• Gemas del poder •

«Amores y ungüentos»

Dedicado a oymv99

•Nereida•

¿Cómo se atrevía él a venir?

Y hablarme de esa manera, como si aún le perteneciera.

Es que no logro comprender ¿Por qué sus palabras tienen tanto efecto en mí? Es imposible que aún sienta algo por él, no después de todo el daño que me hizo.

Porque sí.

Lo quise, en ese entonces era sólo una chiquilla tonta enamorada, y él, se aprovecho de eso, hasta convertirme en lo que soy ahora, un monstruo incapaz de sentir otra cosa que no sea odio.

Después de todos estos años, él sigue dominándome a su antojo, y yo, caigo una y otra vez.

•Zahira•

Se marchó, otra vez.

¿Cómo no me di cuenta? Walkyria es imposible.

Se va, no aparece hasta después de dos días y se vuelve a ir como si nada, sin avisar siquiera.

¿Y a dónde pudo haber ido?

Con ese tal Andrew, quizás?

Cuando la vea no se librará de una gran reprimenda. Porque puede que sea mayor que yo, sin embargo en ocasiones actúa como una niña pequeña.

Pero, tengo que admitir que por mucho que me irrite, es mi hermana...

y la seguiría a donde sea.

•Phoenix•

-Sé que estas ahí -Grité a la nada - Sal, no te haremos daño. Mi hermano estaba preparado con su arco para matar a lo que sea que nos estuviera siguiendo. Era el mejor del bosque, por no decir de todo Trollbunden, podía atravesar con sus flechas a cualquier cosa que se moviera a más de un kilómetro.

Para mi sorpresa se trataba de la misma chica de aquella casa. Se le notaba cansada, además de que cojeaba un poco. Le hice una seña a mi hermano y este bajo la guardia.

-¿Qué te ocurre? -Pregunté señalando su pierna.

-Me caí durante el camino, al parecer me lastime el tobillo -Contesto ella.

-¿Por qué nos seguías? -Reclamó mi hermano.

-Vi tu transformación de ave a humana desde mi ventana, quise seguirlos por mera curiosidad.

-Ya veo, acompáñanos a nuestra casa, podemos curar tu torcedura -Dije finalizando la conversación.

Decidí caminar durante el resto del trayecto, y que Parker llevará cargada a la peliazul.

-Soy Parker, y ella, es mi hermana Phoenix -Rompió el silencio mi hermano a la vez que preparaba un ungüento para aplicárselo a la chica en la zona afectada.

-Walkyria -Respondió secamente - ¿Por qué en un momento eras un ave y al siguiente una chica?

-Es un hechizo, afecta sólo a las mujeres de mi familia. Me convierto en un ave fénix durante las noches de luna llena -Expliqué exasperada

-Te colocaré esta crema en el tobillo, y así podrás caminar -Dijo Parker.

Luego de unos segundos, el mismo hizo efecto y Walkyria se puso de pie rápidamente.

-¿Cómo lo hicieron? -Preguntó sorprendida.

-Somos curanderos, sabemos todo sobre botánica y plantas mágicas medicinales -Contesté tajante.

-Agradezco su ayuda -Agregó ella distraída.

-¿Qué miras? -Le reclamé.

-Tu collar, ¿De dónde lo sacaste? -Preguntó clavando su mirada en la mía.

-¿Por qué quieres saberlo? -Reclamé dudosa. No entendía su inesperado interés.

¿Es qué acaso lo sabía? ¡No! Imposible.

Ella no podía saber nada sobre mi poder, el que me daba la capacidad para hacer crecer y controlar a cualquier planta.