Esta noche iríamos a Intenso. Estaba en la habitación de Julia, prácticamente estábamos solas en casa algo que mi mamá no sabía, la madre de Julia había ido a uno de sus tantos viajes para promocionar su marca de cosméticos. Solo estaba la señora que se ocupada de la casa y su ayudante además del chófer.
-Que tal este ?- Me pregunta Julia mientras me muestra un mini vestido negro.
-No es demasiado pequeño- contesto.
Ella voltea los ojos.
-Peluda, de eso se trata- sugiere.
Obviamente quería algo sexi pero no aquello. Era demasiado señido al cuerpo.
- Está bien. -
Ella ya había elegido su vestido era verde oscuro, le quedaba espectacular.
Decidí pararme y ayudarla, y me enamore de lo primero que toque.
-Ese! No crees que es demasiado suelto, no marca nada tú figura- Me dice.
- Claro que sí! Es súper corto se verán increíbles mis piernas- le dije.
- Ok, pontelo entonces-
Fui al baño con el vestido. Era de un azul fuerte, no llegaba a ser azul marino, más bien era un poco chillón. No tenía mangas ni espalda, el cuello estaba bordado por pequeñas flores lindas y delicadas y el escote en la espalda estaba bordeado por las mismas. Me quite la ropa interior y solo me coloque el vestido. Pienso que se me veía espectacular, tengo un poco más de cuerpo que Julia por lo que se me veía más ajustado.
-Wao!- Solo dijo Julia al mirarme y sonrió.
-Es perfecto- le dije y ella lo afirmó.
Me había arreglado el pelo pero no me lo había cortado , Julia se las arreglo para hacerme una coleta alta.
Me maquillo los ojos y en mis labios solo puso un poco de brillo. Me veía perfecta. Lista para seducir.
-Vamonos!- dijo eso inmediatamente nos marchamos. Estaba nerviosa pero a la vez ansiosa por todo.
Prácticamente nos escapamos, no dejamos que nos viera ningún empleado.
Julia conducía con cuidado sin embargo la música estaba muy alta.
De un momento a otro se detuvo y apago la música.
-Bien Living, aquí está tu identificación falsa, tienes lo análisis verdad??- preguntó mientras me pasaba una tarjeta de plástico que claramente decía que era mayor de edad.
-Sí, los tengo en la cartera. Ya llegamos?- pregunte mirando a mi alrededor, no veía nada parecido a un club del sexo.
De hecho nunca había visto uno.
-Nos faltan algunas esquinas. Estas segura Living?- preguntó una vez más.
-No del todo. Se que es una locura pero no me voy arrepentir a estas alturas!- le dije.
-Puedes hacerlo, simplemente le doy vuelta al auto, es fácil!- dijo sonriendo.
-No, vámonos tengo una enorme curiosidad!-.
Conté algunas 5 esquinas y nos detuvimos.
Era una especie de edificio para decir verdad no se veía nada raro más bien parecía una discoteca de alta categoría.
Las puertas eran de cristales sin embargo no se veía nada. El edificio tenía tres plantas y alguna que otra ventana nada llamativo.
Había dos hombres familia de Don King Kong que estaban en la puerta, eran de complexiones fuertes y morenos, de esos que piensas que te arracaran el alma.
Julia les dio la llave del auto al que se encarga de guardarlo, creo.
-Identificaciones señoritas!- exigió uno de ellos con voz áspera. Además de feo habla feo.
Julia sacó la suya y se la mostró, el uso una pequeña linterna y la reviso.
Estaba algo nerviosa. No me podía ni imaginar que descubrieran que mi identificación sea falsa. Se la pase y el realizó el mismo procedimiento y por fin nos cedió el paso además de abrir la pesada puerta de cristal.
-Pensé que lo descubría - le susurre a Julia.
-Créeme él que la hizo, es el mejor en esto!- me dijo sonriendo.
Había una pasillo corto el cual nos depositó en una sala. Había muebles de colores oscuros y una especie de oficina.
-Aquí tenemos que dejar nuestros análisis- me dijo Julia y se aproximó para pasar los suyo atrás de una abertura que había en aquella oficina especial que no se veía nada sólo un cubículo.
Julia me hizo seña para que depositara los mío.
Uno minutos después salió un caballero de la oficina con una hermosa sonrisa. Era guapo!
Alto, fornido y Moreno!
-Hola señoritas, aquí están sus brazaletes pueden tomar el tercer ascensor el cual las llevará a su destino- nos dijo mientras nos colocaba una cinta dorada muy chula.
Seguimos las instrucciones y subimos en el ascensor.
-Te sientes cómoda?- Me pregunto Julia.
-Hasta ahora sí. La verdad no se que pensar de este lugar. La primera vez que lo imaginé pensaba que sería como un burdel o algo por el estilo, antes de entrar me ha parecido una discoteca de ricos y ahora me parece una oficina de negocios- le dije.
Ella soltó una carcajada.
-Ya verás.!-
Cuando salimos del ascensor las cosas mejoraron mucho.
Estábamos en la azotea del lugar, había una enorme piscina llena de espuma y algunas personas tomaban un baño, otras excibian sus increíbles cuerpos en traje de baño.
Había una parte que tenía techo no estaba al aire libre como la piscina, ahí había un pequeño bar. Julia y yo nos acercamos.
-Que quieres de tomar? Aquí todas las bebidas tienen alcohol menos el agua-
-Lo mismo que tú- le respondí.
Ella pidió dos margaritas.
Me senté en las sillas típicas que hay en las barras admirando el lugar.
Había una pista de baile espectacular donde la gente se movía con sensualidad y no! No había tantos viejos como Julia había dicho habían chicos muy calientes como aquel que me estaba mirando justo ahora.
-Te está mirando!- Me susurró Julia sin apenas mover los labios.
-Lo sé, que hago?- le preguntó.
-Si te gusta, sonríe-
-Y si no? Se ve cretino-
-Desvía la mirada para que no des el mensaje equivocado-
Y así lo hice. Platicamos de algunas cosas mientras se relajaba el ambiente. Me sentía algo incómoda porque no llevaba ropa interior, pensé que a estas alturas estaría brincando la tablita.
-Vamos al lugar que nos interesa!- Me dijo mi amiga mientras me arrastraba entre la gente.
-Pensé que ya estábamos en el-
- No peluda, este es el lugar de socialización simplemente aquí te diviertes como en cualquier sitio nocturno. Digamos que tu te quieres divertir pero a una escala mayor-Dijo sonriendo perversamente.
Atravesamos la alberca y la disco y llegamos a una cabaña de madera oscura parecia la casa del lugar.
Julia la abrió sin dudar. La música era lenta y sensual, también había un bar pero las bebidas eran más exquisitas, pero lo que más me llamo la atención fue la cantidad de puertas que había. Suponía que eran las habitaciones donde la gente intimaba.
El lugar era gigante.
-Hay muchos chicos guapos-señaló la rubia multicolor.
-Tan rápido te olvidas de Fer-
-Que este a dieta no impide que pueda ver el menú!-
-Tienes razón!-
Nos sentamos en unas sillas un poco altas pero tenían cogines muy acogedor. Éramos leonas en busca de víctimas. Bueno al menos yo!
Había chicos interesantes pero como que no me llenaban mis expectativas.
Había bailado con dos pero uno hablaba como una niña y el otro demasiado egocéntrico.
-Quizás deberíamos marcharnos- sugerí.
-Es demasiado temprano. No te des por vencida tan rapi......O Santo Dios! Acaba de salir un demonio del mismo infierno- murmuró Julia mientras fijaba su vista en algún punto. También lleve mi vista ahí.
La palabra guapo era pequeña. Era alto y tenía músculos muy bien definido pero sobre todo era muy sexi increíblemente sexi.
No iba vestido como la mayoría con traje, simplemente unos jeans que parecían sus favoritos y una franelas negra que marcaba sus músculos bien definidos venía hacia nosotras.
-Julia piensa en Fer- se dijo ella misma. Sonreí.
El hombre si estaba guapo...ok! Era el hombre más sexi sobre el planeta tierra, pero por eso no tenía que dejar de girar el mundo o sí.
El llenaba mis expectativas pero al parecer yo no las de el, simplemente paso por mi lado y se dirigió al bar.
Pidió un whisky a las rocas.
-No puedes decir que no te ha gustado?!- añadió Julia.
-No es la gran cosa.-murmure sorviendo mi tercera o quinta margarita.
Julia levantó una de sus increíble cejas maquilladas, arqueandola.
-Ok, ese si se ve bien!- le dije.
Ella sonrió y me agarró el brazo para encaminarme a la pista.
-Vamos Muévete! Tienes que llamar su atención-
-No estás loca!- le dije me daba mucha vergüenza. No me iba a parar sola hacer movimientos extraños. Bailaba si pero no tan bien.
-Sólo deja que la música fluya!. Esta pieza es sensual, vamos! Y míralo directamente a los ojos hazlo entender que estas bailando para él-
Seguí aquel consejo. Lo mire directamente. El tenía la mirada perdida en el vaso parecía molesto.
Comencé a mover mis caderas a ritmo de Body Party de Ciara creo recordar y cerré mis ojos para olvidarme del lugar y sólo bailar.
Cuando abrí los ojos estaba sola en la pista, Julia no estaba por ningún lado pero si había llamado la atencion de alguien.
Aquel hombre me miraba como si me comiera tan despacio como el ritmo de la canción, sentí como mis pezones se endurecieron al instante y el se mordió el labio de una forma pausada, entonces me concentre en el, mis movimientos fueron más lento y sensual. No se si bailaba bien o mal pero hacia lo que decía la canción le brindaba una fiesta única y exclusivamente para él, entonces con pasos lentos el se acercó a mi, se veía demasiado sensual casi brutal.
Cuando estuvo frente a mi solo me agarro con fuerza de mi cintura y me besó
Tenía sabor a menta mezclado con whisky, sus labios se movían perfectamente con los míos, me recorría mi boca dando pequeñas mordidas y chupando con suavidad, su lengua no tardó en invadiar la mía, era mojada pero no en exceso, el era un maestro en ese arte, note como sus manos poco a poco bajaba a mis nalgas para luego tocarlas con maestrías. Cuando dejo de besarme sólo me señaló una de las puertas con la cabeza.
No había dicho nada. El era todo sensualidad y misterio.
Había llegado mi momento. Busque con la mirada a Julia y la encontré con un hombre platicando. Me levanto el dedo pulgar emocionada.
Así que agarré la mano de aquel misterioso hombre y me deje guiar por el.
Atravesamos una puerta que estaba alejada de las demás a un pasillo contrario.
Cuando abrió la puerta casi me quedo boquiabierta.
Aquella habitación tenía una cama gigante en el medio, había una bañera en una esquina, una silla rara frente a la cama y espejos muchos hasta en el techo. El encendió el stereo que estaba en algún lado oculto.
-Quiero verte bailar de nuevo, pero estaba ves quítandote la ropa!- dijo mientras se acomodaba en la cama frente a mi, sentado.
Su voz, tenía una voz de esas que hace que prácticamente tus bragas terminarán en el piso, no se como iba hacer eso desnudarmele así sin más, el mirándome, me daría mucha vergüenza, no tenía el cuerpo perfecto tenía algunas estrías desde la última vez que baje de peso, fue de forma brusca pero no se notaban tanto.
La canción era la misma así que moví mis caderas despacio mientras tocaba mi vestido. Era consciente de que no llevaba nada debajo.
Su mirada se clavaba en mi cintura cada vez que paraba como lo hacía la canción, se mordia los labios y tocaba su parte por encima del pantalón parecía que se iba a explotar, entonces me miró a los ojos incitandome a hacer lo que ya sabía. Me sentía la mujer más sensual del mundo además de que esa sensación que tenía en mi sexo me ardía.
Olvidé todo y poco a poco me subí el vestido para dejarlo caer a mi lado.
El miró mi cuerpo con si fuera un candy y entonces subió el volumen del radio y se paró de la cama, se quitó la camiseta y me sentó en la silla extraña.
Comenzó a moverse encima de mi de forma sensual, mis mejillas se encendieron y mis pezones se irguieron incluso me dolían de la excitación.
No podía ser normal que un hombre se moviera de aquella manera, tampoco podía dejar de mirar a la pretina de su pantalón juro que algo iba a salir de ahí.
El tomo mi mano y la dejó sobre su torso. Quería que lo tocará y no lo dude.
Su pecho era duro trabajado en el gimnasio, y luego aquel tatuaje que le cubria la mitad del pecho, eran letras en árabe que por ende no entendía.
Sus movimientos insinuantes hacían que mi cuerpo lubricara. Joder! Podía sentir mis piernas empapadas. Sentí como se quitó sus zapatos y luego agarró el botón de su pantalón.
Trague saliva.
El me miró y sonrió de lado, entonces tomo una de mis manos y la llevo al pantalón. Estaba excitado mucho, lo que toque estaba duro como una roca podía palpar las venas inyectadas de sangre.
El soltó un jadeo.
-Estas mojada y yo apunto de explotar, quítame el pantalón rápido.-Murmuro en un tono de voz suficiente para escuchar mientras me pellizco un pezón, estaba a punto de estallar.
Le quite el pantalón, no tenía ropa interior por lo que algo quedo frente a mi cuando subí la cabeza.
No sabía que debía hacer cuando se tiene el miembro del hombre en la cara, lo mire y lo supe.
Lo acaricie con mis labios y sentí como eso le afectó. Lo mire y me pude percatarme de que le gustaba, entonces seguí haciéndolo con más intensidad hasta que el me paro de la silla y me llevo a la cama.
Me posicionó a horcadas sobre la cama luego fue a buscar algo en el bolsillo del pantalón. Cuando regresó note que se había puesto un preservativo.
El momento había llegado y yo estaba ardiendo en fuego.
Sus dedos se colaron en mi hendidura e hicieron que gritara de excitacion , nunca me habia mastubado me parecía asqueroso, pero este hombre hacia que fuera lo mejor del mundo.
-Ummm...estas muy estrecha- Su voz sonó excitada aún más.
-Hazlo duro!- le dije recuerdo que alguien me había dicho que entre más rápido lo hacía no sentiría tanto dolor.
-Como prefieras - Dijo y me penetró con fuerza.
Grite con fuerza. Me había dolido como el carajo.
El se paró y así mismo se retiró de mi.
-Cambiate ahora!.- Me gritó enojado.
-Que pasa?- pregunte.
El me dio una cachetada!
-AQUI NO ENTRAN MENORES NI VIRGENES!. DE DONDE ME CONOCES DIME?!- Me señaló violento.
Estaba asustada las lágrimas salieron de mis ojos, me lleve una mano a mi mejilla me había dolió y mucho.
El me dio la espalda y llamo por su celular, antes de salir miró la cama en busca de la verdad, ahí estaba mi sangre y mi himen. Sin duda había dejado de ser virgen de la peor manera.
Me puse el vestido tan rápido como pude y limpie mis lágrimas. Era eso lo que quería pues ya lo tenía, pero no se porque diablos me sentía fatal.
Avance hasta la puerta pero estaba bloqueada. Me había encerrado. Había dejado mi bolso con Julia así que no podía llamarla.
Dios Mío! En que problema me había metido.
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I N S T I N T O
RomanceLiving quería darle todo a su novio pero este no estaba dispuesto a tocarla antes de su mayoría de edad, sin embargo Living encuentra un club INTENSO, un club donde viviria su mejor y peor momento.