Enamórate como puedas (Trilogía "Como puedas" Parte 1)

Capítulo 7

Cuando llegamos al comedor vi a Lucía junto a Adrián cenando tranquilamente, ella me lanzó una sonrisa y abrió los ojos como platos al verme acompañada de Laura. Paola también parecía muy entretenida charlando con Guille por lo que nos dejaron solas a Laura y a mi, no sé si eso me gustaba o no. Laura insistió en que cenáramos juntas y así poder hacernos tantas preguntas como quisiéramos, pero realmente no se me ocurría ninguna, y además Lucía se había encargado ya de contarme varias cosas sobre ella.

-¿Estás pensando qué preguntarme?

La voz de Laura me sacó de mis pensamientos. Parecía ansiosa por que le preguntara cosas, daba la impresión de que estaba interesada de verdad en conocernos.

-¿Cómo llegaste aquí?

Aunque ya conocía la respuesta por parte de Lucía, quería oírselo decir a ella. Laura cambió un poco el gesto, no parecía que le gustara mucho esa pregunta, pero en seguida sacó a relucir su media sonrisa y respondió:

-Por mis buenas notas.

Noté al momento que estaba de broma, la miré levantando una ceja y ella rió. Una carcajada sincera que nunca antes le había escuchado.

-En serio -le insistí.

-Es una larga historia, pero resumiendo: Mis padres se separaron. Mi padre se fue a América y yo me quedé con mi madre que se volvió una amargada sin pasta. Decidió entonces que mantenerme le costaba mucho dinero y unas ganas que ella no tenía, así que me metió aquí. Si no tiene dinero ¿cómo paga esto? Te preguntarás. Pues con la pensión que le pasa mi padre cada mes. Y aquí estoy, dos años ya. La verdad es que el tiempo aquí pasa rapidísimo -dijo esto último con voz lejana y perdiendo la vista en su plato-. Y fin de la historia.

-No te llevas muy bien con tu madre, ¿no?

-Ey, ahora me toca preguntar a mi -protestó con gracia.

-Pregunta.

-¿Cómo has llegado tú aquí?

-Ya lo sabes, por una beca.

-Tú también sabías porqué estoy aquí y sin embargo has preguntado.

La miré sorprendida. A esta chica no se le escapa nada.

-A Lucía le encanta contar la vida de cada persona, es su hobbie favorito.

-¿Te estás metiendo con ella? -dije molesta.

-No. Le guardo mucho aprecio, pero somos muy diferentes.

Me quedé en silencio observándola seriamente, pero su sonrisa no se borraba de su rostro.

-Aún no me has explicado porqué estás aquí -volvió a preguntar.

-No quiero tener la vida de mis padres. Quiero ser alguien en la vida.

-Ya eres alguien en la vida -respondió al instante.

Me sorprende que siempre tenga una respuesta tan inmediata, da la sensación de que tuviera las respuestas aprendidas de memoria, pero es imposible que supiera las palabras exactas que yo le voy a decir en cada momento. La miré interrogante, no sé a qué se quiere referir con eso. Laura también respondió a mi silencio:

-Eres la chica que va a cambiar mi vida. No, mentira. Ya la estás cambiando.

Las palabras salieron solas de mi boca. Sin darme cuenta estaba teniendo una fluida conversación y totalmente relajada y agusto con una persona a la que hace dos días le tenía tirria. Parecía como si de un momento a otro esa mala sensación se hubiera esfumado, o quizás nunca estuvo y solo fue mi dura coraza la que no le permitía su paso a mi vida. Aunque aún es pronto para hablar de ciertos temas. Bueno, de un tema en concreto. Ese tema que solo únicamente conoce Paola y nadie más. No, ella no se puede enterar. No quiero que conozca esa parte tan oscura de mi vida.