INFECCIÓN // Ross Lynch (ACTUALIZADA)

Capítulo 7

Un cartel de bienvenida a mitad de la autopista nos hizo darnos cuenta que estábamos llegando por fin a Dakota del Norte. La noche ya había caído, y eran casi las dos de la madrugada. 

Riker había cambiado turno con Evan para manejar pues horas atrás había admitido sentirse cansado.

La carretera se encontraba completamente vacía, y después de horas y horas buscando algún otro automóvil en el camino, podía confirmar que éramos los únicos transitando aquel camino a esa hora. 

Ross miraba con atención por la ventana.

—Cielos, tengo hambre —dijo Natalie.

Rydel repartió comida y frituras entre todos al interior de aquella camioneta. Finalmente comimos y devoramos algunos bocadillos  en silencio, aunque sin muchas ganas, y la camioneta siguió su curso.

Llegamos al centro de la ciudad, notando que estaba casi vacío también.

—¿Qué no dijiste que este estado estaba libre de riesgo?—preguntó Brooke, mirándome.

—Si, eso dijeron en la radio —miramos a través de las ventanas.

Había un centro comercial y varios automóviles estacionados a su alrededor, sin embargo, la avenida principal se encontraba bastante sola.

—Será mejor que paremos a conseguir más comida y ver si podemos dormir por aquí —dijo Riker.

Asentimos y Evan estacionó la camioneta justo afuera de la entrada del centro comercial. Después bajamos en silencio, cada quien cargando distintas armas. Ross me entregó una pistola cargada.

Lo miré, confundida.

—Necesitas defenderte. Es solo por precaución.

Asentí, mirando esos mieles en su rostro y suspiré.

—No sé como disparar.

—No es difícil. Cuando sea el momento, sabrás hacerlo, cree en mí.

Me guiñó el ojo, y después me tomó de la mano mientras entrábamos al lugar.

—Hay poca luz —dijo Riker, caminando al frente junto con Ratliff.

Brooke junto con Joanna, Rydel y Natalie caminaban detrás de ellos, siguiendo la fila al medio y dejándonos atrás al resto. Tenía que admitir que la idea de caminar hasta atrás me aterraba. 

Pero debía demostrarle a Ross que podía sentirme segura con él, y de esta forma, él también se sentiría seguro y confiado.

Las luces del centro comercial parpadeaban, impidiéndonos ver con claridad lo que se encontraba frente a nuestros ojos. Algunos de los negocios se encontraban cerrados mientras que otros se encontraban simplemente con las puertas o entradas destrozadas y completamente saqueados. 

Al fondo de la primer planta hallamos una enorme entrada hacia un supermercado igual de grande. Decidimos entrar y conseguir comida.

Nos separamos yendo la mayoría en parejas a excepción de Natalie, Rydel, Brooke y yo. Joanna permaneció con Riker, mientras que Ross y Hunter emprendían la búsqueda juntos, y Ratliff y Evan iban por su lado.

—Siento que vamos a morir —soltó Brooke, de repente, completamente nerviosa.

Aquella chica me dio la mano, y de inmediato noté un inusual temblor recorriéndola. La miré, y le pedí en voz baja que se tranquilizara.

—Cállate por favor —dijo Natalie, aturdida. Esta caminaba hasta atrás, apuntando con el increíble arma de caza que Ross le había dado.

—¿Mínimo sabes disparar? —le dije, mirando la escopeta.