Historias De Lujuria (+18)

¿Prohibido? (+18)

¿Qué puede ser más exitante que hacer lo prohibido?, no me refiero a aquello que la sociedad dicta como incorrecto, en eso no esta la verdadera sensación de vértigo que se siente al actuar con rebeldía. Me refiero a aquello que la propia conciencia y moral dicta como incorrecto, aquello que produce una batalla entre lo que queremos y lo que hacemos, una disputa entre dos caminos con destinos diferentes. Por un lado podemos hacer lo correcto y quedarnos con la satisfacción de hacer aquello que todos esperan que hagamos, por otro lado podemos hacer lo incorrecto y vivir la experiencia de llevar la contraria incluso a nuestra propia razón, ¿Qué tiene de bueno eso?..... Juzguen ustedes mismos.

Era difícil verla a los ojos sabiendo que aquello que deseaba era amparado solo por el mismo demonio, era difícil escuchala reir y no querer abrazarla para ver sus labios más de cerca, verlos con la mirada que solo un corazón enamorado permite tener, pero, era aún más difícil saber que todo aquello debía mantenerse en mi imaginación por el bien de todos.

Laura era una compañera de colegio, para todos era una joven normal, con amigas, con opinión, con sueños, con familia, etc. Pero para mi era la joven normal, con sus amigas, con su opinión, con sus sueños, con su familia y con mi corazón. Pero ella ya tenia en sus manos el corazón de otra persona y lo habia recibido con amor.

Laura y yo vivimos relativamente cerca, así que muchas veces caminabamos juntos hacia su casa (sabía que me estaba haciendo mal, pero que diablos), todo era normal hasta que un día, dejo de serlo.

Era viernes y estaba conversando con Laura sobre lo felices que eramos por el fin de semana que se aproximaba, pero algo pasaba con ella, su voz no era la de siempre, habian detalles, de esos detalles que solo te das cuenta que existen cuando usas todo tu tiempo en pensar en una persona. Le pregunte que le pasaba a lo que ella respondio:

- Nada

Oh por favor Laura, ¿Crees que soy idiota?, conozco cada uno de tus gestos y piensas que un "nada", me va a convencer de algo, siempre todas dicen lo mismo y después se guardan sus problemas para si mismas, por fa.... -pensaba hasta que me interrumpio-

- Bueno, tal vez... tal vez si necesite hablar contigo sobre algo, ¿Quieres pasar a mi casa?.

Bueno en este punto admito que sufrí un tapadón de bocas mental.

- por supuesto - respondí

(Una respuesta sumamente impresionante para el lector, pero bueno continuemos)

Pasamos a su casa y nos sentamos en el sofá del living, hubo uno o dos minutos de silencio hasta que le pregunte que sucedia y me respondió:

- La verdad no lo se, no me pasa nada, o quizás no deberia hacerlo, pero no puedo evitarlo...

Se quedo en silencio por nos momentos, notaba en su rostro que habia algo que queria decir, pero no era capaz de decirlo sin una pequeña ayuda, le toque el hombro, le sonrei y le dije:

- Puedes confiar en mi, sea lo que sea no se lo contare a más de 15 personas

se formo una pequeña sonrisa en su rostro y al fin habló.

- Creo que me gustas... pero, estoy confundida, estoy....

La interrumpí, no con palabras, sino con acciones, tome su rostro con mi mano derecha y la acerque hacia mi, estabamos tan cerca que podia sentir el aire que salia por su boca al respirar, solte su rostro y acomode su cabello, mientras mis ojos gritaban que hicieramos lo que mi boca no se atrevia a hacer.

- No deberiamos, sabes lo que va a suceder, sabes mi situación, sabes que no puedo hacer esto - Me dijo

Yo sabía perfectamente a lo que se refería, mi imaginación se habia puesto en esta situación más de una vez , y siempre pensaba que en el momento yo le diria que estaba de acuerdo, que no queria hacerla pasar por nada malo, que merece ser feliz... pero en ese momento no estaba en mi imaginación, tenía su rostro, sus ojos.... su boca, a unos centimetros de mí  y la razón sucumbía poco a poco al corazón, pero no debia, no podía, es decir, si puedo, pero, pero.... maldición, se lo que debo hacer pero.....