Amanda Matarazzo (Finn Wolfhard)

¿Enserio? part 1

*1 semana después de la cena*

-Hey Hey Amanda despierta -cuando abrí los ojos tenía a Gaten delante mío ya vestido.

-¿Qué pasa? -pregunté aún medio dormida.

-Mamá y Papá han tenido que ir a trabajar, ¿quieres venir al plató conmigo? -me dijo el.

-¿Enserio? -el asintió- ¡pues claro!-contesté yo emocionada.

-¿Qué hora es? -le pregunté.

-Las 5:30 -yo lo miré sorprendida- venga va en 30 minutos nos vienen a buscar los Wolfhard.

Yo asentí y el se fue de mi habitación para que me vistiera, abrí la cortina y comprobé que aún no había amanecido.

Tenía mucho sueño, así que opté por ponerme una sudadera rosa claro bastante ancha, unos leggings de deporte negros, mis convers también negras, y recogí mi pelo en una coleta.

Bajé las escaleras, y Gaten rápidamente me ofreció un zumo y un waffle que yo acepté agradecida.

Poco después de que acabara, llamaron a la puerta, Gaten abrió dejando ver a una Finn algo adormilado.

-Vamos -dijo sonriendo.

-Vamos -contesté yo emocionada y el rió.

Cogí mi teléfono y salímos de casa.

-¿Qué tal enana? -me preguntó Finn.

En el tiempo que había estado aquí, Finn y yo nos habíamos convertido en uña y carne.

-Genial jirafa -dije riendo y subimos al coche donde esperaba su padre.

Gaten se adelantó y consiguió subirse en el asiento del copiloto, y Finn y yo nos sentamos detrás. El se sentó al lado mío.

-¿Cuanto dura el viaje? -pregunté.

-Algo más de una hora -dijo Finn mirándome.

- Vale -dije mientras bostezaba

Nadie hablaba demasiado, por no decir nada. Todos estábamos demasiado cansados.

Estaba muy cansada, casi no había dormido nada, pero me hacía mucha ilusión visitar el plató.

Noté como los ojos se me empezaban a cerrar y la oscuridad me invadía.

*Finn*

Los ojos de Amanda empezaron a cerrarse lentamente, dios se veia tan guapa ahí sentada.
De repente, sus ojos se cerraron del todo y su cabeza calló sobre mi hombro, no pude evitar sonreír.

Mi padre y Gaten rieron, yo los miré
Y ellos me miraron con una ceja alzada y una sonrisa pícara.

-¿Qué? se ha quedado dormida -dije mirándola.

Era preciosa, estaba tan preciosa con aquel vestido como lo estaba ahora mismo con esa ropa de deporte y dormida sobre mi hombro.

-Es preciosa -se me escapó, y mi padre y Gaten empezaron a reír escandalosamente.

Amanda se removió incomoda en mi hombro y yo los mandé callar y ellos siguieron riendo pero esta vez más flojo.

Pasé un brazo por la espalda de Amanda y la acomodé más en mi pecho.
Al final, yo también me quedé dormido.

*Amanda*

Desperté porque alguien me estaba zarandeado abrí los ojos y me encontré a Finn.

-¿Qué quieres? -pregunté adormilada

-Qué ya hemos llegado -dijo sonriendo yo abrí los ojos con rapidez y bajé del coche dejando a Finn ahí plantado.