Capitulo 4

18.1K 1.1K 166
                                    


*Pov Dyl* *Si, me acorde que hay algunas que al leerlo sin Internet no ven el cartelito graaande que dice "POV DYL"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

*Pov Dyl* *Si, me acorde que hay algunas que al leerlo sin Internet no ven el cartelito graaande que dice "POV DYL". Ámenme😏🌚❤*


―¡DYLAN SUMMERS!―Me gritaron en el oído. 

―¿Que? No, yo soy inocente, el unicornio es el culpable.―Dije sobresaltada. 

Sentí unas risillas y mire para ver *¿Entienden? Mire para ver, ah ah, soy una genia *inserte emoticon de las uñas re de diva*😎👌🖖* en fin, en lo que estaba...mire para ver *;)* quien fue que me grito en el pinche oído. 

―Tú, mundano― señalé al que estaba más cerca a mi, Tyl se señalo a si mismo y negó. Mire a todos atentamente y había uno, solo uno, que al parecer no podía contener la risa.―Jesse.

Jesse comenzó a correr y yo me levante mas que rápido solamente para salir tras él. 

―¡Tú, muggle asqueroso, ¿¡como te atreves a despertarme de mi sueño de belleza y gritándome!?!― le grite mientras corría tras él. 

―¡Al parecer necesitas mas horas de sueño de belleza, muchísimas más horas!― me gritó mientras se reía. 

Agarré lo primero que se cruzo en mi camino, el café de Aly, se lo tire con taza y todo a Jesse. 

―Oye, ese era mi café― protesto Aly. 

Me encogí de hombros―Lo siento, hazte otro y no te quejes. Quien te manda ponerlo cerca de mi, justo cuando busco algo para tirarle a un sangre sucia. 

Jesse rodó por el piso ya que la taza le pego en su cabeza y le volcó todo el café encima. 

―¡Oye, casi me matas!― me gritó mientras se tocaba la cabeza en la parte donde la taza le pego. 

―Si, lo siento, no se que me paso, casi te mato... ¡OJALA TE HUBIERA MATADO MUTACIÓN DE LAGARTIJA!― le grite, agarré la taza de Aly y se la devolví―Hey, tu taza es muy resistente, me gusta.

―Lo se, es una arma perfecta― me sonrió Aly con malicia. 

―¿Por que me despertaron? ― les pregunté a los chicos que estaban a nuestro lado. 

Jack fue quien contesto― Jesse hizo una broma muy, muy, muy idiota y nos echaron del hotel. 

―¿Que hizo este engendro de dos patas?― pregunté. 

―Nada― dijo Jesse rapidamente. 

―Le puso una cámara a la habitación de alado y se dieron cuenta― contó Chad. 

Mire a Jesse confundida―¿En la habitación de la señora MacKenzie?

La señora MacKenzie es una veterana de unos 88 años, viuda y vive en la habitación de alado, bueno no vive porque es un hotel, pero se esta quedando aquí desde que su esposo falleció, en serio, su historia fue super triste, y nos la contó a Tyl y a mi. 

¡Esto es Kappa Sigma Bitches! #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora