100 días con ella

Capitulo 1

CAPITULO 1

La batalla final fue dada, Naraku había muerto junto con todas sus extensiones, la perla no fue destruida quedaría sino bajo el cuidado de Kagome por decisión de todos incluyendo a kikyo que también estaba de acuerdo.
Inuyasha ya había tomado tiempo atrás su decisión, el de quedarse con la miko de barro, a estas alturas a kagome poco le afectaba pues ella decidió que si el hanyou era feliz ella también lo sería aunque no fuera con él.
Pasaría yendo y viniendo de una época a lo otra como siempre lo hizo, no solo porque extrañaría a sus amigos y al orejitas de perro sino porque así lo requerían los cuidados de la perla.
Por otro lado sango y Miroku ya eran una muy feliz pareja, vivirían con el hermano de la exterminadora en la aldea de la anciana kaede.
Shippo pronto realizaría un viaje para entrenar y volverse más fuerte, e Inuyasha y kikyo pues ellos también estaban felices y vivirían con kaede.
Durante este último tiempo la relación que tenían ambas mikos jóvenes era muy buena, digamos que eran algo así como casi amigas, claro kagome aun amaba a inuyasha pero ya no tanto como antes, es mas ella sentía que cada día ese amor se iba convirtiendo en un cariño sincero y de amigo.

No te preocupes Kagome estoy segura de que no tendrás problemas con la perla... es mas en tu época no hay demonios.-comento una muy alegre kikyo, últimamente sonreía mucho.
Es cierto allá estará más segura y podrás visitarnos cuando quieras-apoyo la tierna sango aferrada del brazo del ex monje, OO acto seguido suena una cachetada-PERVERTIDO
-Sanguito solo quería probar como se sentía sin la maldición -se excuso mientras se fricaba la mejilla dañada.
-si claro monje-comento sarcástico inuyasha con las manos dentro de su aori
-sabes muy bien que antes lo hacía por culpa de la maldición-puso la mano en su pecho para sonar más creíble
Como era de esperarse todo el grupo lo miro con cara de no creerle ni una sola de sus palabras.
-¡¿Qué?!-nadie le creía
Bueno muchachos es momento de irme nos vemos muy pronto-se sentó al borde del pozo devora hueso.
Adiós kagome
Adiós nos veremos pronto
Chau-salta la luz rosa la envuelve y aparece en el templo de se casa, sale y se dirige a la entrada- ¡Ya llegue!
Una señora muy simpática la recibe-kagome hija... Que gusto que estés de vuelta.
Hola mama' esta vez me quedare más tiempo ya hemos derrotado a naraku – le conto en plena felicidad la joven azabache, mientras le mostraba la mejor de sus sonrisas.
¡Qué bueno hija!... porque no me das tus cosas subes a tu habitación y te das un baño- le aconsejo mientras recogía la mochila amarilla y el arco.
Si también voy a descansar...-sube las escaleras- por favor recuérdame a la hora de la cena
Si no te preocupes.
Ingresa al baño y pone a llenar la tina, invierte jabones y aceites relajantes en esta, se dirige a su habitación coge su pijama el vuelve con él al baño, que lo encuentra ya listo, se mete y se relaja por más de media hora. Sale se seca el cabello y el cuerpo se viste y con la toalla se envuelta el pelo, se tira en la cama. Apenas toca la almohada y se queda profundamente dormida.
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Mientras tanto en el sengoku el Lord del Oeste recorre el límite de sus tierras, en busca de un intruso que desde hace varios días se le es imposible atraparlo.

Muéstrate de una vez y sal de mis tierras -.- dijo con voz fría, de entre los arboles sale lo que parece ser una anciana-¿quién eres y porque estas aquí? -La escaneo con la mirada, la anciana era humana.

Mi nombre es Hakiyu y estoy aquí en busca de un hogar- respondió temerosa
Sal de mis tierras –le ordeno, con una mueca de asco-no soporto la presencia de humanos
Solo busco un hogar o donde dormir – insistió la mujer, dedicándole una tenue sonrisa.
¡Que te vayas!- rugió amenazante.

De repente la anciana se convierte en una bella mujer "bruja", de rostro muy tierno y mirada angelical, sus vestimentas eran de un tono celeste con bordados en blanco y plata.
Cambia tu actitud Sesshomaru o te castigare – le dijo de repente, como si lo conociera desde hace varios años.

Crees que puedes desafiarme a mí al gran Sesshomaru-amenazo con sus garras con veneno.
Te lo advierto no me provoques-la mujer estaba de lo más tranquila, en cambio el Youkai comenzaba a fastidiarse.

¿Qué me haría un ser tan inferior como tú?- desafío atacándola, la "bruja" lo esquivo fácilmente dando un salto al costado.

Escucha lo que te voy a decir- intento dialogar.

Tu a mi no me das ordenes-ataco esta vez pero con su espada.

Hakiyu mueve sus manos y Sesshomaru queda suspendido en el aire sin poder moverse.
Más vale que me sueltes bruja- dijo intentando romper con su fuerza aquel extraño hechizo.

Que no soy bruja soy un ángel-respondió mientras se acercaba al demonio- y estoy aquí para verte a ti- finalizo señalándolo con el dedo.

¿Qué cosa?- el Youkai, abrió sus dorados ojos en sorpresa.

Así es me han mandado para que puedas remendar los errores de tu pasado en el futuro- le explico la ahora joven dama, pero el aun estaba con cara de no entender nada.

¿Qué?- volvió a preguntar, con la esperanza de que estuviera en algún tipo de sueño.

Que vas a hacer bueno de ahora en adelante – resumió en esa simples palabras, toda la historia
lo escucho reírse descaradamente al demonio sin quitar la mueca de desagrado del rostro- ¡bájame! ¡Y ni sueñes que me volveré bueno antes muerto!
Suspiro- me lo imaginaba-lo deja caer- bien escúchame si no te vuelves bueno, por lo menos ayuda a otros

¿Por qué tendría que hacer eso?- pregunto guardando su espada, mientras la miraba con desprecio.

Porque tu padre así me lo ha encomendado

¿Mi padre?-pregunto incrédulo – HMP no digas tonterías... no lo are

Bueno no tengo otra alternativa sesshomaru iras al futuro- comunico la bella mujer.

¡No quiero y no iré!- respondió este dando la vuelta para irse de ahí.

Te daré lo que necesitas no lo que quieras-cerro los ojos movió sus manos de maneras extrañas-es la voluntad de Inu No Taisho-el youkai frente a ella escuchaba versos sin sentidos y el lenguajes extraños- Y la cumpliré- al abrirlos sesshomaru ya no estaba.

Sentía ruido en todas las direcciones, lentamente abrió los ojos parpadeando un par de beses, pudo notar que era de noche, por la posición de la luna deberían ser alrededor de las nueve de la noche

Escucho voces de un solo salto se incorporo, vio a un grupo de humanos acercándose estos lo miraban de manera peculiarmente extraña acaso pensaban atacarlo, llevo la mano a la empuñadura de la espada.
Pero al tenerlos cerca estos siguieron su camino sin voltear.

¿Dónde demonios estoy? ¿Y la bruja?-miro a todos lados

Que no soy bruja soy ángel-dijo una voz tras el

HMP ¿qué hago aquí?- pregunto mientras la miraba, y luego poso sus ojos en aquel extraño panorama

Ya te dije ser bueno-le dijo sonriendo-y no podrás regresar hasta que ellas cumplido... pero hay ciertas reglas que debes saber.

No necesito oírlas no me quedare- dijo de forma despectiva.

Entonces vivirás aquí el resto de tu vida con la raza que mas odias
-el youkai, no respondió simplemente la miro.

Bien regla numero uno no atacaras a ningún humano, Numero dos no debes intentar dominar el mundo y numero tres no te debes enamorar de un humano-le explicaba sin quitar su sonrisa del rostro de porcelana -cada vez que no cumplas estas reglas se te descontaran tus "buenas obras" es decir todas las cosas buenas que hiciste para ayudar a otros las perderás al instante por lo que tendrás que empezar de nuevo hasta que las cumplas.

¿Qué tipo de buenas obras?-poniendo mas interés en el tema, si iba a ayudar a otro por lo menos tendría que saber que se enfrenta ¿Cuando se termina?

Lo que sea desde cuidar bebes asta curar a los enfermos... Puedes ser superheroe también si quieres.

¿Superheroe?- repitió sin saber que significaba aquella palabra.

No importa solo ayúdalos y tu trabajo terminara cuando sea el momento indicado, pero eso solo tú lo decides... si cumples podrás regresar a tu mundo. ¿Qué dices aceptas?