Catalina
Después de todo decidí levantarme, miré hacia la ventana y una chica venía hacia el edificio. Pude reconocer que era Renata. Antes de que llegara a recepción, llamé a Rick, el portero.
*¿Rick? **¡Cooper! ¿Qué cuentas de nuevo?*
*Digamos que mi mejor amiga se esta acercando al edificio a visitarme...*
*... La veo, ¿y qué hay con ella?*
*Necesito que le digas que yo no estoy. Y solo eso ¿puede ser? *
*Perfecto * Y cortó. Me pasé demaciados minutos dando vueltas como una loca esperando a que todo funcione.
No era ella, era el momento, sabia que apenas pisara este departamento iba a comenzar con preguntas las cuales no creo soportar. Y no quiero enojarme con ella y dejar de hablarle durante un tiempo ni nada. Solo intento evitar todo eso. Y si no funcionaba eso iria a empeorar todo. ¡Y eso me ponía tan nerviosa!. Hasta que recibo el llamado de Rick avisandome que ya se había ido después de una pregunta, ¿ven? es asi, cuando Renata no me ve, comienzan a juntarse preguntas en su interior y a cualquiera que se le cruce se las hará.
Mis nervios, pasaron, pero comenzó a darme un frío-calor tremendo, mi cabeza iría a explotar y mis náuseas no me dejaban ni pararme. Y me tiré a la cama. Cerré los ojos intentando olvidarme del malestar. Pero sin embargo no solo me olvidé si no que tambien comenzó a darme muchas ganas de comer chocolate blanco. Solo eso, ni más, ni menos. A pesar de que el dolor de cabeza y el Frío-calor seguía.
Me paré a buscar, aunque sea, un solo pedacito de chocolate. Pero no había nada, me senté un segundo abatida y me consulté lo que me podría pasar. Y entonces me vino a la cabeza lo que podría ser, y me lo negué, no era así, no tendría que ser asi. Me daba miedo. Yo no debia estar sola en este momento. No quería vivir la vida de mamá, no quería ser como ella. Yo soy yo, espero que algo cambie. De la nada: Piel de gallina, y el timbre. Esta vez ni me fijé, abrí la puerta y estaba él, apenas lo vi me olvide de todo y casi nada estaba de echarlo, aunque entró sin más y me dijo seguro:-Debemos hablar
-¡Que bueno que vienes!, no sabes de lo que debes enterarte.
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He's End.
Teen FictionMuchas veces el comienzo de algo es el fin de otra cosa mucho mas importante de lo que pensabas. Y es entendible, no quieres dañar a esa persona pero en cuanto menos lo pensaste mataste ese inofensivo ser. Las confusiónes tambien dañan, las confusi...