This Is Me

Cap 27

—yo solo deseo ser feliz con mi modo de vida. No necesito ni joyas ni dinero solo necesito mi vida de nuevo.—miro ahora Spencer—lamento mucho todo esto pero sé que te gusta otra y sabes que me gusta otro.  No pertenezco a tu país y me voy mañana a primera hora con el primer vuelo que haya a Los Ángeles.  Espero que seas feliz y sé que serás un magnífico rey junto a una estupenda reina pero esa no soy yo.  Y no puedo fingir algo que no soy.  Tengo empatía y me puse en tu lugar pero mira también desde mi punto de vista Spencer.  Quiero ser egoísta y pensar en mí por una vez.  Ya pensé demasiado en otros, esta soy yo —le doy un beso en la mejilla a Spencer ya que caminé hacia él y salgo luego de la carpa con la cabeza bien alta y sin prisa.

Una vez fuera de la carpa siento como me llaman así que me doy la vuelta para encontrarme con Elizabeth y Damiano y detrás de ellos los padres de mi madre junto a Ethan

—Laura,  que hiciste? —me pregunta mi madre con voz de reproche

No sé porque pensé la absurda idea de que estaría orgullosa de mí por una vez en su vida

—lo correcto Elizabeth.  Aquí se acabó el linaje Rossetti

—esta mocosa es igual que su pu*etera madre—salta el viejo

—Respeto señor.  Que yo sepa ya no soy una niña—le contesto molesta

—entra ahí,  discúlpate y cásate —me ordena ese viejo?

—no eres nada mío como para mandarme viejo—escupo furiosa

—ese respeto niña y soy tu abuelo—pero que insolente

—mi abuelo materno está muerto.  Primero compórtate como tal y luego exige esa etiqueta.  Que solo eres un viejo cascarrabias

Me levantó la mano con la intención de pegarme.  Mi madre y su madre se taparon la cara,  mi padre miro hacia otro lado.  Son unos cobardes de mie*da todos.

Yo espero la cachetada con la cabeza bien alta pero esa nunca llega.  Abro los ojos lentamente y observo como Ethan puso su mano para que no la moviese.

—que haces Ethan? —le pregunta el viejo

—nunca más le levantes la mano a ella,  entendiste? —exclama un Ethan furioso que nos sorprende a todos

Sin escuchar nada más salgo de allí corriendo y me encierro en mi habitación donde de repente me encuentro a Victoria?

—hoy es el día de acosar a Laura y no lo sé? —pregunto con sarcasmo

—no puedes pretender mucho menos cuando montaste la que montaste ahí —habla tranquilamente

—qué necesitas? —le pregunto mientras lanzo los tacones hacia el armario y el velo al suelo

—solo darte las gracias—eso me sorprende—sé que sabes que me gusta Spencer y él de mí.  Y te quería dar las gracias por darnos la oportunidad de estar juntos

—lo sabía Victoria,  no me preguntes como pero lo supe.  Y por qué estar al lado de alguien que ama a otra persona y yo también lo hago?  No era justo para ninguno y sabía que él no podría enfrentarse a sus padres

Ella solo me abraza y se marchó en silencio por la puerta.

Me cambié a mi pijama de Los Ángeles y me tumbe con el móvil en la cama a esperar a que otro llamase a mi puerta.  Porque sinceramente sé que ocurriría.

A los minutos veo que entra Spencer

—hey —le saludo

—podemos hablar? —me pregunta serio frente a mi cama

—claro,  dime—le respondo con una sonrisa mientras me siento en mi cama

—quería preguntarle el por qué de sus actos

  — sabes? todo el mundo me lo pregunta y no son capaces de ver y pensar ellos solos. Dímelo tú, Spencer, por qué crees que hice tal cosa?

 — no sé las causas de ello. Sino no se lo preguntaría— su formalidad hacia mi persona me estaba empezando a molestar

  — puedes tutearme, que dijera "no" en el altar no es sinónimo de distanciarnos. No vayamos en retroceso por favor 

 — sigue sin responder a mi pregunta— con este chico no se puede 

  — vi mi vida si decía "sí" y no me gustó lo que vi en ella. Tengo metas en la vida y casarme no está entre ellas por el momento. Así que sí, fui egoista y sobrepuse mi felicidad y mi vida antes que la del resto. Pero estoy segura de que serás un gran rey en un futuro junto a la persona que escojas para acompañarte en este trayecto que es tu vida amándoos  y para acompañarte en el reinato de esta isla— le digo mis motivos y le deseo lo mejor

 — Yo no puedo escoger Laura, me obligarán con otra

  — Tienes voz y voto. Niégate como yo lo hice. No te dejes mandar, es tu vida y esa solo la vivirás tú, nadie más por ti. Y en serio te deseo de todo corazón que seas muy feliz porque te lo mereces — le doy ánimos

  — Te deseo lo mismo, princesa — dice para luego darme un beso en la mejilla

  — Mañana por la mañana me voy. Espero que me vengas a despedir

 — dalo por hecho— me asegura

Me desperté al día siguiente con una sonrisa plasmada en mi cara. Hoy por fin me largaría de aquí.

Me levanté de un salto de la cama y me cambié mi pijama por unos jeans rotos y una blusa holgada morada junto a mis converses blancas.

Metí mis pertenencias en una maleta que encontré y lo dejé todo como el primer día que entré en esta habitación de ensueño. Cualquier chica hubiera aceptado todo esto con tal de tener estos lujos pero yo no soy cualquiera y esto sé que no es lo mío.

Salgo por los grandes jardines de palacio, esto es lo que voy a extrañar, con mi maleta y la mochila que traje el primer día. Espero que me dejen continuar en la universidad y no tenga que esperar al próximo semestre.

Llego a la entrada y allí veo a mi amiga también con su maleta, ella se vuelve conmigo.

En ese momento el taxi que pedí llega justo en frente de las grandes puertas que dan el paso al interior del palacio. El taxista se baja del auto y nos ayuda con las maletas metiéndolas en el maletero ahorrándonos un trabajo

 —Lista?— me pregunta mi amiga mientras me mira con sus ojos verdes y una sonrisa en su cara