Difícil Compañera

Fraternizando

Travis trataba de sacarme de debajo de las sábanas pero sin existo, entonces como pudo se metió también bajo de estas, me sorprendí cuando vi su rostro y sentí su mano en mi abdomen, mi respiración se atasco en mi garganta, su mano se posó completamente se movía de un lado a otro, me costaba más y más respirar y mi cuerpo sentía mucho calor, destape mi rostro y solté el aire retenido para tomar otra bocanada, Travis me miraba interesante intimidandome.

- Quiero besarte.

Solo podía mirarlo, no podía pronunciar palabra alguna, sus labios me apresaron sin darme cuenta en una guerra de poder, sus manos se movían de arriba a bajo por mi abdomen, no me resistía ni me movía hasta que un chillido de asombro salio de mi boca al sentir su mano en mi sexo, sus labios que estaban en mi boca bajaron a mi cuello donde se encontraba su marca, la beso y rozo mi piel con sus dientes, un gemido salio de mi boca, era como si ese toque tuviera un control absoluto de mi, como si mi cuerpo no fuera mio, como si el lo reconociera y respondiera únicamente a Travis. Su mano se movía sobre mí intimidad de manera lenta y tortuosa mientras mordía nuestra marca, mordi mi labio inferior tratando de contenerme, cada vez me era más complicado contener mi exitacion.

- Travis...- jadeo cuando ya no puedo más.- no puedo más.

El sale de mí cuello y me mira sus ojos ya no son de un azul definido, sino de un matis entre negro y azul, ya no sólo es el.
Toma mis manos llevándolas sobre mí cabeza dejándolas ahí mientras se sentaba entre mis piernas y pasaba sus manos por mí cuerpo, empiezo a subir mi remera hasta llegar a mis manos donde con unas vueltas terminó aprisionando mis manos y tensando mis brazos a la vez que la ataba al respaldo, no podía moverlos, sus manos subían y bajaban, su boca se posó en mi pecho y antes de siguiera notarlo me mordió fuerte, asiendo que me retorciera, chupo con fuerza y volvió a morder.

- Travis- hable, me dolía.
- Shhh- dijo y mordió mi peson.

Mordía, besaba, mordía y volvía a besar, era brusco, me dolían los pechos lo que hacía que cada vez que me tocaba con sus manos arqueara mi espalda tratando de así llenarla en su totalidad y no sólo sea un rose con su palma.
Su boca empezó a desender lentamente por mi estómago hasta llegar al borde de mi ropa interior, me removi algo incómoda, sentí como empezó a bajar mi ropa interior, alze la mirada y lo vi posicionado ente mis piernas, sus ojos se encontraron con los míos y fue cuando sentí su boca en mí sexo, me removi cerrando los ojos y tirando mi cabeza hacia atrás.

- Mírame- soltó con voz ronca.

Levanto la vista hasta verlo y empieza a lamer mi intimidad. Jadeo y cierro los ojos y gruñe.

- Mírame- dice más fuerte.

Lo miro al igual que el mientras me lame y solo puedo jadear y tratar de no cerrar los ojos, los suyos no se apartan de los míos, mientras sigue en su tortura, echo mi cabeza hacia atrás no puedo más, él se aparta de mí y siento como sube por mi cuerpo dejando besos.

- Eres exquisita- dice y besa mis labios.

Pasa sus manos por mis muslos levantadolo y metiéndose entre mis piernas, siento como se acelera mi corazón, se posiciona y lentamente me penetra, automáticamente dejo de respirar, después de esto no hay vuelta a tras, empieza a moverse mientras me observa atento, sus ojos brillaban intensamente.

Después de una hora me encuentro recostada en mi cama, ambos estamos en silencio, nada sale de mí boca, me encuentro asustada, mi corazón sigue a mil por hora, por más que intente tranquilizarme no puedo, Travis no ha dicho ni una palabra solo se ha limitado a abrazarme, lo que me pone aun más ansiosa.

- Tranquila nena- susurra de golpe- ahora todo irá bien.
- No puedo hacer esto- empiezo a alterarme- No puedo Travis.

Trato de salir de la cama pero me agarra tirándome nuevamente a esta.