HELL ➳ Rap Monster

| Epílogo. |

Narra Danbi

Me levanto del suelo. Un tremendo peso se instala en mis hombros, disminuyendo mi velocidad.

Las lágrimas caen por mis mejillas mientras escucho los pitidos del móvil y la voz de la operadora diciéndome que la llamada ha finalizado.

Entro despacio hacia la habitación de Namjoon y me fijo en una carta colocada justo encima de la tanda de papeles que tengo que entregar a la fiscalía. La cojo y la abro descubriendo una carta de Namjoon.

"Ya te habré llamado para cuando leas esto Danbi.

Ya me habré despedido de ti, aunque no quiera.

Ya no estaré vivo Danbi, y no sabes cuánto lo siento por esto.

Nunca fue mi intención despedirme de ti, sin embargo, eres lo más preciado que tengo y por tanto necesito protegerte a toda costa, y si mi muerte pone fin a tu sufrimiento lo haré mil y una veces.

Debería haberte besado más veces, debería haberte hecho mía más veces, pero el tiempo no espera por nadie y menos por nosotros, así que tendremos que conformarnos con esos recuerdos.

Espero que algún día me puedas perdonar por lo que he hecho, pero dentro de esta carta hay una llave que pertenece a un apartamento que compré hace tiempo, es todo tuyo. Trasládate con tu hermana y vivid tranquilas.

Danbi, te quiero, nunca lo dudes ni un momento.

Espero verte de nuevo algún día, hasta ese momento, adiós preciosa.

Namjoon, tuyo siempre."

Mis dedos tocan con delicadeza la llave que Namjoon me ha dejado pegada a la carta. La aprieto contra mi pecho, sollozando.

- Vuelve conmigo Namjoon - lloro dejándome caer, de nuevo en la cama.

Un año después...

- Buenas noches cariño - le susurro a Dae.

- Buenas noches Danbi - mi hermana se gira en su cama y se acomoda mientras me marcho de su habitación.

Camino hacia el salón y decido ver una película para despejarme antes de irme a dormir. Me acomodo en el sofá y descanso mi cabeza en uno de los cojines. La película comienza y antes de que llegue a su final, caigo rendida.

La cara de Namjoon aparece en cada uno de los sueños que tengo. Sus ojos me miran suplicantes como si necesitara ayuda. Sus labios se mueven sin emitir ningún sonido. Siempre corro hacia él, pero nunca llego a tiempo para tocarlo. Sin embargo, esta vez sus labios susurran algo con su voz ronca que añoro.

- Te había echado tanto de menos - me despierto sobresaltada.

Observo a mi alrededor y me percato de que la ventana está abierta. Miro a la televisión y la película está parada en una escena. Salto del sofá y corro hacia el balcón.

Esa sensación que había olvidado vuelve y noto como mi corazón late fuertemente. Las mariposas reviven y comienzan a volar por mi estómago.

La noche me recibe en mi balcón y me percato en una figura que camina solitaria por las calles, su cuerpo se para y saca su teléfono. Mi móvil vibra en mi bolsillo.

- Danbi - su voz ronca me pone los pelos de punta.

- Estás vivo - susurro asombrada, me llevo la mano a la boca.

La figura de Namjoon se gira en la calle y me mira, conecto la mirada con la suya. Sus ojos me escanean de arriba abajo memorizando mi figura.

- Tengo que irme - murmura sin apartar su mirada de la mía.

- ¿Por qué no pensabas decirme que estabas vivo?

- Porque no vale la pena - su comentario me hace daño.

- ¿Un año es suficiente para olvidar todo? - sonríe y se gira. Mi mirada se pierde en su espalda.

- Danbi, algún día comprenderás el porqué.

Comienza a caminar, observo como se aparta el teléfono de la cara. Va a colgar.

- Te he echado de menos - afirmo rotundamente. Namjoon para de caminar.

- Y yo a ti - susurra -, pero no tengo otra opción.

- Prométeme que volverás - sugiero nerviosa.

- "Nunca fue mi intención despedirme de ti, sin embargo, eres lo más preciado que tengo y por tanto necesito protegerte a toda costa..." - Namjoon recita lo que me escribió en la carta.

Se gira enfrentándose a mi mirada y cuelga el teléfono.

Sus ojos me miran intensamente.

- Te quiero - murmuro mirándole fijamente.

No espero que me conteste, estamos a una distancia importante para que me haya escuchado, sin embargo, lo hace.

- Te quiero - leo en sus labios.

Se gira y camina alejándose de mí, de nuevo.

Mi móvil vibra. Un nuevo mensaje.

"Adiós preciosa."

Y de nuevo, Namjoon desaparece, no obstante, los latidos de mi corazón enloquecen.

- Adiós - susurro al aire.