Sombras destinadas (KuroMahi/yaoi)

Reglas incumplidas

Alcohol era el principal olor de la estancia donde se encontraban los estudiantes de la universidad, algunos mayores, otros menores, entre ellos el castaño, este miraba algo aterrado a sus alrededores, y al tiempo pendiente de que Misono no se le perdiera de vista.

—¡Era de esperar de la sociedad de ahora!— gritó Misono para que el castaño lo escuchara.

—¡¿Que?! ¡No te escucho, la música está muy fuerte!

—¡Habla más duro que la música está muy fuerte!

El castaño suspiro y le indicó a el pequeño a ir por algo de beber. Este lo siguió pareciendo entender.

Mahiru estaba nervioso, haber escapado de el peli celeste a pesar de que estaba advertido del peligro que corría, le ponía los pelos de la nuca erizados. Era inimaginable que una persona como él desobedeciera algo e hiciera cosas peligrosas, pero no pensaba arriesgarse a emborracharse. Obviamente.

Pidieron dos vasos de soda y se sentaron en el sofá de una parte del salón, hablaron, o mas bien gritaron, sobre algunas cosas de sus vidas, Mahiru descubrió que el peli morado tenia gran riqueza, tal vez por eso su actitud de creerse el que manda. También que su cuerpo es algo débil, por lo que el castaño se aseguraría de que no hiciera ejercicio físico.

Al decirle sobre Sakuya el peli morado se impactó muy poco, pues él también tenía gusto por los hombres, y también estaba en una relación con un rubio, del cual Mahiru olvidó su nombre.

—Hola, ¿me puedo sentar?— preguntó un hombre de cabellos naranjas que el castaño reconoció al instante.

—Law..... Por supuesto.— El de cabellos naranjas se sentó al lado de Mahiru, tomó un trago de la bebida que traía en su mano derecha y luego miró al castaño.

—¿Cómo te ha ido con mi hermano?— La pregunta tomó por sorpresa a Mahiru, en cierto modo sabía que ese tema saldría a la luz siendo él el hermano menor y más pendiente de Ash, pero al tiempo no quería hablar nada al respecto.

—¿Licht te lo dijo?— preguntó, primero quería averiguar la forma en la que Lawless se había enterado.

—Si, fue lo primero que me dijo al vernos hace poco. Parecía estar preocupado por eso.

—Bueno.... Pues, como ha pasado poco tiempo no sabría decirte.— El castaño miró de reojo a el peli morado, que los observaba detenidamente, tendría que dar bastantes explicaciones luego.

—¿Intentó algo?— Mahiru sabia a lo que se refería, miró al suelo y asintió levemente.— ¿Está bien?

—Logré detenerlo a tiempo. Bueno, casi. No pasó nada grave por suerte.

—Mahiru, confío en que lo cuidarás, toma mi número, llama si pasa algo, no me gusta.... Ver a mi hermano así y creo que tú puedes hacer algo.— Le entregó al castaño un trozo de papel con el número anotado, Mahiru quería preguntarle a Lawless por qué pensaba que él podría hacer algo, tal vez se refería a lo sucedido años atrás, pero al voltear, este ya no estaba.

Una media hora después el castaño estaba totalmente mareado, aparentemente, dedujo él, la soda tenia una especie de droga, no lo sabía, pero no controlaba su cuerpo, ni nada.

Un hombre se le acercó notando lo "borracho" que se encontraba el castaño, le dijo que lo llevaría a enfermería, el menor se negó, no quería dejar a Misono solo, pero este ya dormía plácidamente en el sofá.

Estando en la parte trasera del salón de fiestas, Mahiru agradecía por la ayuda, aún sosteniendo su cabeza por el mareo. Pero esas gracias se detuvieron cuando fue acorralado contra la pared por el hombre que parecía querer ayudarle.