Nami corrió detrás de él hasta alcanzarlo, ya estaba entrando a las oficinas de los jefes sin esperarla.
- Luffy!, no vayas tan rápido- se queja-
- te dije que yo me encargaría de todo.
- y yo te dije que fue mi responsabilidad, no tuya.
- soy tu capitán, lo que hagas me compete y... esa carta la mande yo.
- pero fue mi responsabilidad no deshacerme de ella.
- pero yo no debí distraerte de una misión tan importante por una tontería.Por más que lo intento no pudo evitar que una expresión de dolor llegará con rapidez a su rostro, tanto que comenzaba a dolerle, sobretodo por esa última palabra, él consideraba su relación como una tontería, algo sin importancia.
- solo vámonos ya- se rinde y camina por delante, no tenía ganas de continuar con todo eso-
Llegaron a la oficina principal antes de lo habrían deseado, pero ya estaban ahí y no había de otra.
- Nami- dice emocionado Aoi, un miembro del grupo-
- hola Aoi- le sonríe de medio lado-
- ¿ya termino tu misión?, debiste avisarme para que te organice una fiesta de bienvenida.
- que amable de tu parte, pero ahora mismo tengo problemas.
- ¿qué pasó?, ¿quieres que vaya contigo?- se levanta-Aoi era algo así como el asistente de Hanyou, el único de los lideres que estaba presente en ese momento, y pues, intentaba ser muy cercano a Nami.
- no,- lo interrumpe Luffy de forma grosera- yo estoy yendo con ella y tú no tienes nada que ver.
- Luffy!, no seas tan grosero- lo regaña ella-
- entremos ya- se va primero-
- lo siento Aoi, te contaré todo cuando salga.
- si algo sale mal me avisas, lo hablaré con los jefes, Hanyou siempre me escucha- le sonríe de medio lado-
- gracias- le sonríe de nuevo y entra-La sala era medianamente grande con muy poca iluminación, aunque se sentía cómoda y confortable siempre que no estuvieras en problemas. Por supuesto ese no era el caso de ellos.
- Nami- le sonríe Hanyou- no esperaba verte tan pronto.
Hanyou era un hombre apuesto de unos 35 aproximadamente, tenía una sonrisa amable y un cabello castaño permanentemente alborotado. Era el más bueno de los líderes.
Escucho a Nami con calma, sin comentar nada, aunque su característica sonrisa ya había desaparecido hace mucho.Finalmente terminó pero cuando se disponía a hablar,Luffy lo interrumpió:
- fue mi culpa, yo le mande la carta- se explica-
- Luffy- lo nombra ella, molesta-Entonces Hanyou se sobo la cara con pesadez, siempre le tocaba tomar decisiones en los peores momentos.
- Luffy déjala hacerse responsable, no olvides que ya tienes varias cuentas pendientes con dragón y kleim.
Kleim era el segundo líder más importante después de Dragón y era el que menos aprecio guardaba por Luffy, siempre buscaba excusas para regañarlo y este no paraba de darle cada vez más motivos para hacerlo.
- entonces dices que te descubrió ese marine- mira hacia el suelo antes de suspirar-
- si, recientemente lo pusieron a mi cargo. Es algo así como el hijo de un Almirante, por eso tuvimos que irnos enseguida.
- es alguien importante- se sorprende- ¿de cuál Almirante estamos hablando?
- Marou Madarame, si no me equivoco.
- si que es importante- ahora sí parecía muy sorprendido- debieron traerlo, no estarías en problemas y tu misión sería indicada como exitosa, sería más de lo que debías.Los miró fijamente, como si supiera que lo estaban ocultando en su barco, pero ellos jamás se lo dejarían. El ejército revolucionario estaba lleno de buenas personas con buenas intenciones pero no podían estar seguros de cómo tratarían al rubio. No podían arriesgarse.
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Algo diferente /ZoSan/
Hayran KurguUna parte de los Mugiwaras se infiltrara en la marina como favor a los revolucionarios. Zoro, uno de los infiltrados, se interesara en Sanji, un marine novato con un gran odio hacia todos los piratas por un evento traumático ocurrido en su infancia...