Autista...N.H

ocho

-¡Niall!.-Llamó su madre.
Niall bajo las escaleras llendo hacia la puerta, iba ser habitual ir a tomar un café, al menos hacer el intento. Los meses pasaban y Niall ya llevaba mejorando bastante, el ya respondía, tímido y pasuado pero respondía, Jazz había sido gran ayuda, ella lo veía debes en cuando y siempre se iban a su lugar especial, habían considerado un árbol como suyo y se había formado parte de la familia, aún que Niall no estaba veiendo muy seguido a Jazz.

-Vamos amor.-Le sonrio la madre. Maura ya no lloraba todas las noches, de hecho cocinaba mucho más, y sonreía igual, se alegraba por su hijo, el estaba mejorando.
Niall y Maura, se fueron a la cafetería aún que algo no le agradó a Niall, Jazz ya no estaba allí, se veía tan preocupado por ello tan estúpido, quiso auto convencer que estaba en la cocina o en el baño, pero no fue así,  ella ya hubiera salido, el hombre que trabajaba con ella apareció, aún que Maura parecía igual de preocupada que su hijo.- No esta Jazz.- Preguntó ella.
-Lamento que se tomó el día.
Niall se alteró, sabía cuanto amaba este trabajo, ella se lo repetía para sacar tema, aún que Niall nunca hablará, ella tenía la necesidad de saber que era escuchada.
La respiración de Niall era ahogada, las ideas le daban vueltas estaba alterado, iba a entrar en pánico ....
-Hijo, tranquilizante.-Susurro la madre.
-Traeré agua.-Corrió el chico.
La vista del moreno se hacía borrosa y sus manos pálidas y frías.
Nunca se había puesto así en años. Y eso era una preocupación.
-Respira amor.
-De...De.
-No hables sólo respira.
-Mamá.- Se paró titubeante.- Ma..M...-. El chico se iba a caer pero de algún modo no lo hizo y retrocedió para irse del lugar . El aire de California le devolvió la vicion y color, el de tranquilizó un poco, pero no tanto como para correr en busca de su guarida. Y allí estaba, la chica de labios rojos y pelo castaño apoyaba su cabeza en el regazo , pequeños lloriqueos y absorbidas de mocos. Jazz levantó la cabeza como si nada, Jazz pareció ver un moustro, se sorprendió al ver a su "amigo" parado allí.
-¿Hace cuanto llevas parado ahí? ¿eh?.-Patotio ella.
-Shh. - Calló él , y corrió a los  abrazos de la chica. Ella no tomó tiempo de aceptarlo y llorar aún más fuerte que antes.
-¿Por qué? , no tienen el derecho.- golpeó el hombro de Niall con desesperación. -Ellos no pueden apartarla, no por mi.
-¿Quieres dejar de hablar en codigos? -Tranquizo el chico.
-Mi hermana, yo, mi vida, todo.- parecía hablar igual que Niall en sus tiempos libres.-¿Por qué eres así?
-¿Así cómo?.
-...Distinto.-Susurro la chica.-Un día hablas mal otro bien, un día me haces sentir miserable y al otro la más buena.
-No puedo controlarlo... No es mi culpa. -Susurro apenado.
-Mi hermana.-Pareció no escuchar a Niall. Ella miraba a la nada.-Esta peor.-Rió irónica.- Pierde el poco pelo que tiene.., hay gente mala que la deja de lado. -Lo miró.- Hay gente muy mala Niall, no merecen apartarte a ti ni a nadie.
-¿Qué hay de ti?.
-Soy una puta más. Bajo su mirada avergonzada.- Al menos eso me hacen entender. Niall la miró comprensivo pero apenado. La abrazo repitiendo cada acto.
-Te llevarias bien con mi hermana¿Sabes?, ella es lo más lindo que tiene la tierra.- ella volvió apenarse por ello y se quedó en silencio, por varios minutos. Escuchando los latidos fuertes de el hombre el cual sostenía todas sus penas.
-Eres una gran persona, Jazz. No debes olvidarlo...
La chica se separó bruscamente de el buscando sus hermosos ojos azules que tanto la enloquecian por meses. -No vuelvas a decir esas palabras si no quieres que cometa delitos.-Apollo sus suaves manos en la barbilla punzantes del chico.
-Me temo que no se a que se refiere señora.-Sonrio tímidamente el chico.
La timidez del chico volvió sin ningún porqué y sus manos empezaron a sudar.
-Creo que si lo sabes Niall.-Sonrio tontamente.-Gracias por cambiarme el ánimo. -Susurro.
-No de que.
-Shh.-Susurro y se quedó en su pecho, escuchando la respiración y el latido rápido de el hombre.
-Cuéntame algo que no sepa.
Niall pensó en hablar o no y al final decidió hablar. -Cuando era chico vivía con mis padres y mi hermano, recuerdo llamarse Greg, lo amaba, pero un día mi mamá me dijo que nos veníamos a vivir a California por mi abuela, ella murió nunca la vi, pero mi padre...-El suspiro y acarició su pelo.
-¿Él?.-Preguntó Jazz
-No volvió,  mi mamá dijo que lo haría. -Habló frío el chico.
-Lamento lo sucedido, Niall.
-Estar bien. -Puso su vista en la nada misma.
-Tan bueno.-Susurro ella.- Creo estar soñando.-Rió.
-Créeme que no soñarias conmigo.-Sonrio Niall.
-Si lo hago.
-Soñar con hablarte?-Sonrio apenado el. sólo había una pregunta de la chica, ¿Por qué habló tan fluido y ahora no?.- ¿Con yo normal?-Rió irónico.
-Tu eres normal, tu eres igual que yo.
-No lo creo...
-Claro que lo eres, ¿Por qué tratarte distinto? Eres igual que todos.
-Claro que No Jazz. Debes entender una simple cosa, No puedo hablarte todos los días como lo hago ahora, no me puedo acercar ni al que me atendio hoy , entre en pánico. .. No puedo decir lo bella que te vez con una sonrisa, o con tu pelo enredado, no puedo hablar como lo haces tu.-Suspiró agotado y Hugo con sus manos.- Entró en pánico. ..
-Puedo hacer que no pasé. ..
-No es tan simple, ¿Piensas que no lo han intentado estos 24 años?.
-Niall...
-Me pones tonto.-Sonrio avergonzado.
-Dije que no lo hiceras...-Susurró.
Se acercó hacia él rápidamente y estampó sus labios contra los de él, no se movían fríos y suaves, nerviosos, eran hermoso. Ellos se movieron nerviosa y tontamente. Primer beso de parte de Niall el cual decidió no acabarlo...