HISTORIAS DE ACUARIO

Escorpio (H) & Acuario (M) (III)

Contra todo pronóstico

---ACUARIO---

Blusa negra, jeans y botines militares. Algo simple acompañado de una cadenita con la inicial de mi nombre, pulseras, y listo. Bajé las escaleras y escuché la voz de Escorpio... junto a Capricornio y Piscis.

- ¿Vamos? – hizo la pregunta retórica apenas me vio y se levantó del sofá al igual que los otros dos que lo acompañaban y caminaron en fila india hacia la puerta.

Yo esperaba pasar un momento a solas con él, pero... quizás no.

- ¿Acua? – me llamó Piscis y lo miré. - ¿Vamos?

- Ah, sí, claro – contesté y cerré la puerta tras de mí.

---ESCORPIO---

Estaba esperando a Acuario, cuando pasé por su habitación me dijo que ya estaba casi lista. Así que la esperé en la sala.

- ¿Van a la casa de Tauro? – me preguntó Capricornio que venía junto a Piscis.

- Sí – le contesté. – Acuario y yo iremos ahorita.

- Genial, nosotros también. ¿Vamos por ahí?

- Amm, claro.

Quería pasar tiempo junto a Acuario, pero quizás mantener un poco de distancia sea necesario.

Quizás debía mostrar indiferencia.

Cuando Acuario se apareció entre nosotros, me levanté del sillón y caminé fuera de la casa hasta el carro que había usado poco antes para ir en busca del regalo de Tauro. Capricornio y Piscis iban atrás mientras que Acuario iba a mi lado de copiloto.

Arranqué el auto e íbamos cada uno concentrado en lo suyo. Acuario mirando por la venta, los chicos atrás con sus celulares y yo con la mirada fija en la carretera. El viaje era uno tranquilo y muy silencioso hasta que ellos dos comenzaron a corear una canción.

Miré por el retrovisor y vi que Capricornio estaba bailando en el asiento, movía las manos alrededor de su cara, parecía un mimo y Piscis que la seguía. Estos dos son un desmadre juntos. Me reía en silencio de ellos, al menos hicieron que el trayecto no fuera tan incómodo para nosotros dos.

Llegamos a la fiesta y saludamos a todos conforme íbamos entrando hasta llegar donde estaba la cumpleañera que nos recibió con los brazos abiertos. Varios chicos de la universidad y de su trabajo estaban ahí y claro, en especial, estaban presentes todos lo de nuestro grupo.

A un lado de la sala mientras casi todos bailaban en el patio, estábamos Sagitario y yo conversando prácticamente todo sobre mi situación con la acuariana.

- ¿Así que ahora la vas a ignorar? – me preguntó ella.

- No, la voy a cuidar desde la distancia – rodó los ojos.

- Eres un idiota, Escorpio. ¿Lo sabes, no?

- Creo que sí. Acuario me lo recuerda siempre.

- Pues bien hecho – afirmó y fue directo hacia Libra que se servía un poco de Pisco que estaba en la mesa.

---ACUARIO---

Había terminado de bailar toda una ronda de rock de los '80 junto a Leo, estaba realmente cansada e iba por un refresco, pero no puedo decir lo mismo de mi amigo. Él quería seguir bailando y ahora iba por Aries. El ambiente cambió y Willie Colon hizo acto de presencia haciendo que casi todos salieran a bailar. Yo regresé a la sala pasando por un lado de Sagitario y Escorpio que hablaban amenamente no sé de qué cosa. Me acerqué a la mesa donde estaban las bebidas y me serví un poco de coctel de algarrobina que estaba en una jarra y volteé regresando la vista al patio donde todos bailaban, pero mi atención rápidamente se centró en los aquellos dos. Sagitario jalaba del brazo a Escorpio invitándolo a bailar, pero él se negaba. Aun así, ella no se daba por rendida, sí o sí quería bailar con él. "¡¿Pero que no entiendes que no quiere bailar contigo?!", me sorprendí a mí misma al hacerme ese comentario y miré asustada a todos lados asegurándome de que nadie me había escuchado. Sagitario seguía insistiendo y entre risas él cedió. Buscaron un lugar donde bailar y me aguanté una risa cuando ellos finalmente se instalaron pero la canción acabó. Sin embargo, la felicidad no duró mucho. Segundos después ya estaba sonando otra.