Celos de Ashley

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Miércoles llegó donde Ades.

-¿Alguna idea de lo que quieres hacer?-Le preguntó el muchacho.

-Posiblemente las cosas que haría yo a ti te parecerian desagradables asi que elige tu- dijo la joven-Disculpame un segundo.

Caminó hacia el coche de Largo, Ades la siguió.

-Largo, vuelve a casa solo, tengo algo que hacer de ocio con un compañero dile a madre y padre que no volveré tarde-

El "hombre" si asi se le podia llamar gruñó mirando al muchacho.

-Si este es, diles simplemente lo que te he dicho de acuerdo no des ningún tipo de detalle más, entendido-Dijo Miércoles.

El "hombre" gruñó de nuevo y se marchó por donde había venido.

-Bien donde vamos pues- pregunto la chica.

-Pues vamos a tomar algo y asi nos conocemos un poco ¿Te parece? -preguntó el chico.

-Esta bien-dijo Miércoles con su seriedad característica.

Ambos caminaron hacia afuera del instituto observados por una celosa y enfadada Ashley, que tras despedirse de sus amigas y hacer una llamada de aviso, decidió seguirlos.

Ades se detuvo en un bar.

-Te parece bien aqui-Dijo mirando a la chica.

-No me desagrada en mayoría-respondio la muchacha.

-Me lo tomaré positivamente-dijo el chico tomando asiento en una mesa de la terraza.

Miércoles le imitó sentándose al lado y colocando su mochila en su regazo.

-Hola buenas que van a tomar-dijo una chica delgadita con una coleta pelirroja alta.

-Una coca cola y...-dijo Ades mirando a Miércoles.

-Un vaso de agua caliente -Dijo la chica.

-Quiere alguna infusión....con el agua. ..¿caliente? -Preguntó sorprendida la camarera.

-No, agua caliente simplemente-Dijo la chica.

-Esta bien, enseguida-Dijo la mujer entrando en el local.

-Eres tan extraña-dijo el chico sacando un paquete de tabaco- No te importa que fume ¿verdad?

-Gracias y no, mi padre y mi hermano también lo hacen- Aclaró Miércoles.

-Tienes hermanos mayores-Dijo el chico encendiendo el cigarro.

-No, pequeños-dijo la muchacha.

-De que edades- preguntó el chico.

-Cinco y quince-dijo la chica.

-Aqui tienen- interrumpió la camarera dejando en la mesa la cocacola y el vaso de agua.

-Gracias-Dijeron al unísono los adolescentes.

Miércoles agarró el vaso con abas manos y lo acercó a ella un poco mas.

-¿Y con quince años ya fuma tu hermano? -Preguntó Ades.

-No, el que fuma es el de cinco-aclaro Miércoles.

-¿Que? Tiene que ser una broma ¿No?-Rio el chico.

-No, no lo es-Dijo ella, estirando de una cadena qie llevaba colgada del cuello hacia arriba sacando un frasquito que llevaba colgado en ella.

-¿Y desde cuando fuma desde los tres o que? -Dijo el chico incrédulo.

-No desde los nueve meses- dijo tan tranquila Miércoles virtiendo el contenido del frasquito en el vaso y tintandolo de rojo.

-¿Pero que dices? - dijo riendo el chico- Y tus padres lo saben.

-Por supuesto, el dia que mi hermano cogio un cigarillo por primera vez esa misma noche mi padre montó una fiesta a la que invitó a toda la familia-dijo la joven- y desde entonces no para se repetirnos a mi hermano y a mi que tomemos ejemplo de nuestro hermano.

-.....estoy alucinando-dijo al fin el chico- Cambiando de tema que si no me va estallar el cerebro, que te has hechado en el vaso.

-Sangre en polvo diluible-Dijo tan tranquila la chica para luego dar un sorbo.

-Eres la chica mas extraña, alucinante y misteriosa que he conocido- dijo el chico echándose para atras y mirándola con admiración.

-Gracias-dijo dando de nuevo un sorbo.

-¿Y cuéntame que te gusta hacer en tu tiempo libre?-Preguntó el chico.

-Torturar a mi hermano Pugsley, desenterrar familiares y visitar las catacumbas ocultas del cementerio de mi jardín- Dijo tan tranquila Miércoles.

-Aaah....valee...-río el chico- ¿Pugsley es el de cinco fumador o el de quince? -preguntó el chico.

-El de quince-Repondio Miércoles.

-¿Y el de cinco como se llama?- Preguntó de nuevo.

-Pubis-dijo la chica.

-Tu familia es de película enserio- dijo el chico.

Miércoles se quedo callada y se limitó a beber de su vaso hasta apurarlo.

-La compañía es grata pero debo marcharme ya- Dijo levantándose la chica.

-Espera que pago y te acompañó- dijo e chico o entrando y saliendo de nuevo en eacasos minutos.

-No me ha cobrado tu vaso-Rio- me has salido gratis.

-Que bien entonces-Dijo empezado a caminar.

-¿Vives muy lejos?-Dijo el chico caminado al lado de la trenzas.

-No demasiado-dijo la chica metiéndose por calles que el chico no sabia ni que existían- No hace falta que me acompañes, no me perderé.

-No tranquila no tengo nada mejor que hacer-Dijo el chico.

-Esta bien -contestó la chica.

Y tras caminar unos cinco minutos mas, llegaron a una zona que Ades desconocía su existencia y tras girar la última calle y caminar unos metros más llegaron a la mansión Addams.

-Aqui es-Dijo la chica detenidose en la gran verja que custodiaba la casa.

-Madre miaaa-Dijo el chico observando la gran antigua y mística casa-La verdad es que encaja perfectamente contigo, pero no te da miedo vivir aquí- dijo el chico.

-No - contestó la chica acariciando la verja para luego zarandearla.

-¿Estas segura de que vives aquí? -dijo el chico.

-Si, esta mañana aquí vivía dudo que ya no, me habrían avisado-Dijo la chica y volvió a zarandear la verja- despierta holgazána y dejame entraaaar.

El chico pensaba que ya se le había ido la cabeza por completo cuando la verja gritó, dio un paso atrás incrédulo, y automáticamente se abrio, y Miércoles entro.

-Hasta mañana Ades, gracias por acompañarme- dijo la chica para después subir por la gran subida que llevaba a la casa.

La verja se cerro de golpe gritando una vez mas y Ades sin pensarlo salio corriendo, al llegar a su casa río como un loco, esa chica me gustaba de verdad pero a veces le asustaba y bastante.

Miércoles Addams en el Instituto. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora