Capítulo 9: Exterior

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[Por Carol]

Estando en el cementerio oí que alguien estaba peleando con otra persona, rápidamente me puse de pie para dirigirme hacia allí para encontrarme con Aaron y Rick tratando de detener a Daryl para que no le siguiera pegando a Nicholas que estaba en el suelo con su nariz y un labio roto, era una escena bastante bochornosa para el cazador ya que era la primera vez que se peleaba así con alguien dentro de los muros de Alexandría.

Bufé un poco molesta luego de ver a Dixon haciendo ese escándalo quien sabe porque motivo

—Carol llévate a Daryl ¡Ahora!— me pidió el ex sheriff, me acerqué al rastreador para tomarlo del brazo y tratar de llevármelo de allí. Primero fue un poco difícil ya que se resistía pero luego por suerte cooperó y comenzó a caminar delante mio

—Daryl busca tus cosas, saldremos al exterior— dije en un arranque de confianza que no había vuelto a usar con él luego de mucho tiempo. Dixon se volteó a verme con enojo como si yo fuera la culpable de lo que sucedió pero me respondió a lo que dijo un poco menos enojado

—Espero tu amigo no nos acompañe— lo observé atenta un momento sin comprender su reacción o sus palabras 

—¿De qué hablas, Daryl?— pregunté momentos después 

 —Vamos Carol, sabes a la perfección de qué hablo. No te hagas la tonta— me contestó aún sin que yo entendiera algo, ya me estaba enojando el hecho de que no hable claramente

—Si vas a decir algo, mejor dilo de una maldita vez. No te hagas el  misterioso. Se claro Dixon y dilo— dije molesta por que no entendía su estúpido comentario

—Carol... espero que tu amigo Ezekiel no nos acompañe en la salida. Ahí esta tu aclaración— me habló el hombre frente a mi más enojado pero se marchó de allí sin darme tiempo a responderle, estaba muy sorprendida al oírlo decir aquello.

¿Qué? ¿Acaso estaba celoso de Ezekiel? No puede ser, o esto era un sueño o Daryl se estaba burlando de mi... lo cual si era así me parecía muy cruel y más para mi sabiendo que tengo sentimientos por él, bueno pero eso él no lo sabe... seria cruel para mi sola. Bufé para tratar de calmarme, luego de esos momentos caminé a mi casa y al parecer Dixon tomó en serio lo que dije ya que me esperaba en el porche con su ballesta al hombro; al llegar al lugar dije sin verlo

—Buscaré lo esencial, ya vuelvo—

—Apresúrate, quiero salir de esta comunidad por un rato —habló con su ronca voz y sin mirarme. Entré en la casa a dirigirme directo al armario para tomar la mochila que tenía lo que necesitaba, así que sin más salí de allí y él continuaba esperándome en el porche con su postura de chico rudo y malvado— si estas lista, vamos. No quiero perder más tiempo aquí... apresurate —me dijo rápidamente y caminando hacia la pequeña escalinata que había, lo seguí a paso lento mientras le daba vueltas aún a lo que había dicho más temprano. Iba bastante distraída por lo que no noté que se había detenido y me golpeé con su espalda— presta atención porque iremos en moto y no te distraigas. No quiero que te caigas— dijo sin voltearse, parecía realmente seguro de si mismo pero también parecía algo preocupado por eso; no me lo dio a entender... solo me di cuenta de ello. Daryl subió a la moto mientras que yo lo imitaba, subí detrás de él y obviando completamente su comentario anterior pregunté

—¿A dónde nos dirigiremos?— el hombre encendió el motor de la moto y acelero para salir a toda velocidad unos momentos, cuando se detuvo en la puerta de la comunidad me respondió de la mejor manera posible

—No lo sé, quizás hay algún pueblo cercano donde encontremos algo que nos sirva —la puerta comenzó a abrirse y me aconsejó— coloca tus manos alrededor de mi cintura... de verdad no quiero que te caigas— sonreí estúpidamente mientras con algo de miedo lo abrazaba para comenzar el viaje en moto que haríamos hasta el pueblo que él había mencionado, esperaba tener al menos algo de suerte con eso. 

El hecho de haber salido de Alexandría con Daryl luego de mucho tiempo me hacia infinitamente feliz, la cercanía que tenía con él mientras viajábamos no la hubiera cambiado por nada; además si prestaba atención y apoyaba mi cabeza en su espalda se podía oír el latir de su corazón. Su latir no era desbocado pero tampoco era tranquilo, me hacia sonreír tontamente el solo hecho de oír los latidos de su corazón y apoyar mi frente en su espalda... esas cosas simples me hacían feliz.

Literalmente podía explicar como me sentía a su lado, o a los pequeños momentos que creía románticos junto a él aún cuando Daryl no supiera nada de eso. La moto deteniéndose me hizo despertar de mi "sueño", Dixon apagó el motor de la misma y me dijo

—A partir de aquí es mejor continuar de pie, si vamos a estar fuera varios días debemos buscar un lugar para establecernos. Si nos perdemos sabemos que debemos llegar a ese lugar— luego se volteó a verme, en ese momento me percaté de que su ojo comenzaba a hincharse y volverse un poco morado; traté de acercarme para verlo de más cerca pero él se alejó unos centímetros impidiéndome que lo tocara, entonces le dije algo preocupada

—Necesitas algo para bajar ese ojo negro, no seas cabeza dura por favor —el hombre bufó mientras rodaba sus ojos como si le molestara lo que dije entonces le pregunté— ¿Esta todo bien Daryl? —se volteó sin responderme y comenzó a caminar lento a lo que me apresuré para alcanzarlo y preguntarle de frente— ¿Qué sucede Daryl? ¿Por qué pareces enojado conmigo? ¿Qué hice?— trataba de comprender su actitud para conmigo

—Estoy cansado de siempre discutir con alguien. No puedo superar la muerte de Alex, me cuesta. Nada es fácil y me enoja que ella ya no esté con nosotros— habló por fin sacando un poco de lo que sentía pero creo que algo más había detrás de sus actitudes, no puede ser que la muerte de alguien derive en que se pelee con alguien. Pienso que hubo una situación molesta para él o simplemente no quiere aceptar algo... que a lo mejor es lo más acertado, creo que le presté más atención a mis pensamientos que al hombre que hacia pocos momentos estaba frente a mi.

Cuando me centré en la conversación Daryl ya no estaba así que comencé a caminar hacia el norte tratando de encontrarlo pero luego de un rato él me encontró entonces dije aliviada

—Creí que te había perdido— luego reí divertida mientras me acercaba pero me detuvo

—He encontrado una cabaña a poco más de medio kilómetro, parece deshabitada. Tendremos que ir lento y sigilosamente; si queremos saber si alguien vive allí debemos hacer silencio— habló seriamente ante mi, tragué saliva al ver sus ojos claros posados en mi y no quería demostrar lo nerviosa que estaba, aclaré mi garganta y contesté tranquilamente 

—Debemos adelantarnos antes de que el sol caiga y no creo que falte mucho. Como muchos nos queda una hora de luz —le sonreí amablemente luego le toqué el hombro para pasar a su lado y adelantarme. Pronto oí sus pisadas justo detrás de mi con paso un tanto inseguro, en silencio se colocó a mi lado— ¿Crees que podamos pasar la noche tranquilos en aquella cabaña? En el caso que alguien viva allí, creo que sería un poco difícil, tendríamos que matarlo quizás... en el peor de los casos— dije mientras mantenía el ritmo de la caminata, pronto divisé la vivienda hecha de madera y ambos nos acercamos sigilosamente hasta una ventana, tratamos de observar hacia el interior pero fue imposible... tratamos de observar hacia el interior pero fue imposible... no se veía nada. Creíamos que estaba deshabitada pero cuando nos acercamos a la puerta... esta se abrió dejándonos ver la figura de una persona.

***

¡Hola! Perdón la tardanza... ahí esta el capítulo y completamente Caryl. Espero que lo disfruten, gracias por todo.

~ Masquerade

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