Con el Pasar de los Años

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A los 15 años en mi cuerpo ya era notorio la transformación inevitable por la que toda chica pasa.

Habían chicos un poco mayores que me hablaban y se les veía a leguas sus dobles intenciones.

Me sentía renovada, iba a empezar otro año de escuela y ya no vería a Adam, pensé que con la partida de Adam por fin todo había acabado.

Entonces una semana antes de comenzar clases una amiga pregunto algo que no me esperaba.

- Aylin ¿todavía quieres a Adam?

No entendía porque preguntaba eso, después lo supe. Adam le había escrito a ella para preguntarle por mí, cabe mencionar que esta chica no era de mis mejores amigas por eso le hablaba a Adam.

Yo aún lo quería y le dije que si.

No faltó mucho para que un día entrando a una de mis redes sociales encontrará un mensaje de él.

Un mensaje que ahora que lo pienso jamás debí contestar pero solía actuar con el corazón y dejaba de lado la razón.