MIRADAS EN LA LUNA

CAPÍTULO VI

A las seis de la mañana todos estábamos despiertos, primero desayunamos juntos, y al terminar, rápidamente guardamos todo, y comenzamos a caminar lentamente, deteniéndonos en diferentes paisajes para tomar fotografías.

-Ven, Tobías.- dijo Walkyria.- aquí será nuestra primera foto a juntos.

El paisaje era fabuloso, romántico, y casi místico al verlo, los cerros verdes y el cielo repleto de nubes que parecían moldeadas por el mismísimo Dios.
Nos sentamos a la orilla de un barranco mientras observamos el final de un amanecer, Ana tomaba la primera fotografía desde atrás.

-Esto es inmemorial.- dijo Walkyria mientras admiraba la salida del sol.
-Vi mucho amaneceres en mi vida, mayormente los observo en las salidas operacionales.- contesté.- pero este, por lejos es el mejor que vi.

Retomamos la caminata, para llegar a horario a donde nos dirigíamos, ella caminaba al lado de Ana y Lurdes riendo a carcajadas, después Nicolás se adhirió a la conversación, y verla sonreír de esa manera llenaba mi alma de placer; ella estaba feliz, entonces mi misión marchaba bien.

-Tobías.- dijo Jazmín acercándose.- ¿podemos hablar?.

-Claro.- contesté continuando la caminata.

-Sobre lo que sucedió ayer.- dijo avergonzada.

-Tú no hiciste nada.- respondí palmeando su hombro.- ya pasó.

-Perdón, yo no pensé que Esteban reaccionaría así.- insistió.- no quiero que este viaje se arruine por mi culpa, yo insistí en traerlo.

-No sigas torturándote, vamos a pasarla bien con, o sin él.

-Gracias por tomarlo de esa manera.- me dijo.- Te diré solo una cosa más, Walkyria es una buena chica, puedo ver en sus ojos que te ama de verdad, no dejes que nadie destruya eso entre ustedes.

-No lo haré.- respondí.- gracias por tus palabras, realmente son muy lindas.

Faltaban dos horas para llegar, así que nos detuvimos a almorzar, necesitábamos recargar energía para continuar.
Mauricio, Nicolás, Ana y Walkyria se sentaron junto a mi para comer juntos, después Lurdes se acercó para curar las ampollas de los pies de Ana.

-Debiste haberte vendado los pies antes de salir Ana.- dijo Lurdes riendo.

-Me hubiesen advertido antes, y no venia.- dijo bromeando.

Poco a poco se iba creando una gran relación de amistad entre ellas tres, al parecer la salida estaba reubicándonos a todos, las cosas estaba cambiando. Definitivamente Esteban no saldría nunca más con nosotros, Jazmín estaba al borde de dejarlo, y Nicolás estaba esperando que eso pasará, desde la secundaria el había estado enamorado de ella; pero Esteban había llegado primero. Mauricio tenía un cierto afecto por Lurdes, pero ella era la mejor amiga de Leila, las probabilidades de una relación entre ellos era casi nula.

Leila se encontraba en mar del plata junto a Sofía, mi ex novia, ellas eran primas de sangre.
Mi relación con Sofía sólo había durado dos semanas, ella me dejó por un turista, se fue con él a Chile, pero regresó porque la había abandonado al enterarse que esperaba un hijo suyo. Actualmente vive con los padres de Leila; los suyos la echaron cuando supieron la noticia del pequeño.

-En cinco minutos salimos nuevamente.- gritó Nicolás.- guarden sus cosas y prepárense para caminar un poco más.

Tomé mi mochila, y partimos nuevamente.

-No me dijiste que era tan lejos.- dijo Walkyria.

-¿Ya estas cansada?.- respondí bromeando.