Miércoles Addams en el Instituto.

El domingo de Ades

-Levanta gandul- Dijo mi madre entrando a mi habitación y levantando la persona  dejando que entrará la claridad- Tienes que estudiar y a las diez tienes que ir a buscar con tu padre a tus abuelos al aeropuerto.

Me tape con la sabana suspirando, mis abuelos eran pedantes y arrogantes.

-ESPABILA- gritó mi madre saliendo de la habitación.

Me levanté y fui a la ducha el agua caliente humedecio mi cuerpo quería quedarme allí todo el día,pero no podía.

Al salir contemple mi imagen en el espejo tenía unas notables ojeras bajo mis claros ojos.

Pensé en Miércoles ella las tenía, pero le quedaban tan bien, era tan guapa, tan diferente, tan ella.

Bajé a desayunar ya vestido mi madre me planeó todo el dia mientras me comía mis cereales, le había dicho a Miércoles que los domingos me los pasaba holgazaneando pero no era del todo cierto, mi madre me mantenía ocupado las 24 h del día,los 365 días del año.
Y eso empezaba a cansarme.

Coloqué el bol en el lavavajillas y subí a mi habitación, saque mis libros y empecé  a leer  pero sinceramente sin prestar ni una pizca de atención a lo que leía.

En mi cabeza sólo pensaba en Miércoles y sinceramente no sabía porque,  ella no era la típica chica que  a la mínima que ve que un chico le dedica un poco mas de atención hace lo mismo,  sinceramente no sabía si podía tener alguna posiblidad con ella, recordé a su padre ese hombre de bigote tan elegante y misterioso, dicen que las chicas inconscientemente buscan un chico como sus padres, y yo era elegante pero no hasta esos extremos, pero no quería sacar a Miércoles de ese pesimismo eterno en el que  vivía,eso, puede parecer cruel pero, me atraía el doble.

-Es hora ve con tu padre a buscar a tus abuelos -Dijo mi madre interrumpiendo mis pensamientos.

Suspirando  baje al salón mi padre esperaba en la puerta.

Ambos nos metimos en el coche yo aún con Miércoles aún en mis pensamientos.

-Oye papá, cuando salí con Lilian la chica esa que acabo por dejarme ¿Te acuerdas?-dije intentando empezar una conversación que me daba bastante miedo.

-Si y me alegré bastante,no era para ti-Dijo mi padre iendo justo por donde yo quería. ¿Porque? No habrás vuelto con ella...

-No, se mudó a las dos semanas de dejarme, que era lo que no soportabas de ella, quiero decir,  porque te alegraste....

-Hijo era una pija demasiado para ti, me daba la sensación de que únicamente estaba por ti por querer conseguir algo y al ver que no pudo si te dejó, tienes que vigilar de esas hay muchas.....

-Me gusta una chica...pero no estoy seguro de yo gustarle a ella-Dije pensando en Miércoles-  es complicada...

-Todas las mujeres lo son hijo- río mi padre- más vale hacer caso a lo que te dicen que si no vas listo- Dijo riendo más.

Yo reí, mi padre podía ser muy estricto pero sabía perfectamente que era como un amigo en muchas ocasiones y confiaba en el.

-Ella lo es mas creeme digamos que es como....no se como decirlo es..no se ni como describirla- reí pareciendo idiota.

-Si que te ha  dado fuerte- me miró mi padre.

-No sólo que es difícil de definir eso sí te puedo decir que no es nada pija más  bien lo contrario pero elegante y educada, a su manera, además misteriosa y muy guapa.- conseguí decir al fin.

Llegamos al aeropuerto y en parte lo agradecí,  hasta que vi a mis abuelos acercarse.

-Llegas tarde Frederic hace diez minutos que esperamos-Dijo mi abuela  entregandole la maleta como si mi padre fuera un botones.

-Lo siento Petra había caravana-dijo mi padre mintiendo pues la carretera estava totalmente despejada sólo que a el sus suegros le caían tan bien como a mi.

No tardaron  en reparar en mi.

-Que mayor estás y que  guapo- Dijo ella agarrando y estrujamdo mis mejillas dejándolas más roja de lo habitual- ¿Debes de llevarte a todas las chicas que quieras eeeh Bribón?

Negué con una sonrisa más falsa que una moneda de chocolate y preferí no contestar.

El camino de vuelta a casa con ellos fue lo peor se quejaban por todo preguntaban por todo y ni me atreví  a mencionar a Miércoles.

Al llegar me intente escabullir mas de una vez a la habitación pero mi madre cada vez que lo intentaba me mandaba hacer algo me hacia alguna pregunta o me miraba amenazante para qie me quedara y me iba  a dar un infarto tanto pedantismo.

-Y Adesman querido ¿Tienes novia? -pregunto mi abuelo.

Negué con la cabeza odiando que pronunciará mi nombre completo.

-Pero le gusta una chica ¿A que si hijo?- Dijo  mi padre de golpe y por mi mirada supo que habría preferido que se quedara callado- Digo yo....claro...no se-Intento agregarlo en vano.

-¿A si que te gusta una chica y dime como es?-preguntó mi  abuela bajo la atenta mirada de mi madre que también le pillaba de nuevo.

Ya no había marcha atrás.

-A ver gustarme, gustarme no...mas bien me atrae ósea....quiero conocerla por que tiene mucho misterio-Dije yo.

-Así que misteriosa eeh-Dijo mi abuela con media sonrisa-Y como se llama?

-Miércoles-Dije.

Todos me miraron como si estuviera diciendo algo extraño y bueno extraño era, pero no mentira.

-Un nombre muy peculiar la verdad- Dijo mi abuelo- Y que es animadora

-No-Dije.

-¿Va a tu clase?-

-Si-odiaba estos interrogatorios inútiles.

-Cuéntanos ¿como es?-Dijo mi abuela.

-Eso cielo como es esa tal Miércoles- Dijo mi madre con tono incrédulo.

Fue la gota que colmó el vaso, querían  saber del ella pues lo sabrían.

-Se llama Miércoles Addams vino nueva al instituto hará unos dias pero me encanta su forma de ser, es gótica, sería,borde misteriosa y elegante -mi familia me miraba atónita y aun no había dicho nada- Sus pasatiempos favoritos son torturar a su hermano desenterrar cadáveres del cementerio que tiene en su casa y de mayor quiere trabajar en una funeraria.

Las caras de mi familia eran todo un poema yo sonreí de medio lado

-Así es Miércoles - dije levantándome y iendo a mi habitación, mi madre esta vez no me lo impidió.

Me tumbe en la cama con una felicidad extraña ella misma me había dicho esas cosas menos lo de la funeraria pero le pegaba para finalizar mi argumento.

Escuché a mi madre decir que seguramente éstaba bromeando y aun me reí más.

Pensé que si algún día la conseguía y la conocían se llevarían una gran sorpresa.

Me quedé dormido con una sonrisa pensando en ella cuando seguramente ella estaría  torturando a su hermano o algo asi sin pensar para nada en mi.