Capítulo 18

583 78 18
                                    

Sentía que me faltaba el aire, tenía miedo, mis deseos de llorar eran inmensos, escuchaba a Mina gritando mi nombre, tenía una fuerte confusión no sabía diferenciar si era un sueño o si era real, no podía salir de esa extraña sensación.

-¡Nayeon! ¡Nayeon! Despierta, siento que están cerca, por favor despierta. -Escuchaba la voz de Mina.

-¡Nayeon con un demonio, despierta! -Gritaba Jeongyeon.

Sentí un fuerte empujo y termine despertando casi sin aire, asustada y alarmada.

Jeongyeon ya podía estar de pie aunque aún seguía muy maltrecha de su herida, ya estando las tres de pie, pudiendo caminar sin tener que depender de alguna forma una de la otra, así quizás podríamos llegar más lejos.

-Chicas debemos salir ya, caminar o correr lo más rápido que podamos, escuche algo que parecen sonido de autos. –Mina nos advertía mientras mirada a todos lados.

Hicimos caso y comenzamos primero a caminar muy rápido ya pronto estábamos prácticamente corriendo lo más rápido que nuestra fuerzas nos los permitía, el bosque se había tornado aún mas frío que la noche anterior, Mina al tener que correr se fue agitando y comenzó a toser insistentemente, todo este frío nos estaba comenzando a pasar factura, incluso yo comenzaba a sentirme más débil. 

Ahora era Mina quien necesitaba de nuestra ayuda, entre Jeongyeon y yo logramos ayudarle a caminar más rápido o eso intentamos, pero Mina era tan obstinada que no quería aceptar la ayuda, eso nos atrasaba y nos agotaba las fuerzas, el tiempo seguía pasando y no veíamos avance, el sonido de autos se sentía mas cercas, Mina seguía intentando caminar más rápido a pesar de estar agotando todo, todo de ella. 

-Yo no puedo seguir, no puedo respirar bien, no puedo correr, sigan ustedes. -Espeto finalmente Mina, intentando tomar aire pero ya le era prácticamente inútil.

¿No creerás que te dejare aquí? –Le decía, mientras le tomaba del brazo y veía como se debilitaban sus fuerzas entre mis brazos, Mina se desvanecía sobre mi agarre entonces recordé aquel sueño que tuve mientras Mina y Jeongyeon intentaban despertarme, vi a Mina muerta entre mis brazos, la vi con su mirada perdida al cielo, sin poder haberle dicho adiós ni cuanto la amaba, se había ido de mi lado por siempre. Quise llorar, sentía el miedo y a la muerte hablándome al oído.

Salí de mis pensamientos y volví a reaccionar cuando Mina repentinamente cayó de cara al suelo, asustadas, Jeongyeon  y yo nos dispusimos ayudarla pero todo comenzó a pasar tan rápido, el temor que nos envolvía no nos dejaba analizar lo que sucedía, mientras intentábamos reanimar a Mina, comenzamos a escuchar autos sonar sus bocinas y motores muy cerca de nosotras.

Jeongyeon fue quien se encargó de mantener mi cordura en su lugar.

-Todo estará bien, tranquila Nayeon, Mina nos necesita lo más concentrada y fuertes ahora.

Mientras reanimábamos a Mina o eso creíamos hacer, nos dimos cuenta que ella no había caído por la perdidas de sus fuerzas, Mina tenía en la parte trasera de su muslo izquierdo un dardo tal vez con alguna droga que la había puesto a dormir casi al instante.

Entre Jeongyeon y yo jalamos de ella hasta la orilla, de un camino que estaba ocupado por unos árboles que nos serviría de refugio, hasta que Mina despertara o que los autos desaparecieran, el lugar estaba todo cubierto de árboles, ramas y malezas era casi imposible que nos viesen allí, siquiera nosotras podíamos observar todo lo que sucedía afuera, de lo cubierta que nos encontrábamos, debíamos mantenernos quietas a pesar de la gran molestia que nos causaban las ramas.

Eso hicimos escondernos pero, por un demonios siempre en mi vida hay un pero.

Un auto se detuvo cerca de aquel lugar donde estábamos refugiadas, Mina aún seguía un tanto adormecida, pero su pulso comenzaba a ser normal, eso... eso era bueno.

I want you for meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora