Capitulo 32: "Nadie ama a una gorda"

35 0 0
                                    

Nadie ama a una gorda.

Lo único que ven son estrías, michelines y ojeras.

Nadie ama a una gorda por una sencilla razón, es más fácil quererle como amiga.

Nadie piensa en los sentimientos de esa chica gorda, que se ilusiona una vez si y otra también con cualquier cosa.

Ella es alegre, dulce, simpática.

Y lo único que piensan es: " claro que es alegre, dulce y simpática, es que algo tiene que tener bueno".

Pues no.

Las chicas gordas también podemos ser bordes.

Basta ya, de superficialidades y tonterías.

Las chicas gordas también podemos comer chuches y chocolate y ser igual de "monas" como lo puede ser una chica delgada.

Las chicas gordas también queremos un amor de verdad.

Las chicas gordas también sufrimos por la ropa que nos vamos a poner el sábado noche.

Las chicas gordas también tenemos sentimientos.

Intentamos aparentar ser más fuertes pero solo somos más inteligentes.

Cuando eres una chica gorda, empiezas a entender cómo funciona el mundo.

Sabes que las personas que están a tu lado lo hacen porque te consideran buena gente, no por tu físico.

Y yo estoy harta de esconderme.

Tengo estrías y estoy gorda.

Pero también intento ser feliz, no con alguien no me entendáis mal, hace mucho tiempo entendí que la felicidad se haya en uno mismo.

Intento ser feliz conmigo misma.

Así que no, no me importa lo que la gente pueda pensar, soy una chica gorda y soy feliz.

Me gusta como soy.

Y no soy una chica gorda simpática ni mucho menos, soy borde, irritante, en definitiva una "tiquismiquis" en toda regla.

Que esté gorda no significa que no pueda ser yo misma y yo soy así, insoportable.

Y me encanta serlo.

Por el mero hecho de que si alguien decide quedarse a mi lado, se que no lo hará por mi físico.

Así que doy gracias a dios, por ser una chica gorda.

Una historia inolvidable Donde viven las historias. Descúbrelo ahora