Entro enseguida dentro de casa. Hace demasiado frío para quedarme allí fuera esperando a que el cuerpo de Namjoon se materialice de entre las sombras. Sé que no volverá, ¿para qué torturarme más?
Me siento en el sofá, no sin antes cerrar el balcón de nuevo. Noto como la adrenalina de comprobar que Rapmon sigue vivo abandona poco a poco mi cuerpo, y la tristeza y la confusión me corrompen.
Cojo el móvil, no muy segura de sí debería llamarlo, pero lo hago de todas formas.
- ¿Danbi? - Tae me responde al quinto tono, su voz adormilada me demuestra que estaba durmiendo.
- Tae - carraspeo bastante incómoda -. Siento haberte despertado, pero necesito contarte algo.
- ¿Estás bien? - me rasco la cabeza. Me gustaría responder que bien, pero después de ver a Namjoon no creo estar bien.
- La verdad es que no - suspiro y me muerdo el labio inferior -. Namjoon está vivo. Tae lo he visto. Lo he visto y se ha ido.
Me levanto del sillón y camino como una bestia enjaulada por el salón del piso. Me muerdo las uñas esperando una respuesta de mi amigo, pero parece que las neuronas todavía no le funcionan muy bien.
- ¿Se despidió de ti no? - me paro en seco y abro los ojos sorprendida.
- ¡¿Sabías que estaba vivo y no me dijiste nada?! - me llevo la mano a la boca al comprobar que he elevado demasiado el tono de voz.
- Rapmon nos lo prohibió Danbi - niego con la cabeza fuertemente -. Yo fui el primero en querer contártelo, pero entiendo su situación.
- ¿Qué situación Tae? - frunzo el ceño completamente perdida - No me estoy enterando de nada.
- Se ha alistado en el ejército - el cuerpo se me paraliza y me olvido de respirar por unos segundos.
- ¿Qué coño hace Namjoon metido en el ejército? - le pregunto perpleja.
- Se entregó a la policía por unos cargos que le habían impuesto hace años - me sobo la frente nerviosa -. Le obligaron a alistarse. Se ve que las habilidades de Rapmon tampoco han pasado desapercibidas por la pasma.
Me siento de nuevo en el sofá.
Namjoon me ha hecho creer que seguía metido en sus líos cuando realmente se va para cumplir con sus castigos. Me ha hecho creer que nos volveremos a ver cuándo esto probablemente no suceda. De nuevo me está mintiendo.
- ¿Cuándo volverá? - pregunto con la voz ronca.
- No lo sé Danbi - niego dolida. No puede estar pasando esto de nuevo.
Me despido de Tae y decido llamar a Namjoon. Espero impaciente a que me conteste, sin embargo, mis llamadas siempre acaban en el buzón de voz. Desesperada le mando un mensaje.
"¿Por qué no pensabas decirme que ibas al ejército?" ~Danbi.
Escasos segundos después me responde.
"Parece que Tae no se está callado." ~Namjoon.
"¿Por qué no me coges el teléfono?" ~Danbi.
"Porque si escucho tu voz de nuevo probablemente no me iría con el ejército. Volvería junto a ti, y te besaría y te haría mía. Pero no puedo hacerlo Danbi, no me lo perdonaría." ~Namjoon.
"Yo si te lo perdonaría. Vuelve y pasa la noche conmigo." ~Danbi.
La mente se me nubla con la sola idea de tenerlo entre mis brazos me da igual si son dos minutos o toda una vida. Lo necesito ahora.
"Danbi no me tientes." ~Namjoon.
"Solo por esta noche." ~Danbi.
Escucho unos golpes en la puerta de casa. Me acerco asustada y me sorprendo al notar unos fuertes brazos que me agarran nada más abrirla.
El cuerpo de Namjoon se precipita sobre el mío con fiereza. Dejo caer el móvil al suelo y me agarro a su cuello mientras comienza a depositar pequeños besos húmedos por toda mi piel. Enredo mis dedos en su pelo completamente rubio y me enredo con mis piernas a su cadera.
- Tardaste mucho en decirme que volviera - susurra entre beso y beso. Me rio.
Aleja sus labios de mi cuello para depositarlos encima de los míos. Noto como mi cuerpo arde ante su tacto. Sus dedos, que recorren ahora mi espalda por debajo de la camisa, me queman la piel. Estoy ardiendo de puro placer.
Su boca se mueve con rapidez sobre la mía y crea un perfecto juego de lenguas que me vuelve loca. Namjoon comienza a caminar hacia la habitación principal. Jugueteo con mis dedos sobre los botones de su camisa, y se la desabrocho en escasos segundos.
Noto como mi cuerpo cae con delicadeza sobre el colchón de mi cama. Paseo mis manos por el pecho desnudo de Namjoon y disfruto de la sensación de sus labios sobre mi cuerpo.
Tiro del brazo de Rapmon y lo sitúo debajo de mí. Comienzo a repartir besos por su pecho. Disfruto escucharlo gemir en silencio. Yo le provoco esa sensación y eso es lo que más me vuelve loca.
Lo miro a los ojos y me deleito con su mirada cargada de pasión, porque eso era lo que éramos nosotros un cóctel de pasión a punto de acabar.
Mi camisa desaparece en segundos al igual que mis pantalones. Mi piel se roza con la de Namjoon y me provoca una sensación de pleno placer.
Nos despedimos de nuestra historia con besos apasionados y caricias demandantes. Él volvía a ser mío y yo volvía a ser suya.
Cuando me despierto a la mañana siguiente, noto repentinamente el vacío de un cuerpo a mi lado. La calidez del cuerpo de Namjoon ha desaparecido de nuevo, y la necesidad de que vuelva a mi lado regresa a mí de nuevo.
No sabía que amar doliera tanto.
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HELL ➳ Rap Monster
FanfictionYo, Kim Namjoon, te doy la bienvenida al Infierno. Prohibida su copia.