Capitulo 36"Me da asco ser tratada como una mujer"

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En este capítulo hablaré sobre un tema bastante polémico, sobre todo, en nuestros días.

Quiero recordar a toda la gente que lee mi libro, que este es un libro basado en mis propias  opiniones que no tienen porque ser las mismas que las vuestras.

He incluso podéis estar totalmente en contra de ellas. Solo intento resaltar mi punto de vista.
Hecha esta introducción, prosigamos con el capítulo:

-Me da asco ser tratada como una mujer. ¿Por qué?
Porque una mujer no puede hacer las mismas cosas que puede hacer un hombre.

Un hombre puede tener relaciones sexuales espontáneas y es considerado  un campeón.

Pero si una mujer tiene relaciones esporádicas solo hay una palabra para ella y es: "Puta".

Recordemos que siempre y cuando nos quedemos sin argumentos en vez de decir puta podremos decir miles de sinónimos más como: "guarra" o "zorra".

Y llegados a este punto creo que no es justo.
Me da asco ser tratada como una mujer, porque las mujeres no somos fuertes.
Siempre me han dicho esta frase: "hombre, puedes ser más fuerte que muchas otras chicas pero no más que yo".

Y no estoy criticando la genética, criticó la determinación de la palabra fuerte.
Si hablamos de fuerza física seguramente tengan razón, mayoritariamente la fuerza que tiene un hombre es mayor que la de una mujer.

Pero si vamos al plano de la fuerza determinada como valentía o aguante, esta teoría se nos va a pique.

No por el hecho de yo sea una mujer quiero decir que nosotras somos más fuertes sentimentalmente ya que existen muchos tipos de personas.

Lo que quiero decir es que debemos serlo porque si no, se nos tacha de dramáticas.

Me da asco oír a un hombre pavonearse sobre sus conquistas.

Me da asco ver a las mujeres llorar  por culpa de muchos hombres.

Aunque en cierto modo tampoco es todo culpa de los hombres.

No defiendo la actitud de un hombre que sabe perfectamente lo que hace, a estos deberían de darles vergüenza.

Pero creo que el hombre se encuentra en una posición mejorada con respecto a la de mujer y, por ello, cree poder hacer cosas que son injustas.

Al fin y al cabo eso se aprende desde pequeño.

Puedo decir con total sinceridad que mi experiencia con los hombres no ha sido nada buena, tal y como se puede ver en este capítulo cada vez siento más aversión hacia ellos.

Y eso, como persona que duda de todo también me parece injusto.

No todos se merecen llevar la misma etiqueta y siento si alguna vez la puse, pero a veces me encantaría estar en la misma posición que un hombre porque me da asco ser tratada como una mujer.

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