Capítulo 17

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La oscuridad se estaba apoderando totalmente de cada uno de nuestros intentos de poder escapar, los pasos de Mina eran cada vez más débil, podía escuchar con cuanta dificultad respiraba, pero aún así jamás miro hacia atrás muy a pesar de su gran esfuerzo no dejaba de darnos las fuerzas mental que necesitábamos tanto Jeongyeon como mi persona, que a pesar de ser la que tenía mejor estado físico en esos momentos era quizás la que más temor sentía, pero es que era de noche y estábamos en medio de la nada, siquiera Mina reconocía el lugar y mucho menos yo, era normal sentir miedo ¿no?

El frío era cada vez más fuerte al seguir avanzando, era aterrador el lugar lleno de nubosidad que nos cegaba de nuestro alrededor, Mina sostuvo siempre mi mano intentado ayudarme a no caer mientras ambas intentábamos a turnos llevar a Jeongyeon.

-Ya no puedo seguir más. -Dijo por primera vez Mina totalmente agotada, ya intentando respirar por su boca tratando de atragantarse del aire que le hacía falta. -Tengo que descansar, creo que ya hemos avanzado lo suficiente.

Tuve miedo por ese "creo" pero no podía exigirle más, ella había pasado por tanto, estaba sin nada que la cubriese de frío cargando a Jeongyeon mal herida, esto era muy difícil para ambas, teníamos que confiar que ese "creo" realmente era un camino inmenso que nos separaba de aquel horroroso sitio. 

Esperemos aquí, tratemos de buscar un lugar donde escondernos y descansar. –Dije mientras recostaba a Jeongyeon se había quedado dormida, me imagino del dolor físico y el que sentía en su corazón, después de todo lo que le conté, a que se dedicaba Jihyo, aunque aún no entendíamos porque Jihyo seguía persiguiéndonos porque a pesar de todo lo que caminábamos podíamos escuchar disparos al aire.

El piso estaba malditamente frío, pero no teníamos para más era eso o habernos quedado allá, a Mina le dí mi calor corporal, lastimosamente no tenía siquiera un abrigo para ofrecerle y no me acepto mi camiseta, decía que no permitiría que yo quedará en sostén aguantando el frío que ella ya reconocía era demasiado fuerte. -¿Por qué eres así? ¡Déjame ayudarte!

-No dejaré que pases las penitencias que yo estoy pasando, porque si bien me estoy muriendo de frío, no permitiré que te hagas daño por mi, ese no es mi deber mi deber es poder cuidarte. 

-Y el mío es cuidar de ti también. -Proteste.

-Entonces, abrázame... dame de tu calor, eso es mejor que cualquier otra cosa, que tu piel sea mi piel, que tu cuerpo sea mi calor... eso es lo que estoy necesitando.  -Termine abrazándola como me pedía, la había extrañado tanto, sentirle cerca, sentir su calor, sus brazos, sus caricias, simplemente había extrañado sentirla a ella en todo su esplendor.

Ella termino sentándose y extendiendo su mano invitándome a que yo me sentase al frente de ella colocando mi espalda sobre su pecho. -Estas mal, como para que ponga mi peso sobre ti. -Le dije -¡Nayeonnnn! -Suplico, hizo un mini puchero, no podía creer a Mina haciendo eso, pero se veía hermosa, me provocaba morderle esos labios. -Ni en los peores momentos dejas de parecerme tan hermosa. –Le decía, mientras aceptaba su invitación a sentarme entre sus piernas y recostarme a su pecho. -¿Hasta con esta cosa que me hicieron en mi cabeza? -Preguntó, mientras le veía acaricia de forma perdida su cabeza.  -Eso va y viene, pronto crecerá. -Le acaricie el rostro. 

Recosté aún más mi cabeza sobre su pecho, dejando casi libre el lado derecho de mi cuello.

- ¿Ves cómo te colocas? –Decía Mina, comenzando a pasar la yema de sus dedos en mi cuello. ¿Ah? – No entendía a qué se refería. -Me estas incitando a darte un beso. -Siguió su recorrido con sus dedos.

I want you for meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora