Hace seis años
Dawson pasó por mi casa luego de la escuela. Fuimos a comer y después al cine, fue una de las mejores que tuvimos, pero algo faltaba... no había chispa, ni magina o pasión, sentía más bien, que salía con un amigo que con mi pareja. Sabía que aquello no estaba bien, pero no podía permitirme sentir cosas por Trevor, no conociendo su reputación, quien es y mucho menos por quién soy yo, la hija de un pastor que necesita una pareja que cumpla algunas expectativas... las de mis padres.
Así que, cuando Dawson me dejó en casa las siete, intenté hacer lo posible para evitar que él no se fuera y me dejara sola con la tentativa de salir o no con Trevor; sin embargo, se excusó diciendo que tenía que llevar a su madre a la casa de reposo debido a que después de su accidente, su andar era dificultoso. Sin más remedio lo tuve que dejar ir y quédame sola, mirando el reloj rogando para que no dieran las diez. Me distraje con diversas cosas: tarea, labores del hogar, hice de todo, pero nada evitaría que él estuviera en mi casa al tocar las diez. Podía mentir y decir que no estaba, pero él lo sabría, de alguna forma él sabía leerme perfectamente.
Las diez con veinte y un mensaje suyo llegó a mi teléfono, estaba afuera de mi casa. Le respondí diciendo que me rehusaba a salir con él y como siempre, amenazó con ir a por mí. Lo ignoré y probablemente ese fue el mayor error de mi vida.
El tamborileo de unos dedos en la puerta de mi habitación me alertó y cuando la abrí, esperaba ver a mi madre; sin embargo, lo vi a él, plantado en el segundo piso de mi casa, al frente de la puerta de mi habitación con una sonrisa en su rostro y yo pálida cual papel. Rápidamente lo tomé de la mano y lo adentré a la habitación.
— ¿Cómo diablos entraste? —pregunté en un susurro, preocupada de que alguien nos viera, fijándome al exterior de mi cuarto. Me volteé a verlo y él estaba sonriendo, acercándose hacia a mí de tal forma que me pegó contra la puerta.
—No deberías de dejar la puerta de la cocina abierta...—susurró en mi cuello, haciendo que su aliento quemara sobre mi piel. Intente alejarlo y el rio por ello, burlándose de mi fuerza en comparación con la suya.—Lindos shorts, por cierto. —volvió a decir en mi cuello. Rápidamente bajé la mirada hacia mis pantaloncillos cortos y sentí mi rostro calentarse. Estaba en pijama, eso involucraba una camiseta grande y ancha con las sigas G.A.P en ella y unos pantaloncillos cortos y viejos.
—Tienes que irte. —respondí— Mis padres podrán escucharte. —le dije con voz amenazadora, intentando lucir seria al respecto. El soltó una risa ronca a la que tuve que callar colocando mi mano sobre su boca, la cual, mordió. Alejé mi mano y lo miré furiosa.
—Tu... madre está en la casa de acogida con la madre de Dawson. —susurró acercándose más, esta vez, colocando su mano en mi cintura— Y tú padre está durmiendo en el sofá. —sonrió él— no tiene sueño ligero, por lo que sé.
Y tenía razón.
Dejé de revolverme porque de alguna forma, ya no quería seguir haciéndolo, después de todo era inútil, no tenía salida y el lugar en el que estaba (acorralada entre su cuerpo y mi puerta) parecía ser el mejor lugar del mundo.
—No se siente bien estar contigo. —confesé.
El deslizó una media sonrisa sobre su rostro.
—Apuesto a que eso es mentira. —desafió.
—No lo es —lo era— Eres el mejor amigo de mi novio, ¿Qué acaso no cuenta eso? —pregunté seria. El me miró seriamente por un segundo, en el que parecía que de verdad estaba pensando sobre ello y para mi sorpresa, me besó. Fue un beso envolvente y cautivador, posó sus manos en mi cintura y me atrajo hacia él lo más que pudo, después de ello, su lengua jugó con la mía y yo gemí sobre el beso. Después, se alejó para dejar un rasgo de besos por mi cuello y clavícula haciendo jadear en su oído, a continuación, me levantó y posicionó mis piernas en su cintura, esta vez contra la pared junto a la puerta, haciendo que sus manos se perdieran por debajo de mi camiseta.
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Cada Parte de Ti #1
RomantikTrevor al cumplir los diecinueve años, se unió a las fuerzas armadas y ahora, con veinticinco años, es dado de baja por una lesión que le pudo causar la vida. Eso significa que tiene que volver a Mill Valley; su pueblo natal, donde creció y se enamo...