Nos encontrábamos frente a la oficina extrañamente ubicada del señor director, Albus Dumbledore, estábamos los tres, en un silencio sepulcral, manteniéndomos quietos, no queríamos hacer ruido, no fuera que fueran a aumentar nuestro castigo por hacer escándalo. Junto al director, dentro de la oficina, se encontraban Filch, la profesora Mcgonagall, y el profesor Snape, hablando y comentando sobre nuestro pequeño acto de rebeldía recientemente cometido.
Detención, eso era lo mínimo que nos iba a caer encima por el espectáculo que montamos a lo idiota, ¿cómo le íbamos a explicar al director lo que hicimos sin que nos expulsen? me sentía como la idiota más grande que pudiera existir, como si un enorme agujero se estuviera formando donde antes estaba mi estomago, pero ya no podía hacer nada, no podía usar un hechizo desmemorizante contra los profesores (para empezar no tendría posibilidades ni de llegar a ellos), menos con el director, que en este punto ya debe saber que hicimos y sólo quiere que lo digamos por nuestra cuenta.
El viejo director Dumbledore, un viejo amable, querido por muchos, y que quiere a muchos, como a Harry Potter, por ejemplo (la verdad, siempre creí que su relación ha sido sospechosa).
Aunque era un hombre de temperamento tranquilo, no era concebible que nos fuera a perdonar, a mi, por hacer volar a Draco, a él, por usar un insulto prohibido, y a Granger, por estar en el peor momento posible, en el peor momento posible. La verdad, me parecía injusto que ella cargase con un castigo cuando en realidad no había hecho nada más que defenderme, ahora me sentía culpable por dos cosas, elevar a un estudiante por sobre dos metros del suelo y hacer que una excelente estudiante como Hermione terminase castigada por mi estúpido error.
Siento que cada paso que doy es un error, cada maldita vez que siento que todo finalmente me está saliendo bien, todo se va a la mierda rápidamente, siempre, siempre tropiezo con la misma piedra, Malfoy.
A ver, tropezar no es malo, como si te tropiezas dos o tres veces, pero yo, yo me he encariñado tanto con esa piedra que sólo me falta adoptarla.
Mientras tenía una lucha interna por que de todo lo que hice es lo que me llevó a ascender a Malfoy del suelo a lo más que pudo mi débil magia, cuando escuché como Malfoy empezó a hablar, con su petulante y lambiscona voz y hermos-... horrenda. Con su horrenda boca.
-"Esto es tú culpa, Granger. Si no hubieras aparecido nada de esto estaría pasando, eres una imbécil"-
Al decir eso, parecía feliz, como si se hubiera sacado un peso de encima con sólo pronunciar esas palabras hirientes a la joven maga, pero, curiosamente no hubo respuesta, por parte de nadie, siquiera de Granger que estaba siendo atacada.
Mientras el ego de Draco se empezaba a desvanecer, junto a su pedante sonrisa, Granger sólo guardaba silencio, con una mirada seria, pegada al suelo, como si nada a su al rededor realmente importar, fría y distante, algo así como su versión antes de hacerse amiga de Potter y Weasly, triste, por llamarlo de algún modo.
Malfoy estaba a punto de seguir insultándola, pero Dumbledore lo hizo pasar a su oficina en ese momento, por lo que se ve, nos iba a hacer pasar de a uno en uno, para conseguir la versión de cada uno de nosotros a parte, a ver si funcionaban entre ellas, y no nos contradecimos demasiado. Una táctica astuta la del anciano.
Una vez Malfoy se retiró junto al director, sólo quedamos Granger y yo, y un increíblemente incomodo silencio, que no hacía más que crecer a cada segundo. Ella parecía casi ausente en esa situación, y a mi lo que es confortar gente se me da fatal, así que preferí no hacer nada antes que cagarla de lo lindo, como siempre hago en este tipo de momentos especialmente tensos.
-"¿Por qué sacaste a Malfoy volando?"-
Con eso, Hermione rompió su incomodo silencio, para darle el hermoso lugar al mio, mezclado con miedo, nervios y un montón de vergüenza que no podía comprender del todo.
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La tormenta imposible [Hermione x Pansy]
Hayran KurguPues, soy nueva en esto. No me juzguen tan feo ¿sí? Gracias :') Hermione Granger es la preferida de todos los maestros, siempre da las respuestas correctas, siempre la mejor en todo, la mejor amiga del elegido. En cambio ¿qué soy yo? la invisible, l...