Capítulo 4

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-Por lo tanto lo mejor que pueden hacer es no tener sexo.- Concluyó el profesor frente a la bola de alumnos, ahora posiblemente traumados, frente a él cuando el timbre de fin de clases sonó.

Lentamente todos se fueron levantando para salir a los pasillos y retirarse a sus hogares. Los últimos es salir fueron los trillizos. Niall no compartía la última clase con ellos, y ya se había retirado de aquella institución debido a que su profesor había faltado, dejando así a los hermanos a su suerte. Para terminar de empeorar las cosas, los tres tenían cosas diferentes que hacer después de clases, por lo que se tenían que separar. Harry tenía que buscar el salón de ballet, desde años antes lo venía practicando, y en realidad se le daba muy bien, el ballet definitivamente era una de las cosas con las que podrías representar a Harry, todo él era delicadeza y suavidad, pero a la misma vez era fuerte y complicado, justo como el ballet. Por otro lado, Edward tenía que ir a las prácticas de football, él todavía no estaba en el equipo, pero iría a hablar con el entrenador para ver si le daba una oportunidad,lo cual sería algo difícil considerando que ya era mitad de curso y el equipo estaba perfectamente armado. Y Marcel, bueno... Marcel solo iría a la biblioteca a esperar a sus hermanos.

El primero en separarse fue Edward. Dejando atrás a sus hermanos, caminó por el ancho pasillo por unos minutos. La escuela era muy grande, y si no la conocías bien era probable que te perdieras, como le pasó a él. Estuvo caminando alrededor de 10 minutos y seguía si encontrar la cancha de football. A esas alturas, ya no había nadie en la escuela, por lo menos no en los pasillos, puesto que todos se habían marchado a sus respectivos hogares o entrado a actividades extra curriculares. Justo cuando se estaba dando por vencido, pensando seriamente en volver con Marcel a la biblioteca, un chico de cabello Negro y de estatura similar a la suya apareció en su rango de visión, por lo que el rizado fue trotando hasta él.

-Hola, disculpa, soy Edward, ¿sabes en dónde esta el campo de football?- soltó con la respiración agitada.

El morocho lo volteó a ver con una sonrisa en los labios.

-Claro, soy Zayn, si quieres te puedo acompañar, yo también voy para allá, solo tengo que dejar esto en la sala de profesores, pero si me acompañas podemos ir juntos al campo.- el rizado asintió con la cabeza- perfecto. Sígueme.

En silencio fueron hasta la sala de profesores, el rizado aclarando sus ideas, no se podía permitir hacer más amigos, él no quería que se pudiera llegar a repetir lo de... no. El no podía seguir pensando en eso. Quería olvidarlo. Tenía que olvidarlo.

...

-Llegamos. ¡Coach!-gritó el moreno y el rizado pudo ver como la figura de un hombre que no pasaba de los 40 años se acercaba a ellos.- Edward, él es el profesor Brown, Coach, él es Edward.

-¡Zayn, ven!-gritó una voz que Edward no supo identificar y como acto seguido, el moreno fue corriendo a su portador.

-Soy Edward Styles, señor, mucho gusto.-dijo el ojiverde con un tono de voz seguro.

-Mucho gustó igualmente, ¿eres nuevo?

-Sí, mi familia y yo llegamos a la ciudad hace poco menos de una semana y yo pensé que ya era hora de retomar las actividades que hacía en Holmes Chapel.

-¿Eres de Holmes Chapel? Es un lindo lugar. Bien, Edward, voy a serte sincero, por el momento no hay mas puestos en el equipo, pero lo que si podemos hacer es que vengas a las prácticas todos los días después de la escuela para que yo pueda ver si te puedo hacer un espacio en el equipo, ¿te parece bien?.-él rizado asintió tan rápidamente que cuando paró pensó que se le podría haber roto el cuello.

-Sisisi-dijo rápidamente- perfecto, entonces lo veo mañana, a la misma hora ¿cierto?- el entrenador hizo un gesto de aprobación con la cabeza- okay, adiós.

El rizado se fue con una enorme sonrisa en su rostro y sus ojos brillaban de emoción, pero antes de irse giró su cabeza hacia Zayn y se despidió de él con un gesto en su mano que fue devuelto por el morocho.

Al salir de ahí todavía quedaban unos minutos para que Harry saliera de su clase, por lo que fue a sentarse con su otro hermano, impidiendo que hiciera... cualquier cosa que estuviera haciendo.
Al llegar Harry, juntos se encaminaron a su nueva casa, todos muy satisfechos con su primer día de clases. No estuvo tan mal como habían pensado. En realidad, la pasaron bastante bien. Excepto Marcel, quien en el resto de el día no volvió a ver a aquel lindo chico de ojos azules.


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Esto de publicar en la noche-madrugada es lo mío.
No puedo hacer dedicaciones por ahora porque mi celular es una kk pero en cuanto pueda les digo.
Estoy pensando en hacer los capítulos más largos ¿les gustaría o los dejo así?

All the love, XC💕

Youth Souls || L.S. ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora