Un brindis, por el innumerable numero de calles vacías de las grandes ciudades.
Un brindis, por las noches de flexo y apuntes.
Un brindis, por el tintineo de las copas con los amigos.
Un brindis, por las sonrisas diarias.
Un brindis, por tus lágrimas.
Un brindis, por las malas rachas.
Un brindis, por los comienzos tímidos.
Un brindis, por las noches de borrachera y pérdida de conocimiento.
Un brindis, por todos aquellos arco iris después de una horrible lluvia.
Un brindis, por los profesores que te han inspirado.
Un brindis, por los malos amigos, si ellos, ellos te han enseñado a madurar.
Un brindis, por los casos perdidos.
Un brindis, por los frikis, los góticos, los guays y los monger.
Un brindis, por los estupidos y los inteligentes.
Un brindis, por esos paseos largos.
Un brindis, por los primero pasos dados.
Un brindis, por las risas incontroladas.
Un brindis, por los padres, se lo merecen.
Un brindis, por las personas que estuvieron, han estado y estarán a tu lado.
Un brindis, por los finales inesperados.
Un brindis, en definitiva, por todas aquellas cosas que hacen nuestra vida más fácil.
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Una historia inolvidable
De TodoFrases sobre la vida misma, reflexiones, pensamientos.
