Amanda Matarazzo (Finn Wolfhard)

¿Mama?

Abrí la puerta de casa escuchando voces dentro, cosa que me extrañó ya que mi padre estaba trabajando y mi hermana en el instituto.

-¿Mamá?-pregunté

- si hi.. Amanda ven un momento al salón.

Yo hice lo que me decía empecé a recorrer el pasillo hasta el salón de donde provenían las voces.

Cuando entré todos se callaron y yo me quedé totalmente petrificada, en la habitación estaban: mi madre, un hombre y una mujer cogidos de la mano que no había visto antes, y en el centro, andando nerviosamente, estaba Gaten, (Dustin en mi serie favorita Stranger Things).

-¿Hola?-dije, más bien pregunté yo.

Y entonces en ese momento Gaten corrió a abrazarme, me envolvió en sus brazos dulcemente como si temiera romperme. Yo no sabía que hacer, aún seguía totalmente paralizada.

Cuando por fin se separó, vi que tenía los ojos llorosos al igual que la mujer y el hombre, sus padres suponía.

-Amanda será mejor que te sientes-me dijo mi madre, yo simplemente obedecí dejando mi mochila en el suelo.

Me senté en el sofá y Gaten se sentó a mi lado mientras sus padres estaban sentados en una silla y mi madre en otra.

-Bueno Amanda, creo que te debo una explicación -yo simplemente asentí.

Aún no sabía que hacer, tenía a Gaten, Gaten Matarazzo sentado a mi lado, en mi casa, con sus padres ¡y me había abrazado!

-Bueno pues... déjame explicártelo todo, y luego puedes opinar o lo que quieras -dijo mi madre con lágrimas en los ojos.

Yo volví a asentir, estaba demasiado nerviosa para hablar.

-Creo que será mejor que se lo expliquemos nosotros -dijo la señora.

-Me parece bien Heather -dijo mi madre.

Ya tiene nombre, pensé yo

-Yo estaba embarazada de mi 4 hijo, iba a tener una hermosa hija.
El día 23 de diciembre de 2004 mi niña nació -un escalofrío me recorrió la espalda: esa es la fecha de mi nacimiento- pero cuando nació tuvo problemas de corazón, y tenía que ser operada, y el único lugar en el que podía hacerlo era en España, cuando la operaron, nos dijeron que había muerto pero no era cierto, otro bebé había muerto...

-Mi verdadera hija -dijo mi hasta ese momento madre.

En ese momento sentí que mi mundo se hundía bajo mis pies, sentí que me faltaba el aire y cogí lo primero que tenía: la mano de Gaten. Al darme cuenta de lo que había echo intente soltarme avergonzada pero el me apretó más fuerte.

-Entonces -dije yo buscando las palabras indicadas- tu Gaten eres mi hermano- el asintió- y vosotros dije señalando al hombre y la mujer- sois mis padres- ellos asintieron sonriendo- Entonces tú- dije señalando a la persona que creía mi madre- perdiste a tu hija en el mismo hospital y el mismo día en el que yo estaba ¿y decidiste secuestrarme?-dije con  furia.

-No yo no te secuestré- dijo levantando la voz- hubo un error en el hospital y te confundieron con mi hija.

- Desde cuando sabéis todo esto- pregunta a todos.

- Desde ayer- contesto el sr. Matarazzo- cogimos el primer vuelo.

- ¿Y tu?- dije preguntando a la que pensaba que era mi madre.

- Desde ayer también- dijo apenada.

- Y que... ¿que pasará ahora?- pregunte yo.

- Eso depende de ti- contesto el sr. Matarazzo- ¿quieres quedarte aquí o venir a vivir con nosotros a Estados Unidos?

Sabía perfectamente lo que iba a hacer siempre he sentido que era lo que tenía que hacer, nunca encaje realmente bien en España. Aunque me daba pena dejar a "mis padres" y "mi herma" sabía que era lo correcto.

- Me voy- dije con seguridad.

Gaten me abrazó y me elevó por los aires, y el señor y la señora Matarazzo también se unieron al abrazo.