Me levante con un dolor de cabeza que no aguantaba, entre al baño, y escuche la regadera abierta, abrí la puerta de la ducha y vi a una mujer desnuda.
—¿Quién demonios eres? – le pregunte y ella me sonrió
—Soy Sarah, ¿no lo recuerdas?—dijo con un acento francés, me negué y ella me miró confundida – nos conocimos anoche en el bar y me invitaste unos tragos y luego me trajiste aquí, pasamos una gran noche – dijo rozando con su dedo mi pecho.
—¿Tuvimos sexo? – ella asintió y trato de besarme, pero la esquivé.
—Sí, cariño, pero veo que no lo recuerdas, aunque lo disfrutaste tanto como yo – salió de la ducha y de inmediato le di una toalla para que se tapara.
—oye, no recuerdo nada, así que me temo que tendrás que irte – le dije y ella arqueó una ceja.
—Ya lo sé amor, no tienes que ser un estúpido Americano – salió del baño y camino hacia el cuarto donde tomo su vestido y zapatos del suelo.
Era una peli roja de ojos café y pecas en las mejillas con un cuerpo muy definido y hermoso, pero aunque trataba recodar ¿Cómo termine con ella en mi cuarto? El dolor de cabeza era insoportable, espere que ella se fuera para bañarme y poder ir a desayunar, baje por el ascensor y fui directo hasta el restaurant que estaba en plata bajan, entre y me senté ordene unos huevos fritos con tocino y pan, a y mi juego de naranja bien cagado y fuerte cuando vi entrar a Alanna seguido de algunos de sus compañeros se sentó sola mientras que los demás estaban en grupo, era claro que no la trataban a ella como una compañera o amiga, me levante y camine hasta donde ella estaba.
—No eres muy sociable, ¿o sí? – ella sonrió, apenas me vio.
—No soy de muchos amigos, ¿Qué hace aquí, señor Chris?
Bueno, me hospedo aquí casualmente – ella arqueó una ceja y me sonrió.
—Con que “casualmente” – dijo
—Bueno, me puede acompañar en mi desayuno – me dijo señalando una silla, me senté frente a ella para tener un poco más de visión hacia ella.
—¿Y tu vuelo de 30 minutos? – le pregunté mientras la camarera tomaba su orden.
—Fue suspendido debido a que hay una tormenta de nieve – tome mi jugo para aliviar mi resaca.
—¿Entonces estás libre? – Ella asintió – bueno podríamos ir a conocer juntos las maravillas de esta ciudad, luego de que termine mi jefe algunas cosas – ella sonrió y asintió.
—Me encantaría aparte de que, no tengo ningún conocido o amigo aquí – esa chica era muy hermosa había algo en ella que me encantaba, no sabía si era su sonrisa, sus ojos, su forma de hablar o eso que hacía con el cabello cada vez que estaba leyendo algo, ella tomaba un mechon de cabello y lo rizaba con su dedo, o tal vez era todo lo que me hacía querer saber más y más de ella.
Disfrutamos de nuestro desayuno, y no pude evitar notar que algunos de sus compañeros de trabajo nos estaban mirando y comentaban algo entre sí.
—¿Cuánto tiempo tienes en la aerolínea Jackson? – le pregunté y ella tomó un sorbo de su café y me miro.
—Unos tres meses.
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Mr. Zero
RomanceEsta es la historia de Chris Jackson un importante Empresario dueño de una de las mejores aerolínea llamada Air Jackson el negocio familiar, que ahora es turno de que el tome las riendas, Chris es un soltero que tiene una familia algo complicada y u...