Un día cuenta con 24 horas, para la mayoría es un día más, un día menos.
No interesa.
Sin apreciar el hecho de vivir al amanecer es importante. Ya que no se si yo viva al despertar ni se si dure el día completo.
Y de hecho, nadie lo sabe.
Y hoy, hoy es el séptimo día de mis dos semanas.
Por eso cuando sonó el despertador me dieron ganas de llorar.
Me queda menos tiempo.
Me senté sobre la cama y tome mi cuaderno. Mire la lista. Queban muchas cosas por hacer...
Fui a la ducha. Relaje mis músculos agotados y agobiados, me dolía la cabeza.
Toma mis medicinas y me asomé a la habitación de Hope que estaba despierta mirando sus peluches.
-Hola, muñequita. - dije acercandome para cargarla.
Sali de la habitación, fuimos a la cocina y la senté en su silla. Prepare el desayuno se ella y el mío, mientras comíamos apareció Gus, le di comida para perro en su razón y seguí mi comida.
-Te daría helado pero Eres muy pequeña. - le dije a Hope una vez que me serví.
Cuando ella término su comida la lleve a su cuarto y la dejé en el corral, volvi a mi habitación.
Se me estaba terminando un medicamento.
Me asomé y mire que Freya estaba en casa, entonces todo estaría bien, Sali de la mansión procurando que no me notarán, camine unas cuadras a la farmacia, comprando el resto de mis medicinas, las metí en mi bolso, Sali de la tienda.
-Hola. - gire mi cabeza para encontrarme con unos preciosos ojos y una sonrisa linda, un tanto perturbadora.
-Hola. - dije poniendo una sonrisa, ella se limitó a examinarme con mirada. - ¿Puedo ayudarte en algo?. - pregunte.
-Eres muy bonita. - dijo cruzándose de brazos. - Eres incluso más bonita de Camille. Irradias más alegría, ¿Te lo han dicho alguna vez, preciosa?
-Ammm si pero tengo que irme a comprar... unas... papas...
La peor excusa de la vida.
Ella se rió de mi.
-Dios mio, eres un encanto, más que la odiosa de Camille. - se acercó a mí y me miro a los ojos. - Vendrás conmigo.
¡Me quería hipnotizar!
Sólo Asentí y me deje guiar por su cabellera pelirroja.
Entramos a la iglesia y mire a la mujer rubia de pie claramente asustada
-¿La conoces? - pregunto la pelirroja. - Es la psicóloga de Klaus.
-Ohh. - dije sin entender.
-Que curioso. - dijo caminando alrededor de ambas. - las tres amadas de Klaus en el mismo espacio, Wow, a Klaus Le encantaría ver esto.
Yo no entendía nada, ¿Quienes eran estas mujeres?
-Te llamas Holly¿No es asi? - dijo la pelirroja y Asentí. - Bien, debo admitir una cosa y es que eres hermosa pero ¿Que ve Klaus en ti? Cuentame.
-Ammm ¿Me dices tu nombre? Estas siendo descortés.
No tengo mucho que perder, igual moriré la próxima semana.
-Aurora de Martel... ahora, hablame de ti.
-Pues Amm me gusta leer, tengo un perro, me mudé hace unos años a New Orleans y conozco a Klaus desde hace una semana.
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Quiereme Cinco Minutos [Klaus Mikaelson]
Fanfiction"Muriendo al dormir. Esperando vivir al amanecer"