Capítulo 9

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Lali

Una vez que terminamos de ayudar a Santi con la tarea, estaba jugando a la pelota con Peter en el patio mientras Euge y yo los veíamos desde la mesa.

- Gracias, en serio -sonrió Euge-

-Por qué? -reí-

-Por quedarte -sonrió- Peter nunca quiso que San tuviera una niñera ya que no quería que la pasara mal con alguna señora grande, pero vos viniste y cambiaste todo, tenes una energía tremenda y Santi te adora que es lo más importante

- Me dejaste sin palabras -reí algo emocionada- sinceramente ni yo creía que aguantaría todo este tiempo, pero Santi es un nene lleno de luz, muy pocos lo son, es dulce y tierno

-Me hace acordar cuando Peter era chiquito -sonreía algo emocionada- tiene los mismos gestos y la misma personalidad, caballero, dulce y tierno... tal como lo describís -sonrió- lástima que Peter tuvo que pasar todo esto solo, me refiero a sin una mujer al lado, nosotros lo acompañamos pero claramente no es lo mismo

-Me imagino lo que debe haber sido -suspiré-  me contó más o menos lo que tuvo que pasar con Candela... no puedo creer que una mujer, si es que se le puede llamar así, sea capaz de eso

-Yo tampoco lo creía- suspiró- pero las personas no paran de sorprenderme... vos me sorprendiste para bien  -rió-  así que espero que siga así

-Vienen a jugar? -gritó Santi con la pelota en su mano- o tienen miedo de perder?

Euge y yo nos miramos y reímos,fuimos a jugar y éramos un total desastre las dos pero era hacerlo con tal de verlo felíz a Santi, fue una hermosa tarde y a la vez se sentía raro estar casi todos los días rodeada de personas que hacía poco conocía, pero era increíble.

-Hoy jugamos al fútbol con la tía Euge y Lali -sonreía Santi mientras cenabamos- Lali jugaba bien y la tía Euge...

-Si te escucha decir eso te mata -rió Peter-

-Tarde, ya escuché-dijo Euge entrando a la cocina- así que tu tía juega mal?

-Pero te puedo enseñar -rió Santi- un par de clases y ya estás lista

-Mirá vos que chanta- rió Euge- okey, acepto solo porque te quiero demasiado como para negartelo

Cenamos todos juntos; Amy, Arturo, Euge, Peter, Santi y yo, luego se fue Euge y acosté a Santi como todas las noches.

Peter

Definitivamente no había sido para nada desagradable conseguirle una niñera a Santino, o al menos no era desagradable el hecho de que era una chica de mi edad.

Al día siguiente tuve que despertarme temprano para asistir a la oficina para adelantar trabajo donde me esperaba Gastón, mi amigo de toda la vida que también es colega de trabajo.

-Buen día  -sonrió-  como va todo?

-Todo bien -sonreí y lo saludé-  y vos?

-Bien también  -sonrió y se sentó-  al final pudiste conseguir niñera para San?

-Sí, hace bastante- le contaba- con tanto trabajo se me pasó decírtelo, perdón si estuviste buscando a varias mujeres

-Eran puras abuelas, tranquilo  -rió- supuse que no te agradaría así que eso mismo venía a decirte

-Conseguí una que es de mi misma edad  -dije contándole algo resumidamente- es muy divertida y graciosa, está todo el día actiava, en casa todos la adoran

-'Todos la adoran' -rió-  eso te incluye a vos?

-No empieces -rodee los ojos- claramente le tengo algo de cariño por todo lo que hace por Santi

- Si eso es lo que vos decís... -rió-  bueno... vamos al trabajo porque se ve que no te gusta el tema niñera

-Voy a tener que aguantar tu sarcasmo toda la mañana? -reí- mejor trabajemos

Estuve toda la tarde en la empresa y llegue a casa como a las 8 de la noche, agregaba horas extras para poder disfrutar del fin de semana junto a Santi.

Llegué a casa y ya estaba bañado al igual que Lali, y claramente estaba jugando y riendo con ella.

-Papa!! -me abrazó como siempre- ya terminé la tarea y estamos jugando

-Está bien -sonreí-

-Holaa -saludó con su alegría de siempre Lali- perdón... estoy usando una camisa tuya porque Santi me manchó... y fue la que me dio Amy para que no se repita lo de la otra vez

-No hay problema, te queda bien -sonreí-  no soy un monstruo

-Lo sé- rió-  pero ahora ya veo que veías que te faltaba alguna camisa y no queria causar un lio -rió nuevamente-

-Hooola! Estoy acá  -rió Santi- vamos a jugar o qué?

-Vamos a jugar -sonrió Lali-

Yo subi a darme una ducha y luego bajé a cenar junto a Santi y a Lali, ya que les había dado un descando a Amanda y a Arturo.

-No me llevó bien con la cocina -rió- pero espero que algo haya salido

-A veer -dijo Santi probando- está bastante bien

-Y usted Lanzani mayor que dice? -rió-

-No será como la comida de Amy, pero... -reí- mentira, está rico, me sorprendiste

-Soy una caja de sorpresas -rió-

-Primer comida en familia -sonrió Santi y Lali y yo nos miramos-

Comimos los tres juntos y ayudé a Lali a acomodar todas las cosas mientras Santi acomodaba su mochila para al día siguiente ir al colegio.

Después de eso lo fuimos a acostar y se durmió bastante rápido lo que fue un trabajo menos.

-Buenas noches -sonreí mientras se iba-

-Buenas noches -sonrió y al darse vuelta resbalo con una remera que dejo tirada Santi y quedaron nuestras bocas  a centímetros-

La niñeraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora