Mi Debilidad (COMPLETO)

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Escuche muchas veces que es mejor mentir que decir la verdad, pues la verdad es un golpe muy duro para cualquier persona, esta vez lo fue para mí.

Andrew antes de irse del cuarto, me dijo:

-Escucha, no fue fácil decirte la verdad, me duele verte así Felicia.

No le respondí, me quede completamente muda y inmóvil como una piedra dura. Ni siquiera quise ver a la persona que me hizo revelo la verdad. Salio del cuarto Andrew, dejándonos solos.

-¿Tienes frío?-Pregunto Manuel, quien pudo desatar sus manos y me quiso tapar con una cobija.

No le respondí simplemente le dí la espalda.

Este me volvió a preguntar:

-¿Tienes hambre?

Todavía no le respondi ni lo mire a la cara.

-¿Sigues enojada conmigo no? No te culpo ni tampoco lo justificare, después de todo me lo merezco, merezco todo tu desprecio.-Dijo Manuel levantándose del piso y subiéndose a la cama.

En lugar de responderle, apoye mi cabeza sobre la almohada y gire hacía la izquierda.

Manuel dijo tapándose su cara con la mano:

-Por favor ya no me tortures más.

-¡¿Yo te torturo?! ¡Me engañaste y no fuiste capaz de decirme la verdad, me das asco!-Le dije por fin todo lo que sentia por él.

El me dijo:

-¡Trate de decírtelo muchas veces, trate, pero tuve miedo!

-¿Miedo de qué? ¡Eres un cobarde!-Le pregunte sacandomelo de en cima.

Manuel respondio:

-Por que no quería perderte, no quería... no quería que me vieras como un asesino.

-Ya me perdiste.-Le dije mirando para a bajo.

Pero Manuel desesperado dijo:

-No digas eso, todavía te amo.

-Yo no te amo, y nunca volvere a amarte.-Le dije mirándolo a los ojos.

Sin embargo él me pregunto:

-¿Ya no me amas?

-Sabes la respuesta.-Le respondi dándole la espalda.

Manuel se bajo de la cama, y se acosto sobre el suelo, para dormir.

Al sentir que estornudaba y tocia sin parar, le arroje la cobija para que no tuviera frío, aun que no estaba dormido, por lo que lo vi con los ojos abiertos. Aproveche la oportunidad y le dije:

-Si me hubieras dicho que esa mujer era tu esposa muerta, te habría entendido y no estaríamos aquí ahora, te habría querido aún más, pero... fue horrible no solo que me mintieras, que me entere por otra persona por que no tuviste la fuerza para decirme la verdad. Por eso... te odio.