MI VIDA ERES TÚ [Wattys]

Day 3

POV KATALINA

Desde ayer no se nada de Martín, cuando fui a hablar con su mamá, ella se sorprendió mucho, inmediatamente salimos a buscar a Edward, él era el único que tendría motivos para hacerle algo...pero se sabia que no podíamos culparlo de la desaparición de Martín sin pruebas, pero yo sentía que él tenía algo que ver con todo esto.

Hoy no han pasado ni 24 horas y aun no sabemos donde esta, a Edward su madre al saber como era empezó a preguntarle acerca de Martín, pero lo único que decía era que no sabía nada, que si habló con Martín pero que no lo golpeo y no tiene nada que ver con su desaparición... No le creo, Edward era el único problema para Martín en estos momentos...bueno eso era lo que yo pensaba.

POV MARTÍN

No se que me pasa, no se por qué ayer después de toparme con Edward y él decirme que me iba a golpear si seguía hablándole a Katrina, no quise ir a clases, fue extraño, solo quise salir e irme a un lugar donde nadie me buscara, donde solo esa persona que me conoce muy bien, sabe el lugar y sabe que solo ella y yo podemos estar ahí.

Al llegar a casa no había nadie, no me sorprendí...mi mamá en sus días libres salia, y ademas entraba a trabajar la otra semana, así que entre a mi cuarto para darme una ducha y luego dormir, la noche anterior no lo había hecho.

Estaba durmiendo cuando sentí la voz de mi madre diciéndome:

–¡Donde estabas!–dice con tono enojado.

–solo salí a caminar y se me hizo tarde, me quede donde Kata–le miento.

–el día que vuelvas a salir sin mi permiso de seguro no vuelves a entrar–sale del cuarto cerrando la puerta con un fuerte golpe.

Sabia que lo decía enserio, una vez cuando estaba más pequeño fue capaz de dejarme en la calle, solo por que le llegue una hora tarde, y no me hablo si no hasta en la noche, fui y me quede donde Kata.

Katalina, ella aún me quiere, además no le dijo a nadie donde podría estar...así que fui donde ella, necesitaba que habláramos.

Al llegar a su casa y tocar una o dos veces el timbre ella abrió, al verme se lanzo a abrazarme, pero luego de retirarse me abofeteo y cerro la puerta...no la entendía, toque de nuevo.

–Eres un idiota–me dice mientras me abofetea de nuevo.

–Deja de abofetearme–le digo.

–¿Donde estabas.?–pregunta con tono molesto.

–¡Como! Pensé que sabías.

–Si supiera ya le fuera dicho a tu madre, nos tenias preocupadas, te buscamos por todos lados.

–¡BUSCARME!–grito.

–Si–dice.

–Pero si yo le dije que estaba contigo.

–Pues sabe que tu le mentiste, y no me metas más en tus malditos problemas-me abofetea–¡DONDE ESTABAS!

–En el único lugar donde tu y yo consideramos sagrado–le susurro–pensé que lo sabías.

–¡Ohhh! ¿Por qué no pensé en eso.?

–Tal ves porque ya no es sagrado para ti–me retiro.

–¿Sagrado? Sagrado lo que siento por ti, pero tu la prefieres a ella–Susurra.

–¿Que dijiste?–pregunto.

Solo tomo la puerta y la cerro, me había dejado hablando solo, ¿quién era el idiota? Yo no era el que se comportaba como un niñito llorando por sus juguetes, ¿por qué no aceptaba que yo quería a Katrina? ¿Que le había hecho ella para que la odiara tanto? Yo solo quiero ser feliz con Katrina y no voy a permitir que una niña estúpida como tu ni el estúpido de Edward me separen de ella.

Salí en busca de Katrina, sabía donde vivía, así que fui a buscarla...al llegar a su casa pude notar que la puerta estaba entre abierta así que no me moleste en pasar, todo estaba solo y silencioso...hasta que escuche un ruido acompañado de un fuerte gemido, todo proveniente de una habitación subiendo las escaleras, estando más cerca de la habitación los gemidos se escuchaban aún más fuertes, eran de una mujer, por un momento pensé que era la mamá de Katrina así que decidí irme, pero cuando me disponía a irme escuche la voz de la mujer que gritaba:

–¡OHHHH SI! EDWARD LO HACES MUY RICO, POR FAVOR NO TERMINES.

AL escuchar eso me llene de intriga y decidí ir a ver quienes eran...no debí hacerlo, no tuve por qué meterme sin permiso a su casa, si no lo fuera hecho no hubiera visto lo que vi, fui un idiota al pensar que Katrina quería algo conmigo. No se si era una ZORRA pero lo que se era que se estaba arrevolcando en la cama con Edward, parecía una misma PUTA cuando la vi...salí de ahí sin que se dieran cuenta pero al cerrar la puerta, le di tan duro que creo que escucharon.

Pensé en no volver a mi casa e irme para el mismo lugar donde estuve la noche anterior; pero sabía que me iban a buscar allí, así que tuve que irme para mi casa, hacer como si nada hubiera pasado y aguantarme la cantaleta de mi mamá durante horas.

No se por qué me regañaba, ella no sabía y no entendía lo que estaba pasando, ella al igual que cualquier adolescente le mintió a sus padres, así que pensé que entendería por qué yo lo hacía...mientras me regañaba decidí romper el silencio por parte mía y le pregunte:

–¡Mamá! ¿Tu nunca le mentiste a mis abuelos.?

–No estamos hablando de mi,  así que....

Interrumpí diciendo –Estamos hablando de lo que cualquier adolescente haría en mi lugar, todos hemos mentido, tu igual, ¡TU FUISTE LA QUE TUVO UNA HIJA A LOS CATORCE AÑOS YO NO!–Dije con un tono un poco alto.

–¡CÁLLATE!–Me abofeteo–No sabes cuanto me arrepiento de lo que paso.

–¿Te arrepientes de haber tenido a mi hermana?–pregunto algo molesto y sorprendido.

–No...me arrepiento de haberte tenido a ti–dice mientras se retira.

No supo cuanto me dolió esa frase...y sí tengo una hermana, se fue cuando cumplió mayoría de edad, estudia psicología y vive fuera del país.