❝Gaby ha sido el amor más grande de la vida de Karla, y ahora, años después de su ausencia, Karla le escribe cartas para recordarle lo mucho que significó su tiempo con ella❞.
•••••••••
Detrás de cada mirada hay una historia y dentro de cada corazón...
Si bien lo nuestro empezó mucho después de conocerte, tomaré como principio el día en que te vi por primera vez. Fue como descubrir un tesoro; como si la vida fuera un pirata que te había tenido oculta con celos propios del egoísmo, pero un día decidió ser un poco generoso compartiendo ese tesoro conmigo y te puso en mi camino.
Cuando pensaba en el amor que algún día me llegaría, imaginaba que la conocería en un parque, en un baile, en la fila del cine para comprar palomitas o incluso en una de esas coincidencias en la calle que solo pueden dejar en claro el poder del destino, ya sabes, lo que uno ve en las películas de romance adolescente; lejos de eso, me sorprendí cuando te conocí en un salón comunal del vecindario, en unas clases de guitarra que luego de años había decidido tomar.
Te confesaré que no estaba tan animada de ir a las clases por motivos de horario: detestaba madrugar los fines de semana. Sin embargo, le he agradecido siempre a mi madre por llamarme holgazana y obligarme a ir.
Gané dos cosas desde ese día: la capacidad de convertir los movimientos de mis dedos sobre las cuerdas en música y la capacidad de convertir los latidos de mi corazón en pequeños te quiero.
Todo por la música: creo que ese es nuestro sello; queriendo aprender a tocar guitarra, encontré la melodía de mi vida.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
