"DESTINOS ENTRELAZADOS" [YURI ON ICE] ⚠️[EN CORRECCIÓN]⚠️

[VICTURI] SOLEDAD ENTRE DOS

~~~~YUURI~~~~~

Abrí poco a poco mis ojos sintiendo como mis párpados pesaban y un terrible ardor y dolor invadían mi cuerpo. Tomé mis gafas que se encontraban sobre la mesilla de noche a lado de la cama y me las coloqué.

—¿Eh?–murmuré observando mejor que estaban quebradas de los cristales.—Ah~ No queda de otra.

Saqué del bolso de mi pantalón una pequeña cajita dónde contenía mis lentillas de contacto y me las puse. Parpadee varías veces para dejar de lagrimear e intenté probar mi vista mirando alrededor.

Noté que no había nadie, la cama estaba hecha un desastre al igual que el piso. Todo estaba quebrado y la pared estaba peor.

Me senté en la orilla de la cama empezando a notar que cierto dolor en la cabeza me impedía continuar con mis movimientos.

—No será tan fácil después de haberte puesto una buena.– habló una segunda voz detrás de mi.

—¡¿Pero que-

Me giré inmediatamente.

—Tranquilo Katsuki Yuuri.–dijo aquel chico que ya había visto en varias ocasiones.

—Minami...–susurré sin apartar la mirada.—¿Como entraste? Mejor aún ¿porque estas aquí? ¿Acaso quieres atacarme? Te informo que no estoy en condiciones así que sería mejor que te buscaras a alguien mejor.

—¿Eh? Oye, calmate. No he venido a eso...–ladeó una sonrisa.

Admito que tenía una linda sonrisa, una muy linda en si para tener unos 18 años aproximadamente. Minami llevaba un mechon rojizo en la parte de su flequillo dejando su rubio natural en lo demás de su medio largo y bien peinado hacia un lado cabello.

En cuestiones de estatura era mucho más alto que yo, le calcularía unos 1.82. Es delgado pero tiene una buena figura, bastante buena admito.

—¿Que? ¿Pero...no eres nuestro enemigo?

—¿Enemigo? ¿Crees que soy tú enemigo Lohengrin?–repitió aquel chico señalándose.

—¿Lo-Lohengrin?–pregunté arqueando una ceja.

—Esto es más complicado de lo que pensé–suspiró.—Bien...escucha, necesitas salir de aquí.

—¿Q-Que? ¿Porque haría eso?–pregunté frunciendo el ceño.

—Porque si no lo haces alguno de los dos pagará las consecuencias–. Al principio no entendí bien aquellas palabras, pero después me di cuenta de que se refería a Yurio y Viktor.

Volví a intentar ponerme de pie pero mis piernas estaban muy débiles.

—Mira que hacerte esto es peligroso pero entiendo la desesperación de mi padre así que vamos–. Esto último lo dijo dándome la espalda y agachándose frente a mi.

—Espera. No pensarás en-

—¿Quieres ayudarlos o no?–preguntó Minami.

Suspiré pesadamente y me subí a su espalda. Él se posicionó en la orilla de la ventana y de un salto voló por los aires.

—¡Waaah!–solté un grito al ver la altura. Minami soltó una risilla.

—No creí que tuvieras miedo a las alturas Yuuri-senpai.

—¿Yu-Yuuri-senpai? Pero si eres mayor que yo...

Al escuchar lo que dije Minami abrió los ojos como platos.