Clarke
- Mira eso es precioso - le digo a Lexa señalando un gran monumento.
- Si, es muy bonito, ¿foto? - pregunta agitando el móvil.
- Vale, aquí - digo colocándome en un ángulo para que el edificio se vea bien.
Me da un beso y hace unas cuántas fotos.
- Perfecta - al poco veo que la está subiendo a Instagram - La gente se ha vuelto como loca al ver la foto - dice mostrándome la cantidad de mensajes que le están llegando.
- Normal salgo preciosa - bromeo.
- Luego soy yo la creída... - añade ella.
Octavia se ha ido con una amiga a no sé que teatro nosotras no teníamos ganas por lo que nos hemos quedado por la ciudad dando una vuelta.
- Tengo hambre, vamos a comer.
- Vale, ¿a ese? - señala a un pequeño restaurante cerca de nosotros.
Pedimos y nos vamos fuera, a un banco junto al local, vemos pasar a la gente cada cual más metidas en sus propios asuntos, apoyo mi cabeza sobre el hombro de Lexa y ella me pasa la mano por encima del mio.
- He pensado de mudarme aquí, me gusta este país.
- ¿QUE? - pregunto quitando mi cabeza de su hombro y sobresaltándome.
- Que he pensado de mudarme aquí, no te alteres te vienes conmigo.
- ¿Pero que dices? Lo de mudarse es muy complicado además no sé ingles.
- Yo te enseño.
- Como me puedes decir algo tan importante de esa forma, esto es...
- Perdón, se que te lo he tenido que contar antes, pero ya estoy buscando pisos, lo siento, no te enfades - me ruega.
- Lexa lo que estás haciendo no me esta gustando nada, estas cosas son las que me tienes que contar, te vas a mudar a otro maldito país - digo, me estoy enfadando bastante.
- Perdón, no te preocupes cuando te calmes podemos hablar más tranquilamente - dice ella relajada.
- Por favor no sigas hablando me estoy enfadando demasiado - digo demasiado alterada.
Lexa me mira arrepentida y yo intento calmarme dando un paseo, ella no me sigue lo cual agradezco, ahora mismo no quiero estar con nadie.
Me parece muy fuerte que lleve tiempo queriendo mudarse a Estados Unidos y no me lo haya dicho, está buscando piso y ni me lo ha nombrado, joder por que hace estas cosas, deberíamos ser una pareja normal de las que hablan y se cuentan las cosas, pero ella tiene que guardarse hasta cosas ta importantes como esta.
Al cabo de 10 minutos vuelvo al banco y veo que ella no está, me empiezo a poner nerviosa ya que estoy sola en medio de Nueva York, escucho mi nombre a lo lejos y veo a Lexa con un ramo enorme de flores y un libro que le dije que me gustaba, estoy enfadada no puede hacer estas cosas cuando estoy mal humor.
- Me perdonas - durante unos segundos dudo, pero enseguida me abalanzo contra ella y le doy un beso.
- No sé, pero por ahora me quedo con esto, aunque no te creas que voy a dejar el tema de la mudanza apartado, hay que hablarlo - digo mientras cojo el ramo junto al libro.
- Me lo tomaré como un si.
...
- ¿Como os ha ido de la tarde? - pregunta Octavia.
- Bien - digo.
- No ha sonado muy convincente - al ver que no contestamos cambia de tema - nosotras hemos estado en una obra de teatro muy conocida, ha estado entretenido.
- Me alegro - digo cortante, no quiero tratarla, pero no tengo muchas ganas de hablar.
- No seas tan borde - me susurra Lexa - cariño estás muy alterada.
- Como para no.
- Vale, vale, lo pillo no te hablo - dice Lexa entristecida.
- Bueno ¿a donde vamos a cenar? - dice Octavia-
- Podríamos ir al hotel, no tengo ganas de salir.
- Vale, pues vamos allá - dice Lexa.
Cogemos un taxi y a los 30 min llegamos al hotel.
...
- Buenas noches - oigo decir a Octavia, hemos andando mas de lo normal para dejar a su amiga por lo que estoy muy cansada.
Me cambio y me pongo el pijama lo que sigue siendo una camiseta grande.
- Clarke... aunque no quieras hablar - hace una pausa - quiero decirte algo muy importante - me siento en la cama y me tenso al oír esas palabras - todo lo que ha pasado esta tarde es un mal entendido, no te lo he dicho por que me mudaría el año que viene y falta mucho para eso, estoy viendo pisos solo por que me ilusiona lo de pasar una temporada aquí, no te preocupes te avisaré de todo, siempre lo hago, yo confío en ti, no te enfades, espero que lo entiendas.
- Esto si me lo hubieses explicado hace unas cuántas horas y no hubiese pasado nada, ven aquí anda - digo abriendo mis brazos - no ha pasado nada.
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El amor es debilidad
Novela JuvenilLexa y Clarke, pertenecen a dos mundos totalmente diferentes. Heda está harta de su fama, no es feliz con lo que tiene. Wanheda es camarera, una persona humilde que se queja de su trabajo. Sus mundos se chocan y algo demasiado fuerte les une.