La comida transcurrió con normalidad, me dio su teléfono y dijo que lo llamara si necesitaba algo o simplemente quería volver a verlo alguna vez, dijo que era mucho mejor que lo llamara personalmente a que pidiera una cita con él por medio del sitio.
Resultó ser un mejor chico de lo que creí, me contó que tiene una hermana de quince años llamada Holly que en realidad no habla mucho y su madre Emma. No quise preguntarle por su padre, si no lo comentó, fue por algo y lo menos que quería hacer era incomodarlo. Yo por mi parte le hablé un poco acerca de mi loca familia; Mi padre Elliot que se dedica a escribir y trabaja en una editorial, mi madre Sarah y mi insufrible hermana menor llamada Mía.
También le conté un poco de mis mejores amigas África y Cece, quienes por cierto debían estar en mi apartamento esperando a que les contara cómo me fue. Si es que no se habían aburrido esperando a que llegara, lo cual es poco probable.
En cuanto abro la puerta las encuentro sentadas en el sofá frente a la televisión con un bote de helado entre ellas y lágrimas en los ojos.
África es la primera en posar su mirada en mí. Se limpia las mejillas con la manga de su suéter y se levanta del sofá como un resorte.
No si, el chisme.
—¿Qué pasó?— Cece, al oír la pregunta de Fri, aparta su mirada de la televisión y posa su atención en mi dirección al tiempo que se pone de pie al lado de mi otra amiga.
—¿Acaso estaban llorando?— inclino la cabeza con una sonrisa curiosa y burlona.
Por cómo es Cece estoy segura de que lo negará, es demasiado orgullosa como para admitir que algo la enternece. De África no me extraña pero Cece jamás llora con las películas, menos con las que son de romance y, por lo que vi estaban entretenidas con Cartas a Julieta.
Buena película, por cierto.
—Por supuesto que no— niega, con el ceño fruncido la pelirroja.
Sí, justo como pensé.
Fri rueda los ojos al cielo y me toma del brazo en dirección al sofá para darme un pequeño empujón y sentarme.
—¿Qué pasó con Rowling?
—¿Es tan sexy como parece?
—¿Y por qué estás descalza?
Cuestionan ambas a la vez.
Resoplo y se dejan caer en el sofá a mi lado.—Es un buen chico y sí, es más atractivo en persona.
Fri niega con la cabeza insatisfecha con mi respuesta— ¿Es todo?
ESTÁS LEYENDO
Definitivamente, tal vez ©
Teen FictionGolden Date es un sitio donde puedes comprar citas con el chico que quieras, las veces que quieras. Bianca Woodforth está cansada de escuchar las bromas de sus amigas acerca de que terminará sola con mil gatos si no se atreve a hablar con un chico...