Dead Lives /// BTS

☣ Capitulo 20 ☣

En pocos minutos ya se encontraban dentro del departamento de Seokjin, el cual compartía con Suga. Le proporciono ropa a Kris el cual fue a cambiarse sin chistar. Por otro lado, debía ir a buscar a Namjoon, quien se había encerrado en una pieza apenas llegar. Suspiro pesadamente, caminando hasta su pieza. Golpeo 2 veces antes de entrar, el rubio se encontraba acurrucado en su cama, mirando a la pared.

-Nam, déjame ver tu rostro.- Hablo con dulzura.

-No, déjame solo.- Pocas veces el menor le faltaba el respeto, o lo trataba mal, y era solo cuando su orgullo se veía lastimado.

-Vamos, reincorpórate y mírame, así puedo curarte.- Sacudió el bote de desinfectante y el algodón que tenía en ambas manos. Oyó el quejido contrario, seguido de un Namjoon con el rostro lastimado, observándolo fríamente. –Mira cómo te quedo la nariz... Con que necesidad?- Dejo descansar sus brazos a ambos lado de su cuerpo.

-No lo sé, yo... El disparo a mi auto... Él no me cae bien, es un peligro... El...- Se sentó a su lado, mojando el algodón con el líquido, comenzando a pasarlo lentamente por la herida.

-Esto va a arder un poco, pero después vas a sentirte mejor, voy a ponerte una gasa, así no se infecta.- Luego de terminar como su trabajo, Namjoon se encontraba como nuevo, o al menos su nariz. –Eres un tonto muy valiente.- Lo abrazo pegándose a su cuerpo.

-Me siento muy ridículo Jin, porque permitiste que venga con nosotros?- Hablo sin corresponder el abrazo.

-Estaba solo, no podíamos dejarlo ahí...- Se apretó más, esperando a que el menor le corresponda.

-Bueno, pero no voy a dejarlos a solas con el.- Abrazo a Jin sintiéndose mucho más tranquilo.

Se quedaron un rato en la misma posición, hablando de cosas poco importantes, para luego de un rato, separarse e ir a la cocina con el resto.

-Oh! Nam, Jin, con Jiwoo ya revisamos toda la casa, seleccionamos las cosas importantes, tampoco es bueno ir muy cargado... Menos ahora que bueno, no tenemos más el auto.- El rubio asintió, buscando con la mirada a Kris. –Está jugando con ese celular que tiene hace un rato largo, igual no hay señal, no sé qué planea.- El desconocido tecleaba cosas sin sentido en el celular que era totalmente distinto a alguno que hayan visto antes.

-Eso no es un celular cualquiera.- Hablo seguro de sus palabras. –Es un celular... De estos...- Se rascaba la cabeza, tratando que la palabra le saliera. –SATELITAL!-

-Exacto, es un celular satelital, y estoy tratando de contactar con algunos compañeros, pero sin que me rastreen.- Hablo Kris, cómodo desde el sillón. Los cuatro se acercaron para observar más de cerca. Lo vieron teclear tres simple números. 020. –Vamos... Atiende... Hola!!! Al fin me responde alguien!- Festejaba internamente. – Hyo, como estas, conse... Quien habla? Tu... No eres Hyo. Escúchame mocoso, yo soy un rango mayor a ti, no... Aunque no me digas tu maldito nombre voy a rastrearte, lo veras.- Colgó, revoleando el teléfono lejos. –DEMONIOS.- Grito exasperado. –Alguien mato a Hyo, que es lo que hare sin hyo ahora? No tengo plan, maldita sea.- La mirada de todos en la habitación se centraban en él.

-Muy bien, si quieres que te ayudemos, creo que merecemos una explicación.- Jiwoo, siempre llevando la delantera.

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Los cinco llegaron al primer peldaño de la estación. Mirar hacia abajo, notar la escasa luz, los hizo dudar. Dar media vuelta sería peor idea aún. Nadie podía asegurar cuanto tiempo esos zombies estarían distraídos por las alarmas. No había forma de enfrentarlos ni una decisión concreta sobre qué camino tomar. Lentamente comenzaron a descender, con sigilo, miedo, ansias. La suerte estuvo de su lado hasta entonces. Pero es suerte, sólo eso. Algo fortuito que puede cambiar o desaparecer. En sus cabezas sabían que en algún momento se podía acabar. Rogaban porque este no sea ese ''momento''.