con lo mismo que tu hermana que me empieza a hartar.  Todos saben pero no pueden hacer nada.  Eso lo escuché como mínimo tres veces de personas distintas

—no me dejaste terminar. Sé que esto no lo deseas y no soy tu principe azul pero quizás si pueda ser tu hada madrina—me responde con gracia

—pero que dices? —digo con pequeñas risas escapando de mis labios

—sal

Eso me dejó algo confundida pero entonces vi a alguien salir entre las sombras.  Pero cuando vi ese pelo pelirrojo no pude evitar soltar un grito.
Corrí a abrazarla y me lié a llorar en sus hombro

—tranquila,  que arruinas tu maquillaje —me decía mientras acaricia mi cabello

Cuando me calmo,  me separo y la miro

—cómo?

—tu hada madrina envió a un tío a buscarme con su jet privado

Entonces me giro y lo veo con una pequeña sonrisa.  Rápidamente corro hacia él y me lanzo a sus brazos mientras le abrazo con fuerza.  Él tardó en corresponderme pero lo hizo al final poniendo una mano en mi cintura y otra en mi espalda

—gracias mi príncipe azul—le susurro en el oído

Él me besa en la mejilla para luego salir dejándonos a las dos solas

—hasta cuando te quedas? —le pregunto más que se va

—me acabas de ver y ya me quieres lejos? —bromea

—no es eso tonta

—hasta el día de tu boda,  luego te irás de luna de miel y yo no hago nada aquí

—luna de miel? —pregunto confundida

—no has organizado eso? —exclama horrorizada—tienes delito

—no me puse a pensar en eso,  además no me pienso acostar con él —susurro lo último

—por qué?  Esta bueno

—pero no me voy a acostar con él.  No somos nada

—sois prometidos y luego un matrimonio,  te parece poco?

—pero no es por amor,  Celeste.  Si fuera de otra manera no lo dudaría pero no es el caso

—que aburrida eres—hace un mohín y tira de mi brazo para salir de nuevo a la gente.

Estuve toda la noche con mi amiga bailando y bebiendo,  siempre estaba Spencer al lado mía ya que estaban las cámaras.  Su amigo Dan también junto nosotros y Thalia se nos unió más tarde

Ya eran las cuatro de la mañana y todos se fueron ya.  Celeste se queda en la habitación que está al lado mía.

Unos golpes en la puerta me despierta.  Gruñó y me tapo la cabeza con la almohada pero siguen los golpes de las narices

—j*der,  que dolor de cabeza—me quejo mientras me levanto

Al abrir la puerta me encuentro a Spencer.  Le dejo la puerta abierta para que pase y yo vuelvo a la cama.

—alguien tiene resaca por casualidad? —pregunta burlón

—cállate idi*ta,  que querías?

—tienes que ir a por el traje de novia.  Mi hermana,  tu prima y mejor amiga te están esperando en la entrada.  Quedaste con ellas,  recuerdas?

—no tengo ganas—murmuro

—y piensas ir entonces al altar con dos trapos blancos cuando está lleno de cámaras? —pregunta divertido

—te crees muy divertido? —pregunto molesta—ya voy,  eres peor que mi padre cuando iba al instituto

—podría haberte tirado agua helada

—podría haberte dejado sin descendencia

—no quieres tener hijos?

—no y ahora largo

—lo de los hijos tenemos que hablarlo

—no voy a acostarme contigo solo porque se pueda seguir el linaje,  capisci?

Él sale molesto de la habitación.
Yo me pongo un jeans oscuro junto una blusa salmón que vi en el armario y mi chaqueta de cuero encima junto a los tacones negros.  Me recogí el pelo en una coleta de caballo y me maquille de forma básica.

Voy prácticamente corriendo a donde están las chicas

—corriste la maratón? —se mofa mi mejor amiga

—quieres ver tu lo que es correr una maratón idi*ta? —pregunto molesta

—estás de un humor de perros eh?

—que te despierte el idi*ta de tu prometido llamando a la puerta y te obligue a salir cuando te mata la cabeza y ni siquiera desayunes no es lo mejor y mucho menos que diga que se quiere acostar contigo

—hecha el freno linda,  repite lo qye dijo mi hermano—me pide Thalia

—le amenacé con dejarlo sin descendencia y me salió con lo de los hijos y cuando le dije que no iba a tener hijos y mucho menos acostarme con él se molestó

—uhh,  aquí hay tema—se ríe mi amiga

—oh cállate que no puedo más

La semana pasó rápida junto a mi mejor amiga.  El día antes de la boda me llamó Brad

—por fin me llamas —digo más descolgar

—lo siento,  estuve ocupado.  Me enteré de que te casas,  que es eso?

—me obligan así que no me reproches dios

—pero cómo?

—no lo sé,  no hablo con mis padres.  Los veré mañana

—espero que te vaya bien en tu nueva vida como reina

—yo también deseo que te vaya bien Bradley.  Pasé los mejores años de mi vida junto a tí.  Si hubiera sido diferente quizás serías tu el novio

—la pasé muy bien contigo Laura.  Pero supongo que aquí termina todo no?

—supongo.  Espero que encuentres el amor,  cosa que yo no podré

—busca el amor mi reina,  busca a alguien que te sepa valorar y nunca te deje escapar. Como estoy haciendo yo ahora mismo.

—te amo Brad

—yo también te amo Marie

Una lágrima silenciosa cayó por mi mejilla. Sabía que esto era un adiós y no volvería a tener esa felicidad que tuve con él

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