Love me (not) - [Victurio]

Capítulo 14

Victor quedó un tanto preocupado al ver que me había desvanecido aunque en verdad fue más bien como un producto de la impresión al vernos descubiertos por Katsuki. Noté perfectamente lo que había sucedido de nuevo, aunque en esta oportunidad sentía más bien molestia y hartazgo. Ese desvergonzado de Yuratchka seguía haciendo de las suyas y Victor cediendo ante él con total facilidad.

Podía escuchar a Victor llamándome y moviéndome al ver que quedé allí prácticamente inerte después de que nos vimos expuestos en una situación completamente explícita e injustificable.

–Mmm Victor...déjame dormir, por favor -murmuré-

Él se tranquilizó al ver que no me había precisamente desmayado aunque consideró era mejor dejarme dormir en vista lo que se había generado con el retorno de su molesto compañero que sin más, empezó a reclamarle...

–Eres un completo desvergonzado, Victor!!! Ya sospechaba algo de esto pero no esperé que lo fuera a comprobar. Cómo te has atrevido a hacer algo tan bajo? Estás aprovechándote y abusando sexualmente de un paciente!!! Pero en qué demonios estás pensando!? Dónde está tu ética profesional? Este chico es menor de edad y...--

–Baja la voz!!! -lo interrumpió- No ves que se ha quedado dormido? Vamos a hablar a otra parte

–Pero antes vístete, por favor!!! -exigió todo avergonzado al verlo desnudo y volteó a otro lado-

–De acuerdo. Puedes traer una manta para él?

Victor se compuso y comenzó a vestirse mientras que Yuuri subió a la habitación a traer una manta. Cuando volvió, me cubrió y ellos se marcharon a mi habitación para poder platicar sin interrumpir mi sueño.

Sentía un cansancio extremo y quedé ahí rendido en el sofá. Empezaba a recrear en mi mente cosas que habían ocurrido hace no mucho tiempo. No, no estaba soñando...eran cosas que en definitiva ya habían pasado.

Después de que aquellos desgraciados asesinaron a mi abuelo, yo intenté acabar con mi vida...era eso lo que quería después de que me arrebataron cruelmente a la única persona que tenía en el mundo. Ya no tenía razones para continuar viviendo; lastimosamente consiguieron impedir mi objetivo y me salvaron.

Al ver que me encontraba mentalmente inestable y perturbado, una vez que estuve mejor de mis heridas, me transladaron a un hospital psiquiátrico donde permanecí internado por al menos por un par de meses.

No sé cómo sucedió pero el tiempo en el que estuve en ese lugar fue que empecé a desarrollar una conducta antisocial y horriblemente violenta. Sentía tanta rabia en contra del mundo entero que me volvía agresivo y eso desataba una fuerza física incontrolable, había llegado a lastimar a varios médicos y enfermeros.

Me llegaron a mantener sedado por días y encerrado en una habitación especial con camisa de fuerza puesta para evitar que me hiciera daño a mí mismo y por supuesto a los demás. Cuando esos arranques de ira cesaban, seguían estados de profunda tristeza, miedo y desesperación; lloraba y pedía por mi abuelo con insistencia.

Hasta que finalmente caía en la tétrica realidad; un leve estado de consciencia donde me daba cuenta de lo que ocurría en mi entorno e intentaba resignarme. Mi abuelo estaba muerto, nada lo traería de regreso a mí y yo me encontraba muerto en vida.

Mi voluntad de seguir viviendo y todas mis motivaciones quedaron reducidas a nada. En verdad, tenía ganas de poner fin a mi vida pero temía fallar de nuevo, no quería volver al hospital...estaba harto de todo. Simplemente deseaba no ver a nadie, quería que el mundo entero se olvidara de mí y me dejara morir consumido en mi propia miseria.