Dove || Yoonmin

Capítulo 17: un buen padre.

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No puedo creer que Dove haya llegado a las 700 visitas ;_; de todo corazón, muchas gracias!! me alegra mucho que les esté gustando la historia. sin más que decir, disfruten! que aquí se viene otro capítulo :-)

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Solo alguna vez, en sus primeros días, tuvo miedo por estar encerrado allí, cuando vio como trataban a los demás, como lo trataban a él mismo, cómo poco a poco dejaba de ser quien era para convertirse en algo mucho peor. Pero después se fue acostumbrando, lo fue aceptando ya que todos sus compañeros lo hacían, creía que seguía el camino correcto, que estaba bien y que algún día lograría salir de allí. Incluso cuando vio que la esperanza ya estaba perdida, cuando supo que nadie saldría de este sitio jamás, no tuvo miedo, no cuando ya todo en lo que creía se había desvanecido a sus pies.

Pero ahora vuelve a tenerlo, vuelve a recorrerlo un sudor frío en cada parte de su cuerpo, siente un estremecimiento que no se va, que le hace temblar y ponerse nervioso. Tiene miedo porque nunca se ha visto en esta situación, porque nunca ha intentado escapar, porque había perdido toda ilusión, pero las recuperó y se las acaban de romper. Tiene miedo porque su padre ya no parece su padre, y es ahora, tanto tiempo que ha pasado ya, cuando se da cuenta de eso.

-¿Dónde está Park Jimin?- repite por enésima vez.

Pero sobre todo tiene miedo por eso, por tener que decirle donde está, por hacerle daño de nuevo, por traicionarlo a él, pero, más aún, traicionarse a sí mismo. Mientras pueda guardar silencio, lo hará, pero sabe que han ganado, que Dove vuelve a vencer y se alza victoriosa como siempre ha hecho.

-No me hagas perder la paciencia, Yoongi.

El ni siquiera lo mira. Debería decirle dónde está y acabar con esto de una vez, no pasará a mayores. ¿En qué momento dejó que dominara en él algo más que la razón? Nunca debió permitir que Jimin entrara en su vida de esa forma tan accidentada. Nunca debió permitir volver a ser algo parecido a un humano.

-Bien, veo que vuelves a ser un idiota que no sabe poner en orden sus prioridades- el director se levanta de su asiento-. Nunca creí que algo como esto pudiera funcionar contigo.

Camina hasta la puerta situada a la espalda de Yoongi y la abre indicándole a alguien mediante susurros que entre en la habitación. El muchacho no sabe que pasa ni que pretende y tampoco quiere averiguarlo. Cuenta con la ventaja de no esperar nada bueno.

Un quejido resueña tras él y lo reconoce perfectamente. Es, en parte, su culpa que ahora esté ahí y no haya podido volver a por Jimin. No es justo que le haga responsable, pero le hizo perder más tiempo del estrictamente necesario. Yu Kwon, uno de los últimos guardias incorporados, lleva a Taehyung casi a rastras por el suelo, sujetándolo fuertemente por un brazo que retuerce de vez en cuando. Lo deja en el suelo del despacho y sale del mismo tan silenciosamente como ha entrado. Taehyung parece estar a punto de llorar cuando el director lo levanta sin demasiado esfuerzo y rodea su cuello con un brazo, sujetándolo con la mano que le queda una navaja que pone a la altura de su cara.

-¿Me vas a decir donde está Jimin?

Sabe que la frase entera debería ser "¿Me vas a decir dónde está Jimin o acabo con él en compensación?" pero aun así no abre la boca. Ni siquiera mira a Taehyung, no quiere darle la oportunidad de lanzarle una mirada suplicante. Un grito de dolor por parte del menor le hace cerrar los ojos con más fuerza, como si así pudiera ahuyentar el sonido de su voz. No está dispuesto a delatar a Jimin, en cuanto pueda irá a buscarlo e intentará ayudarle a salir de aquí. Aunque sabe que es imposible, lo ha comprobado ya demasiadas veces en ingenuos ingresados que lo intentaban incansablemente.

-Yoongi, hijo... ¿sabes que está enfermo? Deliraba por las noches, le daban subidas de fiebre repentinamente, nosotros le estábamos ayudando, pero si no nos dices dónde...

-¿En serio te crees que soy tan estúpido?- Yoongi se levanta, siendo incapaz de seguir en silencio-. ¿En serio pretendes que te considere alguien capaz de ayudar a los demás? Suelta a Taehyung, porque no te voy a decir absolutamente nada.

Hunde la navaja un poco más en la piel del cuello de Tae y este tiembla y grita ante el contacto. También sale sangre por su mejilla, ahora por su cuello, no tardará mucho en agotar todas sus fuerzas. No quiere verlo, no quiere cargar con su muerte en la conciencia, sería ya demasiada culpa que sobrellevar.

-Suéltalo, por favor. Jimin está muerto.

Taehyung cae al suelo al ser liberado por su padre y Yoongi se arrodilla a su lado rápidamente, intentando ofrecerle una ayuda que seguramente llega demasiado tarde. Ha dicho lo primero que se le ha ocurrido y no duda que pronto su mentira va a salir a la luz, y terminará con la vida de Taehyung, la suya y la del propio Jimin. Pero sabe que haga lo que haga, las cosas se darán así, que no hay escapatoria, que no tiene sentido luchar.

-¡¿No piensas hacer nada?!- grita intentando controlar la sangre de Taehyung-. Por la mierda, por primera vez en tu vida, compórtate como un ser humano y ayúdale.

-¡Yu Kwon!- llama a su padre en voz alta. El guardia no se hace esperar-. Llévalo a la enfermería. Y cuando termines, avisa a Heechul, tengo una sorpresa para él.

Por alguna extraña razón, sabe que la sorpresa se trata de sí mismo. Yu Kwon levanta a Taehyung sin preocuparse de ser delicado y lo saca del despacho, que se queda en silencio durante unos segundos, antes de que el mayor de los dos suspire.

-¿Por qué has intentado escaparte, Yoongi? Aquí estoy yo, soy tu familia.

El chico no contesta, intenta limpiarse la sangre de Taehyung de las manos en el uniforme, que está cubierto de barro después de pasar toda la noche en el bosque. Se levanta sintiendo cómo le tiemblan las piernas y deseando poner fin a esa horrible sensación que le hace ver que está solo, pues, su padre tiene razón, solo lo tiene a él y es la persona más depreciable que jamás se ha cruzado en su camino. ¿Qué puede esperar de eso? Ya no puede esperar absolutamente nada de la vida.

-¿Qué le ha pasado a Jimin? Se fueron juntos, ¿no es así?

-Sí. Heechul le había dado una paliza antes de irnos y él simplemente no la resistió- inventa encogiéndose de hombros-. Ni siquiera sé dónde dejé su cadáver... no está muy lejos de aquí, no avanzamos mucho.

Su padre sonríe con amargura, camina hasta él y lo abraza sin fuerza, casi sin tocarlo, ni siquiera podría llamarse abrazo. Yoongi retiene las lágrimas en las cuencas de sus ojos, no quiere derramar ni una sola delante de él, no le dará tan satisfacción.

-Nunca te he pedido nada, papá- murmura alejándose de él-. Pero acaba ya de una vez conmigo. No intentes parecer un buen padre, hace tiempo que perdiste esa oportunidad.

-Siempre he sido un buen padre, he reconocido tus errores y te he ayudado a solucionarlos. Tú eres el que no ha sabido verlo.

Ahora es Yoongi quien sonríe y lo mira con pena, como si no fuese su padre quien estuviese delante de él y no fuera más que un pobre desgraciado pidiendo un poco de limosna.

-¿A quién pretendes engañar así? Ni siquiera tú puedes creerte tantas tonterías.

Tocan a la puerta y el director le deja pasar, librándose así de contestar. No tendría tampoco mucho que decir. Heechul entra en la sala con la cara herida, también el cuello aún presenta marcas y no puede dejar de sentir una oleada de satisfacción al verle así. Al menos se llevará algo del internado cuando muera.

-¿Me llamaba señor?

-Llévate a Yoongi, encárgate de él. Que no lo vuelva a ver.

Cualquiera hubiera pensado que esas palabras dolían, más viniendo de un padre, pero en realidad le calman, incluso le alegran, es casi un futuro esperanzador, aun sabiendo cuál es su destino más próximo. Después de todo lo que ha pasado, no puede sentir miedo ante la idea de despedirse de la vida. Quizás solo de no poder despedirse de Jimin.