Capítulo 3_ Separados.

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Pov Inu.

Bajé del auto cargando a Jessi apenas Ryu me lo permitió. Entramos a la mansión y me sorprendo mucho al ver las hermosas habitaciones de la hermosa mansión. Toda la casa era de hermosos colores cálidos y muy agradable. Pero, era fría a la vez.

Mi casa era un pequeño departamento muy apartado y pobre en un barrio horrible en donde se podían escuchar tiroteos cada dos días. Pero, era mi hogar. Sabía que cuando yo volvía de la escuela un poco asustado mi madre estaría en casa para abrazarme. Cuando tenía fiebre o me sentía mal mi padre me cuidaría y me haría sentir bien.

Todo mi hogar había caído por el maldito hombre que camina en frente mío con una gran sonrisa que me hace tener ganas de romperle la cara a golpes. Mis padres ya no estarías para consolarme cuando tenga miedo, ayudarme con los pequeños caprichos de Jessi o cuidarme cuando tenga fiebre. Estoy solo.

La pequeña que estaba en mis brazos despertó y me miró con unos ojos tan tristes que me rompieron el corazón. Le dediqué una triste sonrisa y ella se acurrucó en mi pecho buscando calor. Ambos estamos en pijama y el pequeño vestido de mi hermanita es de verano. Mi madre siempre le decía que no debía usar ropa de verano en invierno, tendría que haberle hecho caso.

-- ¿Ryu puedes darme ropa para mi hermana..? -- El rubio me dio una mirada fulminante la cual comprendí a la perfección, me trague lo poco que me quedaba de orgullo e hice lo que él quería -- P...Por favor, amo... --.

Note la satisfacción en su cara y la sorpresa en los ojos de mi hermana. Me sentía un asco, ser el esclavo del asesino de tus padres y el causante del llanto de tu propia hermana es un asco.

-- Bien -- Ryu miró a mi hermana sonriendo -- te irás hoy en la tarde a una escuela que será tu hogar. Tendrás todo lo que desees pero no vendrás nunca aquí, excepto en las vacaciones--.

Mire muy triste a mi hermanita que me miraba  con desesperación. Quería estar siempre a su lado pero estoy seguro de que si se queda este enfermo va a usarla en mi contra. No dejare que dañe a Jessi, es lo único que me queda y no quiero verla llorar por culpa de este maldito.

-- Hermano... -- Jessi me miro llorando y yo no sabía que hacer -- Por favor no me dejes, prometo portarme bien y no pedirte nada pero por favor no me dejes sola.. --.

Sus hermosos y grandes ojos estaban llenos de lágrimas y mis manos comenzaron a temblar. ¿Cómo dejé que pasara esto? Deje que me pusieran un collar como un animal, estoy llamando amo al asesino de mis padres y estoy dejando que se lleven a mi hermana a un lugar que ni siquiera conozco.

-- Quiero saber de la escuela, quiero saber todo de ella y solo se ira si yo considero que es seguro para una niña como ella ¿Entendido, Ryu? -- No tengo pensado decirle amo nunca más, no dejaré que mi hermana me vea en un estado tan lamentable.

-- Mocoso... -- Ryu se ve tan molesto que escondo a Jessi detrás mío para servirle como escudo por si acaso. -- Ésa niña se ira a donde yo quiera por que tanto como ella son míos. La única diferencia es que eres un perro inmundo y ella una pequeña niña así que como buen perro te callarás y dejarás que tu amo haga lo que quiera --.

No lo pensé mucho y lo enfrenté para proteger a Jessi que apretaba fuertemente mi ropa.

-- ¡No dejaré que hagas lo que quieras! ¡Yo no soy un perro y ella no es de la propiedad de nadie! -- Intento hacerme el valiente aunque me muero de miedo. Ryu ríe levemente y me agarra del collar.

-- aceptaste ser una patética mascota y este collar lo confirma -- Intento alejarme pero apreta fuertemente el collar -- No te atrevas a contradecirme o juro que te haré sufrir de formas que ni te imaginas --.

No quiero que Jessi me vea ser tan patético pero tengo tanto miedo que no lo soporto y bajo la cabeza conteniendo las lágrimas de furia e impotencia.

-- Como te haz portado mal no podrás despedirte de tu hermana o hablar por teléfono con ella... --.

Rápidamente agarro a Jessi del brazo y se la llevo sin que yo pudiese hacer nada. Dos mayordomos me impedían salir a proteger a mi hermanita. ¿Por qué tuve que hablar? Tendría que haber bajado la cabeza y hacer lo que él me ordenaba.

-- ¡Dejenme! ¡Jessi, Jessi! -- Las lágrimas caían de mis ojos sin cesar mientras oía como mi hermana gritaba mi nombre -- ¡¡Jessi!! --.

Sentí un pinchazo en mi cuello y luego todo se puso negro, Jessi ya no está conmigo y conseguí que Ryu se enojara. No quiero despertar, quiero morir... ¿Para qué despertar? Jessi no está conmigo, no sé donde estoy y sé que el maldito va a hacerme sufrir tanto como a dicho... Odio decirlo, pero estoy aterrado...

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Suspiro de libertad (Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora