Capítulo 8

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Lali

Ya era Lunes y volvía a la rutina de todos los días, desperté temprano para que Santi desayune y más tarde Amy le preparo el almuerzo para ir al colegio.

Como siempre Arturo lo llevó a la escuela y yo me quede ayudando a Amy lavando los platos ya que no tenía nada para hacer. Aproveché a acomodar mis cosas en la habitación en la que alojaba porque era un desorden.

Estaba en el sillón y me quedé dormida sin darme cuenta, sentí que alguien me tocaba y era Peter.

-Si queres anda a dormir -sonrió despertandome-

-¡Ay! Perdón- dije levantándome-  no se ni en qué momento me quedé dormida

- No hay problema -rió- falta todavía para que Santi salga del colegio, podes ir a dormir tranquila

-Gracias -sonreí yendo para las escaleras- por cierto... vos no salías tarde hoy?

-Cambio de planes -sonrió-

Sonreí y subí las escaleras hasta mi habitación, estaba algo cansada ya que no había podido dormir la noche anterior. Me sonó la alarma en la que tenía que buscar a Santi para no olvidarme, me cambié y arrele un poco y baje.

Estaba Arturo esperandome y cuando subí al auto estaba Peter.

-No sabía que estabas -sonreí-  yo... Perdón, tal vez querías ir a buscarlo vos a Santi

- Le va a gustar que vayamos los dos -sonrió- así que no hay problema

Peter y yo bajamos a esperar en la puerta del colegio, y claramente la mirada de todas las madres estaba clavada hacía mí y más ahora que estaba junto a él, varias madres se le acercaban a hablarle y era algo incómodo para mí ya que quedaba colgada porque no conocía a NADIE.

Se abrieron las puertas y la cara de Santi fue imposible de explicar, estaba felíz y asombrado de que Peter estuviera junto a mí.

-PAPÁ! MAMÁ!  -gritó y corrió a abrazarnos, aún se sentía raro que me dijera mamá-

- Te gustó la sorpresa? -sonrió Peter y lo cargo-

-Siii! -decía con una sonrisa de oreja a oreja- la vi a Lali y después te ví a vos y no lo podía creer

-Tal vez tengamos más días así  -sonrió Peter-

-Qué hiciste en el colegio? -sonreí- Contanos!

- Ahhh, ya me olvidaba- sonrió y buscaba algo en su mochila- hoy tuve que hacer un dibujo de mi familia y acá estás vos

- Ay, mi amor! -sonreí algo emocionada- qué lindo dibujo

- Y acá estan Amy, Arturo y la tía Eugenia -reía mientras los veía-  mi familia

Miré a Peter y él me miró a mí, definitivamente los dos nos moríamos de ternura por este nene, no podía ser taaan dulce.

Llegamos a la casa y Santi se fue a bañar con Amy mientras Arturo arreglaba cosas del auto.

- Creo que nunca en mi vida conocí a un chico más dulce que Santi -sonreí-  hiciste un buen trabajo

- Fue lo mejor que hice -rió-  siempre es así, es único

- No entiendo como la madre hizo... -dije sin pensarlo- perdón... a veces se me escapan decir esas cosas cuando no debo

- Está bien... -sonrió algo incómodo- a todos les pasa, aunque mi hermana Eugenia la bardea de arriba a abajo así que ya no es nada raro

- Yo lo haría  -rió-  pero algo de respeto tengo

-¡HOLA FAMILIAAA! -se escuchó un grito-

-Hablando de Roma... -rió Peter- mi hermana Eugenia

-Hablaban de mi? -rió-  supongo que cosas buenas, no?

-Claro que sí -sonreí y la saludé-

-Hablábamos de tu mejor amiga -rió Peter- Candela...

-Agh, vine con buena onda no la desperdicies  -dijo sentandose- mi sobri?

-Bañandose con Amy -dije- y vos querida que haces con las llaves de mi casa?

- Sos mi hermano, no un extraño- respondió-  cuando no estas yo vengo a visitar a mi sobrino

-TIAAA! -se escuchó y era Santi bajando las escaleras con el pelito mojado-

-Mi amor! -dijo y lo abrazó-  mmmm te bañaste bien vos?

-Como siempre! -sonrió- mirá tía, te dibujé en el colegio

- Ay mi amor, tan fea soy? -rió con su humor característico-  mentira, esta hermoso, me gusta el vestido que elegiste

- Tenes muchos, no sabía cuál elegir -sonrió-

- Hiciste la tarea con Amy? -preguntó Peter-

-Deja de artormentarlo al chico, por favor! -dijo Euge-

-Yo lo ayudo -sonreí-  es mi deber

-Me ayudan todos? -sonrió Santi-

Fue a buscar su mochila y bajó más felíz que nunca, amaba estar en esta casa, sin dudas era uno de los mejores trabajos que podría haber elegido y en el único en el que me sentía cómoda.

La niñeraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora