Tercer Curso (Harry Potter)

9. Confesiones

El Profesor Lupin se detuvo cuando estuvo al lado de Snape, este le dio un cáliz a Lupin y Lupin tomó de él inmediatamente. Lupin le devolvió el cáliz al Profesor Snape y salió del Gran Comedor.

-¿Te acuerdas del álbum que me regalaron para navidad en el primer año?- pregunté a Harry mientras aún miraba al Profesor Lupin alejarse.

-Si, el que nunca nos quieres mostrar.- respondió Harry.

-La carta firmada decía "Te quiere, R.L."- le susurré, Harry me miró confundido.- En el tren su maleta tenía las iniciales iguales, Harry.- gire los ojos por tal obviedad.

-Ósea, ¿piensas que el Profesor Lupin fue quien te envío el álbum?

-Si.- dije emocionada, no pude evitarlo.

¿Acaso enserio podría ser él? Todo tenía lógica, más la forma en la que me miraba y trataba.

-Entonces, debes preguntarle.- dijo Harry serio.

-Lo sé, pero lo que me tiene ahora curiosa es lo que bebió del cáliz que le dio Snape.- dije entrecerrando los ojos. Eso me pareció muy extraño y sospechoso.

-Quizás fuera veneno, como Snape quiere su trabajo.- rió Harry, a lo que nuevamente rodee los ojos, pero de una manera graciosa.

Después de unos minutos de silencio mientras comíamos, la conversación de la sala común aún se repetía en mi mente.

-¿Así que estabas, bueno estás, celoso?- pregunté con una sonrisita y Harry rió.

-Ya te dije que si.- rió Harry, pero no despegaba los ojos de su plato.

Suspiré, ya estaba cansada de esto. Llevo desde el primer año sintiendo cosas por Harry, y por lo que me han dicho él también.

-¿Y no tienes algo más que decirme?- pregunté mirándolo inocentemente con una sonrisa, al instante vi como Harry se puso nervioso, a lo que reí.

Me armé de valor y dije:

-Harry, yo sí te tengo que decir algo.- suspiré, ahora sí me miraba a los ojos. Verde contra verde.- Creo que ya debes tener una idea.- reí nerviosa desviando mi mirada.

-No tengo idea, dime.- dijo Harry acercándose más a mi.

-Desde el primer año, llevo sintiendo cosas por ti. Antes pensaba que era una fuerte y simple amistad, pero ya me doy cuenta que es algo más.- dije todo esto mirándolo a los ojos, pude ver cómo sus ojos se iluminaban y como una enorme sonrisa se formaba en sus labios.

-Tu me gustas, Emily y mucho.- por fin oí a él decirlo, a lo cual mi corazón respondió latiendo rápidamente. Tomó mis manos en las suyas y le dio un leve apretón.

Cuando iba a contestarle escuché unos rápidos pasos y voces dirigirse hacia nosotros. Al alzar mi vista allí venían Ron y Hermione con montones de dulces y pequeños pasteles en brazos. Rápidamente solté las manos de Harry y reí forzadamente al verlos llegar.

-¡Hogsmade, no era la gran cosa. Pero la tienda de dulces, eso si es el cielo!- exclamó Ron emocionado y se hizo un espacio en medio de Harry y yo.

Harry y yo no dejábamos de mirarnos, ambos estábamos sonrojados y aún con una enorme sonrisa aunque Ron nos haya interrumpido.

Harry se gustaba de mí. Cada vez que lo pensaba, mi sonrisa era más grande, todo pensamiento de RL se quedó atrás en mi cabeza. Solo escuchaba las palabras de Harry repetirse en mi mente una y otra vez.