No habia podido registrar la velocidad del tiempo, cuando menos lo imagine, el día del egreso ya había llegado. Mi familia estaba en la escuela junto a Walkyria, Mauricio y Nicolás. Yo aún estaba en la compañía formado junto a todo el cuerpo de cadetes de cuarto año, el Teniente Martínez quería decirnos unas palabras antes de la ceremonia final.
-Llego el día cadetes.- dijo con una sonrisa.- están a minutos de ser oficiales, mis colegas. A muchos de los que están aquí los recuerdos desde el primer día que entraron aquí, con cara de asustados, más de uno quería llorar.Todos reímos en coro mientras el nos observaba con la misma sonrisa en su rostro, orgulloso a la hora de dirigirse a nosotros.
-Hoy comienza una nueva etapa en sus vidas, a partir de hoy deben pensar como oficiales, ya se les asignará el destino antes de que regresen a sus casas en la licencia de verano. Disfruten, descansen y en febrero comiencen con todas las fuerzas en sus respectivos destinos, no importa a que provincia vayan, algunos irán juntos porque coincidirán; otros tal vez estarán solos, pero sea como sea siempre tengan Fe en Dios, el los acompañará a donde sea que vayan.
Todos aplaudimos en honor a nuestro oficial instructor, nos saludo a unos por uno y nos dirigimos a la sala de actos para comenzar la ceremonia de egreso. Mientras me dirigía al lugar, el Teniente Martínez se acercó para hablar conmigo.
-Estoy muy orgulloso de usted Morandini, jamás dudé de su fortaleza, sabía que llegaría hasta el final.
-Muchas gracias, mi Teniente.- respondí mientras continuaba marchando.
-Este es mi ultimo año en las escuela de aviación militar, me transfirieron a otra provincia; y tal vez sea su superior nuevamente- dijo entre risas.
-¿De verdad?.- conteste sorprendido.- Eso sería genial mi Teniente, aún no se a donde me enviarán, o si me dejarán elegir.
-Usted logró el mejor promedio, tendrá el honor de poder escoger.- me dijo.
-Eso seria fabuloso.
-Lo es.- respondió.- Supe que usted quiere que lo envíen lo mas cerca a su provincia.
-Quiero ir a la base aérea de Salta.- insistí.
-Que casualidad camarada.- dijo con una mirada de complicidad.- Entonces nos vemos allí el próximo año.
Quede perplejo, mientras el Teniente se alejaba lentamente con una sonrisa, seguramente trabajar a su lado sería muy bueno para mi, para poder aprender con un gran oficial.
La ceremonia comenzó, mi familia estaba observando con emoción, Walkyria era un ángel en la sala que iluminaba el momento con su sonrisa, y mis amigos de la vida siempre a mi lado. Durante todo el acto pude sentir la presencia de Soria, incluso hasta pude sentir que estaba sonriendo al ver el juramento final. Pensé en su familia, que podrían haber estado presentes presenciando el egreso de su hijo; pero rápidamente quite esa angustia y recordé sólo lo bueno, como por ejemplo el hecho de sentirlo, seguramente estaba orgulloso; como lo estaba yo de el.
Después de la ceremonia hubo una cena para los cadetes y sus familias, baile toda la noche junto a Walkyria, no podría haber sido mejor, estaban las personas que amo en el lugar que amo, compartiendo mi felicidad. La fiesta fue larga, cuando termino todos se fueron a la terminal, tenían que regresar para continuar con los preparativos de la boda, era entendible.
Todos tenían boletos a las ocho de la mañana; yo debía quedarme unos días más para arreglar unos últimos detalles en la escuela.-Nos vemos pronto Walkyria.- le dije abrazándola.- En sólo unos días estaré contigo.
-Quisiera que vengas conmigo.- respondió.- Pero te esperaré en el pueblo, cuídate mucho mi amor.
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MIRADAS EN LA LUNA
RomanceUn día ella preguntó: -¿Hay alguna manera de describir el amor?. Sólo le sonreí, y con eso, ya estaba respondiendo.