Con amor, Megara.

Con amor, Megara | Prefacio

Camina con pesadez hasta su casillero. La clase de matemáticas del profesor Buendía parecía eterna, pero por fin había terminado. Pronto su pesadilla acabaría y podría llegar por fin a casa.
Da un vistazo rápido hacia su casillero y se encuentra con algo extraño, con duda, vuelve a revisar el número para verificar que es su casillero. Efectivamente, lo es. ¿Una carta? Imposible, ¿Quién le enviaría una carta? ¿Y por qué? Probablemente era una invitación para unirse a alguno de los talleres recreativos del colegio, o una simple propaganda de algún curso de idiomas. Sí, eso debía ser.

Después de abrir su casillero, toma la carta entre sus manos y la examina cuidadosamente. Voltea hacia ambos lados, como lo hace alguien que está a punto de cruzar la calle. Como no hay peligro de morir atropellado, abre el sobre con cuidado, dentro hay una hoja de papel doblada en cuatro partes.

Huele a vainilla. Así que supone que la carta debió ser enviada por alguna de las chicas del colegio. Lee la nota en voz baja. ¿Cómo ha podido enterarse de eso? No, no es posible. Nadie estaba ahí mas que... No, no había manera. No podían haberlo visto. Después de que el pánico pasara, dirige su vista hacia la parte inferior del papel. Está firmado. Con amor, Megara Nott.

Iniciamos la tarde de un 3 de diciembre del 2016. Volvemos a comenzar un 21 de julio de 2017.
—Paulina Gaez;